Mi Evans (James Potter Y Tú)

Capítulo 18

*Narradora*
Los días pasaban en Hogwarts y pronto serían los examenes finales, cosa que ponia loca a _____________ y su novio, James, no ayudaba en mucho.

—Por quinta vez, James Potter —dijo frustrada—, estaba en la maldita biblioteca. ¿A caso no confías en mí?

Se encontraba a fuera de la entrada de la Sala Común de Gryffindor. James de nuevo se había puesto celoso porque _____________ se iba a estudiar a la biblioteca con algunos alumnos.

—En ti sí, en ellos yo —frunció el ceño.

—Calma tus celosos —dijo rodando los ojos—, no nos llevaran a nada si sigues así.

Empezó a caminar al retrato de la Señora Gorda intentado calmarse, hasta que James la abrazó por detras.

—Lo siento —le susurró en el oído—, solo que no me gustaría perderte —la pelirroja se relajo y James lo sintió, sonrió e hizo que girara a verlo—. Intentaré dejar mis celoso a un lado —hizo una mueca y su novia rio.

—Eres un tonto, Potter. Solo te quiero a tí —dijo la pelirroja dándole un beso.

Pronto también se acercaría Luna llena, cosa que a Remus casi no le gustaba y mucho menos a las chicas, pero para los demas chicos era una nueva aventura, sin importar lo arriesgado que fuera.

*Narra James*
Estabamos en la habitación con Remus y Peter; ya casí sería de noche y tendríamos una nueva aventura en el bosque prohibido como animagos.

—¿Listo para lo noche? —le pregunte animado a Remus desde mi cama.

—Como siempre —respondió distante y luego me miró—. ¿Y Canuto?

—Aquí —dijo entrando a la habitación—, sé que no pueden vivir sin mí —sonrió arrogante.

—Ya quisieras —dije bromeando.

—Me ofendes, Potter —dijo haciéndose el ofendido.

—¿Donde te habías metido? —preguntó Remus un poco malhumorado—. Ya casí es de noche y nos tenemos que ir.

—Lo sé, solo arreglando algunas cosas —sonrió.

—Será mejor que nos vayamos ya —dijo Peter algo nervioso.

—Opinó lo mismo —sin decir nada más Remus salió de la habitación.

—¿Qué hiciste, Canuto? —pregunte divertido.

—Nuestro querido Quejicus siempre se anda metiéndose donde no lo llaman —dijo aún más divertido—, así que sin querer le dije que podía ver algo de Remus hoy —sonrió satisfecho.

Deje de sonreír y lo miré un poco asustado. Una cosa es molestralo y otra que Remus le pueda hacer daño o incluso matarlo.

—¿Estas loco, Sirius? —pregunte serio y levantándome de mi cama.

—Vamos, James, es solo una broma —dijo sin darle importancia.

No pude decir nada más porque la puerta se volvió a abrir, entraron _____________ y Sasha.

—Peter los espera abajo —nos avisó Sasha—, Remus apenas se acaba de ir.

—Genial —sonrió Sirius y salió rápido de la habitación.

—¿James? —dijo acercándose a mí _____________—, ¿estás bien?

—Si... Tengo que irme —dije nervioso—.

—Ten cuidado —me susurro cuando pase a su lado.

Salí rápido de mi habitación y al bajar a la Sala Común ya no estaba Sirius y Peter.