MOONLIGHT -KANON X MILO X CAMUS-

||• EL DOS COLORES 🥀

Escucho por las enfermeras que habían transferido a un nuevo doctor, la verdad es que no le intereso ni un poco.

Algunos delgados tubos estaban ligados a su brazo, un suero Recorría sus venas sin permiso ni autorización. La noche anterior había tenido una crisis que con gran trabajo los calmantes pudieron tranquilizarlo, aunque tenía miedo, miedo de que le volviera a pasar de nuevo y no pudiera controlarlo o escuchar de nuevo esas voces.

Se quedó en una cama reposando, hace minutos que había "despertado" ya que aún tenía sueño, estaba totalmente Tranquilo y lleno de paz cuando escucho que la puerta era abierta, no se inmutó a abrir los ojos, pero lo hizo al escuchar la voz de quién entraba.

Se sorprendió y a la vez los colores llenaron su casa ¡Era el "dos colores" con bata de doctor! ¡¿En verdad era él?!

Rápidamente trataba y quería levantarse, pero su cuerpo no respondía y los brazos no querían moverse, que mala jugada.

– No te muevas, podrías lastimarte – dijo el doctor corriendo para llegar hacia él

Milo no artículo ningúna palabra, solo se lo quedaba viendo como si fuera lo más interesante en el mundo, como si fuera lo más hermoso.

– Tu...  Usted... Eh...

– Dejas las formalidades Milo, casi tenemos la misma edad, soy Camus Aquarii y hoy te atenderé – respondió mostrando una sonrisa que literalmente derritió a Milo

– Eh.. Soy Milo Scorpii – dijo sin pensar aunque el doctor ya sabía cuál era su nombre – La verdad no se qué edad tengas...

– Tengo 24

– Eres muy joven para ser doctor... – movió sus manos negando lo que acabo de decir– D-digo, que es admirable que a esa edad tengas esa profesión

– Te agradezco el cumplido Milo

Después de inyectar más suero en los tubos que conectaban su brazo el "Dos Colores" se sentó en un banquito frente a Milo para charlar un poco mientras pasaba el suero.

– No pensé que mi primer paciente fueras tú, en algo increíble

– ¿Porque dices eso? Aún no me conocías... – contesto algo triste al pensar que el doctor nunca lo había notado o al menos visto

– No te conocía, pero siempre te notaba cerca de mi, como en la cafetería

– ¡¿En serio me viste?! – su corazón empezó a latir con fuerza y alegría al escuchar tales palabras

– Claro, nos saludamos mutuamente, como olvidarte aquella vez

– Bueno es que... – jugaba con sus manos– Pensé que no te acordabas...

– Milo – tomo la mano del nombrado– Se que algún día estarás en paz sin algo que te moleste, yo lo sé

– ¿Me ayudarás?

– Por supuesto, soy tu doctor y te ayudaré a salir adelante

– Gracias Doctor..

– Milo

– ¡Perdón! Camus – sonrió apenado

Se puso nervioso al sentir una cálida mano sobre la suya, que casi empezo a delirar.

– ¿Que pasa?

– Bueno, yo, es que, me pone nervioso tu cercanía.. no, este digo– en la mente de Milo había una ardilla que antes de correr por su rueda corría del otro lado

– Perdón, no quería que te sintieras así

– ¡No te disculpes! – hablo rápidamente logrando que Camus no se disculpara más– Bueno, Gracias

– Estaré para lo que necesites – hablo algo confundido por el comportamiento pero termino sonriendo y hasta parecerle tierno

– ¿Podrías estar conmigo hasta que duerma? Se que no soy un bebé.. pero-

– Está bien Milo, es normal querer estar con la persona con la que te sientas protegido ¿No? – beso la frente de su paciente

Milo sonrió embobado al sentir aquel beso, como desearía mil veces que besara su boca y no su frente.

Despertó después de algunas horas, noto que el sol estaba ocultándose, vio a sus lados y noto en banquito que estaba frente a él, después lo recordó el "Dos Colores" estuvo frente a él y hasta le dió un beso.

En eso entro Afrodita, al verlo despierto se alegro.

– Milo... ¿Cómo te sientes?

– Me siento bien... Eh.. creo que demasiado bien

– Está noche te llevaremos a tu dormitorio actual, así que no te preocupes

– ¿En serio? Este lugar casi se siente como un hogar

– Espero que siempre te sientas así porque no dejaré que ninguno de mis pacientes le suceda algo – sonrió contagiando la sonrisa a Milo

Milo se asusto al escuchar un fuerte grito, Afrodita también volteo a ver a la puerta, vio como enfermeras y un doctor llevaban a un paciente quien tenía una ataque de nervios.

– Mu – pronunció Afrodita acercándose al nombrado – ¿Que sucede?

– Llegó hoy y no está feliz de llegar aquí

Contesto un peli-lila quitándose los lentes, su cabello era tan largo que se veía increíblemente atractivo con esa bata de doctor. Ordenó a las enfermeras que lo llevarán a una habitación y le colocarán un calmante.

– ¿Él es tu nuevo paciente?

– Si, te presento con él

Afrodita y Mu se acercaron a Milo.

– Milo, él es Mu Arietis, también es un doctor de este hospital – lo presento

– Un gusto Milo

– Hola – contesto tímido, preguntaría otra cosa pero se detuvo dejando que los doctores hablarán

Después de una plática entre los 3, los doctores se fueron dejando solo a Milo. Este solo podía pensar en el "Dos Colores".

– Aún sigue tan guapo...

Y era cierto, los lentes que llevaba lo hacían ver atractivo y su cabello que aunque era de un solo color parecía tener verde y azul mezclado, era una simple belleza. Una misteriosa maravilla del mundo que nadie había descubierto más que él.

Sonreía enamorado al pensar en Camus, pero luego recordaba ese "Roce en la cintura de el "Dos Colores" que se le pasaba la alegría ¿En serio tendrá novio? ¿Porque le dió ese beso tan sorpresivo?

Era algo inusual que tú doctor te de un beso en la frente ¿Quien hace eso? Amenos que sea tu mamá... ¡¿El dos colores era su mamá?! Imposible.

Se levantó de la cama y vio de nuevo el banquito.

– Espero verlo de nuevo, aunque será en bastante tiempo ya que tiene muchos pacientes..

Dijo, sonrió y luego lentamente se recostó pensando en que podría conocerlo más con el tiempo.

•¡RETUMBA COSMOS!•