Un alma disidente puede llegar a amar y el corazón más inocente sería capaz de dañar, porque hasta las rosas más hermosas se marchitan en la obscuridad...
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Yixian
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Lewis
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Hapril
- Yixian-
Desde la puerta del aula me detuve a observarla en silencio. Era inaceptable todo lo que Hapril estaba viviendo. En situaciones así me alegraba ser la chica solitaria que no se relacionaba profundamente con nadie. Todos me aburrían. Sentía que a cada niño de mi salón lo estaban educando con un manual de como ser imbécil que seguían a la perfección. Yo no era así. Todos me caracterizaban como la chica linda y popular que venía en coches distintos cada semana, pero me importa una mierda el dinero. Estaba harta de los estereotipos estúpidos. Ella era distinta a todo lo que me había acostumbrado a ver. Podía notar el dolor y el sufrimiento en su mirada por lo que decidí que intentaría acercarme a ella para ayudarla a sanar un poco su alma rota. Hapril se sentía sola y yo necesitaba una amiga.
—¡Hola! ¿Te molestaría que ocupara el asiento a a tu lado?— le pregunté.
La expresión en sus ojos creo que no se me olvidará en la vida. Estaba atónita sin poder reaccionar a mi pregunta. Después de unos segundos logró contestar con un tono de –¿En serio tú? ¡No me lo puedo creer!– Hasta una sonrisa se me escapó con la escena que acababa de presenciar.
