¿Me? ¡¿Fall in love?! [Daniel x mario]

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Mario tomó el teléfono de su oficina y marcó esa secuencia de números que ya se había aprendido de memoria.

-Hola ¿Tienes un momento?

-Si ¿qué pasa?

Daniel habló con un tono calmado y algo feliz por la llamada del castaño.

-Mañana voy a irme de viaje a palm beach, quiero que está noche vayas conmigo a Ópera.

-¿Enserio? Claro.

-Si, no llegues tarde, a las ocho en el teatro Colón.

El mayor colgó como lo estaba haciendo en esos días dejando al menor igual de desconcertado que las anteriores veces.

Llegó la hora de la función y Daniel salió de su carro viendo a Mario a lo lejos.

-Hola.

Saludó con una sonrisa mientras que el mayor solo lo saludo de beso empezando a guiarlo hacia su balcón, la música y las voces de los actores simplemente eran espléndidas para el menor viendo la obra con atención, hasta que llegó el intermedio donde notó que el castaño estaba observándolo sin expresión alguna.

-Mario ¿tengo algo en la cara?

-Aam...no, solo que me gusta mucho cuando sonríes de esa manera, tus ojitos brillantes, mejillas un poco sonrojadas y labios...creo que todo tú eres de mis cosas favoritas en este mundo.

Daniel se quedó boquiabierto por un par de segundos, Mario le hablaba con mucha dulzura pero aún así su lenguaje corporal era rígido y se veía muy serio, pero el menor no sabía exactamente como responder así que solo dijo lo que sintió correcto.

-G-gracias...tú, eres peligroso ¿sabes? tengo taquicardia cuando te veo, cuando tus manos me tocan siento escalofríos, siempre me haces caer ante tus juegos y-y...tus hoyuelos, deberían ser ilegales, me vuelven loco la verdad...eres demasiado peligroso para mí, pero te quiero a mi lado de todos modos.

Mario sintió que quería llorar, para él esa había sido la confesión más Daniel Valencia, osea la más hermosa, que había escuchado así que sin pensarlo demasiado lo tomó de la nuca empezando besarlo con ternura.

-G-gracias, enserio, gracias.

Cuando Mario se separó sonrió en grande, tal vez se había preocupado demasiado, alfin y al cabo Daniel si lo quería como él y podía hacer lo que debió hacer hace rato, sin calcular tanto sus acciones sin, pensar es solo enamorarlo por su amigo, sino por el mismo.

-solo fuí sincero.

Daniel se encogió de hombros sonsteniendo una pequeña sonrisa.

-Lo sé, así que quería preguntarte algo....Daniel Valencia ¿quisieras ser mi novio?

Este solo rió nervioso viendo hacia otro lado, confundiendo a Mario pero cuando sus miradas volvieron a conectarse este solo asintió, pero el castaño no pudo decir nada más porque la función se había reanudado.

Cuando salieron del teatro Daniel juraría que Mario daba saltitos de felicidad.

-¿Ahora a donde vamos? ¿Qué quieres hacer? Yo te llevo a donde tú quieras.

-Ya ya, calma, solo vamos a tu apartamento y ya.

Se quedaron esperando en la entrada del lugar mientras esperaban el carro Mario y este abrazaba con fuerza a Daniel.

-Sisi, todo lo que tú pidas, mi amor.

-No me digas así.

El menor lo separó con el ceño fruncido haciendo que Mario hiciera puchero.