Ya llevaban más de dos semanas juntos y al parecer todo era flores y colores, al menos eso es lo que hacían que todo el mundo crea. Todos pensábamos que serían la pareja perfecta, ambos rotos pero que se complementan y cuando están juntos, eran los mejores el uno para el otro. Todos lo creíamos, hasta ellos y las amigas de Emily, las cuales se habían puesto muy contentas al enterarse de la nueva pareja sin titulo de novios, pero no siempre es como pensamos. Muchas veces las parejas que mejor se ven con la gente son las que tienen las peores peleas y las que viven con problemas.
-Siento que no me quieres - le decía una vez más Hades
-Yo te quiero, ya te lo dije mil veces. Perdón si no puedo ser la chica que vos querés pero no puedo dar más, te estoy dando todo de mí y nunca alcanza siempre querés algo más. Yo ya no puedo más- ella ya no podía más con las peleas y los gritos, con las quejas y los reclamos, era demasiado
-Perdóname Em, no quiero ponerte en esa situación, es solo que me cuesta todas las restricciones que me pones. Entiéndeme un poco a mí también, cuesta quererte a veces-dijo él arrepintiéndose de lo que acababa de decir a los segundos
-¿Cuesta quererme? Podes irte a la mismísima mierda, si tanto te cuesta no me quieras más- le gritaba ella entre lágrimas
-Emily no quería decir eso, no me cuesta quererte es solo que tenemos una relación complicada, podrías entenderme alguna vez, no pido demasiado-intentaba explicar Hades mientras se acercaba a ella y la abrazaba
Ella estaba tirada en el piso llorando pero no quería que él la tocara, quería estar sola y desaparecer. Quería volver a marcar sus brazos y que la sangre corra, pero tenía que ser fuerte, si ella se lastimaba él también lo hacía, había tardado varias semanas en entenderlo, pero después de constantes "Si no estas me mato" "Sos la razón por la que sigo acá" "Si vos te vas yo también" sentía mucha carga sobre su espalda.
-No me toques, no te quiero cerca, no ahora- dijo parándose de golpe para apartarlo, había sido una mala idea el acto reflejo que tuvo Hades fue pegarle al piso con tal fuerza que asustó a Em
-Nono, no te asustes, fue una reacción nada más- intento calmarla sabiendo lo que se venía
-Andate-fue lo único que dijo ella, estaba en shock
-Emily, yo...
-¡Te vas ya mismo!- gritó mientras se abrazaba a ella misma
-Bien, me voy, pero sabes que yo te amo y nunca te lastimaría. Nunca vas a encontrar alguien que te quiera tanto como yo-le dijo antes de irse, como si eso arreglara algo
Las peleas en la relación de Emily y Hades se estaban volviendo costumbre, él pedía algo que ella no podía darle o ella se negaba a algo y todo volvía a empezar. Los gritos y los floreros rotos abundaban en ambas casas cada vez que algo de eso pasaba y para la desgracia de las flores, eso pasaba muy seguido. Aunque para el resto del mundo ellos estaban bien, la verdad era otra. Ella le ocultaba la verdad a sus amigas, no quería que supieran y Hades no para de suplicarle que nadie se entere de los problemas que ellos tenían porque eran internos de la pareja y cuando alguien de afuera se metía todo se complicaba
Después de la última pelea de la pareja, Hades había vuelto a su casa roto, sin ganas de nada. Fue directamente a su cuarto y sacó una caja de abajo de la cama y una lapicera. Empezó a escribir una de las nuevas cartas para la chica, una carta que nunca le darle, ya que era la carta más cruel que le había escrito. Emily seguro le iba a hablar dentro de poco, no resistiría mucho tiempo sin él, la verdad era que se necesitaban. Él sabía que era uno de los pilares de ella, eso significaba que no podría estar mucho sin él, de ser así se derrumbaría. Aunque la verdad era que para Hades ella también era un pilar, la necesitaba y quizás más de lo que ella a él.
Hades pasaba por muchas cosas, eso no justificaba como trataba a la gente que lo quería o todo el resto de cosas que hacía mal, pero la realidad era que el chico no la tenía nada fácil. La chica que le gustaba no lo quería de la misma manera en la que lo hacía él y si él pedía que le entregue lo mismo que él estaba dispuesto a entregar parecía que la estaba obligando y eso no era así. ¿Qué le faltaba? ¿Qué problema tenía él que no lo podía querer como él lo hacía?
Emily había empezado a superar su problema con las lesiones, pero no era igual para todo el mundo y pareciera que la gente solo se preocupa por ella, así que mentía una y otra vez ¿Él? Él estaba jodidamente deprimido, pero no podía demostrarlo, no podía mostrar sus heridas frescas porque de hacerlo Emily no tendría a quien recurrir cuando lo necesitaba. Aún así no sabía hasta cuando lo soportaría, él era fuerte pero luchar solo cuesta y mucho. El mundo lo seguía odiando, salvo un par de personas a las que Emily había convencido que era buena persona. Esas pocas personas lo aceptaban, porque tampoco se podía decir que lo querían o que les agradaba y eso era porque no sabían nada de las peleas que ellos tenían, sabía que si lo supieran la alejarían de él y eso no lo podía permitir, no la podía perder.
Así que después de todo seguía siendo él contra el mundo, con una sola persona que no lo abandonaba, pero que tampoco estaba para él como quisiera, así que al final de todo estaba bastante solo y no sabía como salir de eso. La mierda en la que se había metido era su día a día y la única persona que lo ayudaba ahora creía que él estaba completamente bien. Sí, estaba realmente mal.
Alaska K.
290.555 (09/04/2021 a las 21: 48 pm horario en Argentina)
742. 856 (10/09/2021 a las 21:05 pm horario en Argentina)
ESTÁS LEYENDO
Acto Suicida ✅
Ficção AdolescenteA veces sentimos que el mundo se nos viene abajo, que no podemos más y buscamos una forma de no sentir eso. Pero a veces la forma que encontramos nos termina lastimando aún más. La gente que me ve, me suplica que siga de pie, mi pregunta es ¿Cómo l...