El amor no es para mi

14. ¡Pelea, Pelea, Pelea!

Estábamos sentados en algún lugar de este salón…o lo que sea en lo que estamos.

—¿Quién es ella? —le pregunté a Taylor arrastrando las palabras. Estaba demasiado ebria como para procesar algo.

—¿Quién? —preguntó el. Que por cierto yo no era la única ebria. Él estaba igual que yo.

—La chica. A la que mirabas hace un rato. Y la que te miraba y se miraban…mirarrrr. —¿Qué babosada estoy diciendo? ¿Por qué dentro de mi cabeza me escucho bien y cuando lo hablo parezco la abuelita de Bob Esponja?

—Ella…era mi novia. —y comenzó a llorar. ¿Qué le sucede a ese chico? Maldito alcohol, mira lo que le haces.

—Tranquilo… ¿Qué sucedió? —mi consuelo no salió tan bien.

—Yo… la engañe…no sabes cuánto me arrepiento. —dijo entre sollozos. —Ella me dejo…pero aún hay algo entre nosotros. Ella se enoja cuando besó a chicas y me hace poner celoso. Y… y… y yo no puedo hacer nada—dijo como un niño chiquito haciendo berrinches.

—Ay. Que idiota. No te voy a juzgar pero ya no me caes bien por engañar a las pobres chiquillas inocentes. —dije. Me siento toda una abuelita sabia. Yo soy muy sabia.

—Lo sé. Vine para verla. Solo para eso. Quiero arreglar las cosas… Pero ahora ella esta con un chico. —y lloró más.

—Mira, ahora tú te encuentras ebrio. Así que tu plan de “Y le pediré perdón y viviremos felices para siempre” No funcionará. —el dejó de llorar y me presto mas atención. —Pero lo intentaremos. Irás y le dirás todo lo que sientes. Pero por favor, no la cagues. Tengo un plan… Iremos los dos. Yo le diré que quieres hablar con ella, y si en un dado caso la cagas, yo estaré ahí.

Me paré sin esperar su respuesta y me acerqué a la chica. Ella me miro furiosa…muy furiosa.

—Hola—le dije moviendo los dedos de mi mano en señal de saludo. En vez de ser cortes, ella se acercó y me planto un puñetazo en mi ojo. Yo hice lo primero que se me ocurrió.

Le jalé el cabello pero, no tenía fuerzas ni para mantenerme en pie, así que me caí y su cabello se soltó de mi mano. Así de mágico. Ella se sentó a horcajadas sobre mí y comenzó a jalarme el cabello. No podía sentir bien pero sé que debería de dolerme.

—Hija de puta. ¿Qué no piensas hacer nada? —me grito a través de la música.

—¡Estoy ebria, tarada! —conteste cerrando los ojos. Podría dormir en este momento.

Me jaló más del cabello. Pero esta vez sí que lo sentí. Y comencé a gritar. Mucho, con todas mis fuerzas. Ella me dio un puñetazo en el mismo ojo al que le había dado antes.

—¡Oh, zorra! —grite. La golpee como pude. La jalé del cabello lo más que pude. Hasta me sorprendí cuando le rompí la camiseta que llevaba. Ella estaba gorda. La miré con asco. Ella me jalo mucho de mi cabello, y vi cómo me arrancaba unos cuantos. Y comencé a gritar. Grité, grité, grité.

—¡Pelea, pelea! —gritaban a nuestro alrededor. Ósea, yo muriendo y ellos haciendo nada y gritando “pelea”. ¿En dónde estaban mis amigos ahora?

No se cómo, ni cuando, pero alguien me estaba cargando llevándome fuera del local. Mire mi camisa y vi que mi playera de cuadros había desaparecido.

Yo tenía sueño y estaba cansada. Me recargué en el pecho de la persona que me llevaba y me dormí.

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HOLA! Que tal?

Hoy es... No se que día es, pero sé que no es Martes y que subí capitulo!

Estaba aburrida y me puse a escribir. Tampoco tenia mucha imaginacion, asi que es un capitulo, Super Mega Hiper Chiquito.

Muuuuy Chiquito. Pero subí.

Y pues ya. Los quiero. Voto y comentario, porfis. Me hacen feliiiz!

Asi que... Bye!