Daddy's Boy ⎯⎯ [ EndeHawks ]

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Touya abrió los ojos lentamente, su alarma interna ya le decía que tenía que levantarse, y eso le preocupó pues nunca antes había tenido una alarma interna, siempre era su papá quien lo despertaba, y ahora no había pasado, así que al mirar a su alrededor vio que estaba en la sala de su casa, al parecer se había quedado dormido mirando la película. Iba a levantarse pero notó que la manta que lo cubría estaba más abultada, y al levantarla su corazón quiso salirse de su pecho, un dormido Keigo se aferraba a su cintura. Se puso a pensar e intentar recordar más hechos de la noche anterior, ¿acaso ellos...? No, sería imposible, su papá estuvo con ellos así que no cree que algo llegara a pasar.

_Hey~ despierta pajarito. –lo llamó con una voz coqueta y más ronca de lo usual por recién despertarse.

Lentamente Hawks se despertaba, sintió que abraza algo y que sus cabellos eran acariciados, así que supo quién sería, completamente feliz soltó una risita.

_Buenos días En- ¿Touya? –confundido miró a su mejor amigo sonriendo como el bobo que era, ¿qué demonios? ¿lo de anoche fue un sueño? Oh santa mierda ¡¿Y si se besó con Dabi pensando que era Enji?! Entró en pánico y se alejó por completo del pelirrojo.

_¿Qué pasa? Sé que estoy guapo, pero no es para que te asustes. –bromeó al ver a Keigo reaccionar así, le extrañó porque lo haya visto asustado y... ¿decepcionado? Como sea, se levantó del sofá y estiró su cuerpo. Ahora tenía que averiguar porque su padre no lo había despertado, era fin de semana pero el viejo siempre lo despertaba temprano no más para joder.

Hawks no sabía que pensar en ese momento, ¿había sido un sueño o no? Suponía que sí lo fue pues jamás en su vida Enji lo habría abrazado de esa manera tan protectora, y ahora tenía que inventarse algo para que el cara calamar de Dabi no sospeche de sus reacciones tan exageradas, así que soltó una larga carcajada.

_Me asusté por tu olor a perro mojado, ¿hace cuánto no te bañas? –preguntó entre risitas mientras él mismo se levantaba para estirarse y volver a sentarse en el sofá.

_Para tu información, bañarse está sobrevalorado, no lo hago porque se gasta mi belleza, dos veces a la semana es suficiente. –se justificó mientras comenzaba a caminar hacia la cocina donde sabía que estaba su papá, pues podía oler el aroma del desayuno cocinándose.

_Uy, debiste bañarte mucho en tu pasado ¿no? –lo molestó soltando carcajadas audibles mientras volvía a recostarse un rato más en el sofá, aún tenía cosas que pensar.

Dabi solo le sacó el dedo del medio hasta que llegó a la cocina, y ahí estaba su papá, cocinando quién sabe qué; por alguna razón, se sentía ligeramente nervioso, no era miedo, jamás le tuvo miedo a Enji, eran un tipo de nervios como si fueras a enterarte de cosas que sabes que te cambiarán la vida.

_Buenos días, viejo.

_Buenos días, hijo.

Touya caminó hasta acercarse un poco más y apoyarse en la mesa a espaldas del pelirrojo mayor. Lo miró un rato y luego miró a la cocina, curioso por la comida que olía bastante bien, al parecer eran huevos revueltos con salchichas, había tostadas haciéndose en el tostador y café preparándose en la cafetera, valga la redundancia... Y era algo que le sorprendía, pues su padre era más de hacer comidas tradicionales (por no decir que era lo único que sabía hacer) y le sorprendió aún más que ese sea su desayuno ideal favorito, ¿sería solo casualidad o Enji sabía que le gustaba eso?

_Y... ¿qué haces? –preguntó aun ya sabiendo la respuesta, pero quería saber el porqué de aquello, y le molestaba eso, pues jamás se sintió especialmente interesado en cualquier cosa que incluya a su papá. Y le molestaba el sentimiento que le causaba el intuir que respuesta sería, no quería escuchar tal cosa.