Capítulo 13: Estrellas

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Siento como los nervios se apoderan de mí, no pude pegar ojo en toda la noche, no quiero ir a trabajar, no quiero hacer nada e incluso estoy a nada de rechazar la propuesta, pero quedaría como pendeja inmadura.

Me levanto sin ganas de nada, siento que si no lo hago Riley vendrá de nuevo con un vaso y me lo tirará. Me voy a duchar, una vez que salgo del agua, me reviso que esté bien depilada. Elijo una pequeña ropa interior de encaje de color roja, me doy vuelta en el espejo y estoy segura que quedará loco al verla. Después me pongo un vestido negro que se ajusta a mis caderas, es sexy pero no tanto porque debo ir a trabajar, ya llevo una hora de atraso, pronto comenzará a llamar Caroline para saber si estoy bien o no.

Dejo mi cabello suelto y guardo mi labial de color rojo para ponérmelo más tarde. No desayuno por los nervios y solo me dirijo hacia mi trabajo. Cuando llego Caroline me sigue hasta mi oficina se cruza de brazos, al parecer está nerviosa y quiere preguntarme algo.

- ¿Estás bien? -niega- Dime que ocurre.

Me siento en mi silla y ella se sienta al frente mío, se tapa la cara con sus manos y apenas habla.

-Me...me gusta Travis- suelto un chillido y ella da un salto.

-Se te notaba ayer mientras hablaban- le guiño un ojo y ella se sonroja.

-Si...-mira hacia el suelo y siento que está triste- Pero le gustas tú, el me lo dijo, que al parecer le das esperanzas.

-No, hablaré con él para que no haya confusiones, lo quiero solo como amigo, así como a Tyler- me mira y le brillan sus lindos ojos color café.

-Gracias, tenía miedo de que te enojaras- niego rápidamente.

-No te preocupes, en cosas del corazón uno no las elige y se enamora del que menos se lo espera- pienso en Alex.

-Y tu... ¿estás con Arthur o Alex? -me sonrojo.

-Con ninguno, pero hoy en la noche me juntaré con Alex en el hotel Eclipse, estoy que exploto de nervios- se ríe.

-Dios, es muy raro que estés nerviosa- se para para seguir trabajando- Te dejo, hay que seguir trabajando, te dejé unos papeles ahí sobre los pacientes que debes dar el alta o no, ¿almorzamos juntas?

Asiento y se marcha.

Mientras leo los papeles, pongo música para relajar las tensiones, Caroline me llama.

-Travis está aquí, ¿lo hago pasar? -suena decepcionada, quizás pensó que la venía a ver a ella.

-Hazlo pasar y puedes estar tranquila, no haré nada con él.

Ordeno un poco mi escritorio para poder recibirlo y dejar muchas cosas claras para que no haya confusiones o problemas a largo plazo.

-Preciosa- levanto una mano para que no me diga así- Vaya...no andamos de muy buen humor ¿o sí?

-Amigo, querido amigo- recalco la palabra, mientras se sienta al frente mío- Necesitamos hablar.

-Si...ya lo creo- hago que se acerque y tomo sus manos junto a las mía.

-No sé como decir esto, pero Travis siento que te estoy dando falsas esperanzas tal vez, te quiero, pero como amigo, ya nos conocemos aproximadamente hace dos meses y eres un chico super especial, pero no creo poder pensar de otra manera sobre ti- le brillan los ojitos y aprieta mis manos.

-Sé que te puedo cambiar de pensar, dame la oportunidad- niego levemente mientras suelto sus manos- Tan solo una.

-No cariño, sé muy bien como soy y no hay nadie que me pueda hacer cambiar de parecer u opinión, créeme de verdad cuando te lo digo, solo trato de no hacerte sufrir o sentir mal, eres muy guapo y encontrarás la persona que te quiera, incluso puede estar mucho más cerca de lo crees- trato de insinuarle a Caroline disimuladamente.

-Está bien, ¿seguiremos siendo amigos? -suena como un niño pequeño a veces.

