Su rostro cautibava a la gente, su mirada era penetrante, su rostro era encantador, su voz era simplemente perfecta, su personalidad fría y misteriosa atraía a más gente, su cuerpo era exquisito.
su edad, su verdadero nombre, su vida por fuera de la...
Ocho presencias sentadas en un silencio tenso, a decir verdad solo cinco de ellos lo sentían, los otros tres estaban extasiados en tener a su ídolo sentado en la mesa de su comedor, en SU casa.
Realmente parecía una escena de película.
-¿Cuando llegaste King?.- Pregunto el menor de los coreanos, a pesar de que este supiese la hora de su llegada, tenia que buscar un tema de conversación. Incómodo por el apodo, pensó en decirle su nombre, pero creyó que era muy pronto, aunque también le molestaba el otro nombre que le tenían-.
-Esta mañana.- Contesto con su característica expresión-.
Tras la respuesta que dió el latino, nuevamente un silencio incómodo domino el lugar, el cuerpo del latino se empezó a tensar.
Solo quería salir de tan incómodo ambiente e ir a dormir como dios manda; sin embargo, sabía que el hecho de irse así como así sería de mala educación y crearía un mala imagen de él, por lo que prefirió aguantar solo un poco más.
-He de admitir que me sorprendió verte, por lo que se; jamás has venido a corea ¿Que te trajo por aquí?.- El líder del grupo intento empezar un conversación con el latino, sino fuera por qué el menor de todos supiera coreano de una forma muy fluida, le hubiera hablado en inglés-.
-No estaba en mis planes, al comienzo iria a Inglaterra, pero las cosas se cambiaron y aquí estoy.- Hablar con el latino no era cosa fácil, era callado como según decían tres chicos en particular, pero por favor, estamos hablamos de Kim Namjoon, generar buena impresión era parte de él involuntariamente-.
-Fue muy agotador el viaje?.- pregunto tranquilo y con una sonrisa mostrando sus hoyuelos. Bien, ese morenazo le estaba llamando a gritos, para que negarlo al latino le había atraído El líder de la banda surcoreana-.
-Un poco, pero ya estoy acostumbrado al cansancio físico así que no fue un gran problema.
Tres jóvenes miraban con recelo a su amigo, la atención de su idolo se la estaba dando a ese sexy moreno de hoyuelos atractivos. Pensándolo de esa forma, tenía un punto a su favor, solo UNO no más.
Pensó el Jungkook pegando su lengua a la cara interna de su mejilla. El encuentro con su ídolo no era para nada de cómo se lo había imaginado, un ambiente incómodo y silencioso, bueno, al menos antes de que su amigo y el latino iniciarán una conversación.
Tan solo las voces del moreno y el latino se escuchaban, ambos habían convertido ese ambiente tenso a uno realmente cómodo. El de ojos claros tenía una leve sonrisa, ambos jóvenes habían conectado muy fácilmente.
-Realmente sería increíble realizar una colaboración.-El líder dió la idea. Tres de los chicos se sintieron agradecidos con su amigo-.
-Seria un total placer hacerlo, pero me temo que por el momento tengo mi agenda llena.- Con una expresión de pena respondió-.
-No te preocupes, lo entendemos, cuando puedas nos avisas, tal vez podamos llegar a un acuerdo.
-Quieres algo de comer?.- Pregunto el mayor de todos con una sonrisa. El latino lo pensó, pero había comprado ya su cena, no quería que desperdiciarla-.
-No gracias, ya he comido.- Mintió descaradamente-.
Yoongi se dió cuenta de su mentira, no era difícil ver a través de ella, el joven tenía una bolsa llena de comida y botana, no era difícil deducir que esa sería su cena. A Yoongi le agrado, Yoongi lo aprueba.
Podría decirse que ambos tenían una personalidad parecida, así que no era difícil agradarce mutuamente.
❦ ════ •⊰❂⊱• ════ ❦
La noche había pasado con ambiente agradable, conversaron durante horas, dando las 3 de la mañana, el latino se sentía cansado y hambriento, con mucha pena se despidió de lo siete(7) chicos.
Saliendo de la casa de sus ahora vecinos temporales, se dirigió a la suya. Debió haber dormido temprano, tenía que hacer muchas cosas más tarde.
Entro a su casa y calentó su comida fría en el microondas, con deleite se la comió una vez caliente.
Al terminar, se cepillo sus dientes y se cambió, tendría unas cuantas horas para dormir un poco antes de su día tan agitado. No desperdicio tiempo y se acostó en su cama, no pasó mucho tiempo para que cayera en brazos de Morfeo.
Tenía el presentimiento que su estadía en corea del sur, sería muy interesante y agradable.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
