Cuando el pasado vuelve al presente y al amor prohibido reaparece entre un militar y un rebelde.
↪Pareja: KookTae.
↪Se habla dictadura militar.
↪Todo es falso, aunque utilizaré datos reales de lo que sucedió en mi país.
—Claro, Tae —dejo un beso sobre sus labios, para luego continuar —, puedo afirmar que eres el amor de mi vida.
En ese momento comienza a llorar para luego gritar que lo salve por favor, sin comprender que le ocurre lo abrazo, pero no logro calmarlo:
—Sálvame, por favor —al decir eso se termina por desvanecer en mis brazos.
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Abro mis ojos asustado, abrazo mi cuerpo en busca de consuelo, pero no siento nada. Tae, ¿te encuentras bien? ¿Qué hago? Debo asegurarme que se encuentre con vida, no puedo permitiría que le ocurra nada, no me lo perdonaría jamás.
Me cambio de ropa y con apuros busco las llaves de mi auto, manejo con apuro a la casa de Tae, golpeo con desespero, pero nadie responde; mierda, ¿Dónde te encuentras? Necesito saber dónde estás.
Ayer ocurrió una manifestación, podría ser esas personas.
¡Morirá!
¡Le harán algo, debo hacer algo!
Aunque puede que este sacando conclusiones muy precipitadas, pero mi sueño me dice lo contrario.
¡Lo buscare!
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Manejo a una de las instalaciones que manejo, buscando con desespero a mi mano derecha y administrador, él debe tener las respuestas que necesito, confío en ese chico, me ayudara a encontrar a Taehyung.
—Yungyeom, necesito que busques a una persona —tomo aire e intento hablar con calma — creo que lo tomaron ayer.
—Jeon, ayer llego mucha gente, pero intentare encontrarlo, confía en mi.
—Gracias, te doy su descripción y me dices si esta —suspiro con la intención de quitar la ansiedad de mi cuerpo —busca en mis instalaciones y yo me encargare de las oreas, necesito encontrarlo o moriré.