-Obvio que sí, ven aquí- nos paramos y nos damos un abrazo- Eres de mis mejores amigos, junto a Ty.

-Es bueno saberlo, ¿estabas muy ocupada? -dice mientras volvemos a nuestros lugares.

-No, incluso ya estaba terminando, iba por ir a almorzar junto a Caroline, la llamaré- tendré que hacer medidas extremas para que estén juntos como dé lugar.

Entra Caro y se sonroja al ver a Travis, es tan tierna.

- ¿Vamos a almorzar? -es hora de actuar.

Me pego en la frente con mi mano y los dos se me quedan viendo.

-No puedo...joder se me olvidó algo en casa- trato de contener la risa- Pero, vayan ustedes por favor, así pueden hacer buenas migas.

-Claro que sí, ¿vamos Caroline? -dios está como un tomate y apenas le asiente a Travis.

-S..sí, vamos.

Travis se despide de mí y sale de mi oficina mientras que Caroline me fulmina con la mirada y yo le guiño un ojo, suelta una risita nerviosa. Quedo satisfecha con mi actuación, deberían darme el premio a la mejor amiga del mundo.

Pedí comida y adelanté mucho trabajo, no sé si mañana llegaré a trabajar así que dejo todo en orden, tocan mi puerta y grito para que entren, es Caro y me fijo en la hora ya son las seis y siento un revoltijo en mi pobre estómago.

- ¿Cómo te fue? - da un salto de alegría con el que quedo estupefacta- ¿Tan bien te fue?

-Joder si, es tan bello y me contó muchas cosas, además estaba interesado en saber sobre mí, cosa que agradecí, no todos los hombres se interesan por una- asiente- ¿Estás adelantando trabajo?

-Sí, de eso te quería hablar, mañana como es viernes, tienes el día libre.

-Muchas gracias, ¡te amo! - sale casi corriendo de mi oficina.

Voy hacia el baño para maquillarme y prepararme mentalmente, cuando salgo me fijo de la hora y ya son las siete, debo partir, ya que, el hotel queda lejos y quiero llegar a la hora para no recibir reproches de nadie.

Me despido de mi amiga, me dirijo rápidamente hacia el estacionamiento y tomo rumbo hacia el hotel, me relajo escuchando música y cantando. Una vez que llego espero a que sean las ocho y me bajo, lo espero en la entrada, pero no veo a nadie, opto por enviarle un mensaje.

Roxi: Ya llegué, estoy esperando.

No pasa ni un minuto y me responde.

Alex: Cuarto piso, habitación 167.

Sin decir más me dirijo hacia allí, subo en el ascensor, al frente de la puerta toco para que me abra. Me abren, pero no veo a nadie, sin dudarlo entro y siento un cuerpo detrás de mí. Posa sus manos en mis caderas y observo lo grande que es la habitación, siento su aliento en mi cuello y comienzo a excitarme.

-Te colocaré una cinta alrededor de tus ojos- me susurra con su voz tan ronca y se me eriza la piel- Te ves preciosa, nada nuevo en ti la verdad.

Me quedo en completo silencio cuando veo todo oscuro, no logro ver nada, la cinta al parecer es de color roja, buena elección, combinará con mi linda ropa interior. Pasa las yemas de sus dedos alrededor de mi brazo derecho sintiendo como se eriza mi piel bajo su contacto. Se separa de mí y siento que se me olvida como respirar.

-Ahora te quitarás ese jodido vestido que está molestando- me quita mi bolso que está sobre mis manos.

Hago un lado mi cabello para bajar el cierre de mi vestido, no sé dónde está, pero trato de hacerlo lo más sensual que puedo, bajo poco a poco mi vestido hasta dejarlo en el suelo. Paso mis manos por mis caderas, subo por mi abdomen y llego hasta mis senos, los masajeo para subir el nivel de calor, que por cierto el mío ya está por las nubes.

-Dios, eres la perfección hecha mujer, ahora te dejaré sobre la cama y te haré ver estrellas dulzura.

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⏰ Última actualización: Aug 09, 2021 ⏰

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