Paula Ricci
Inhalar y Exhalar, una técnica que nos enseñaron en el colegio cuando llegábamos de recreo para clamar las revoluciones pero que ahora no me esta funcionando por que en vez de que mi respiración vuelva a la normalidad y mis lagrimas dejen de correr, estas no paran de empeorar. después de unos segundos muy largos me dispongo a bajar las escaleras aún con los ojos hinchados y las mejillas mojadas, parecía la verdadera llorona cuando salí al frío que me pego en toda la cara mojada y sin contar que aún estoy en ropa interior con su jodida cazadora, me siento tan humillada, le confesé mis sentimientos porque en verdad pensé que el me amaría a mi también, que él me amaba también pero siempre no fui mas que una apuesta, que me enamoraría como todas y yo como una tonta me enamore de él, lo peor es que me lo advirtieron, todos me lo advirtieron incluso él mismo me dijo que no me enamorara que me alejara, pero como la idiota terca que soy me quedé y aquí estoy con el corazón hecho añicos en la noche fría sola y en ropa interior esperando a el único que dijo desde el principio que estaría para mi cuando esto pasara y vaya que tenia razón, maldito Aiden Lecoin, maldito estupido ojos verdes, malditos el y su estupida regla de no digas te amo. Lo maldije durante todo el rato hasta que divise el Lambo color rojo de Scott que aparco frente a mi y bajo corriendo hacía a mi examinándome de arriba a abajo, iba con un pantalon de pijama a cuadros una sudadera gris y zapatos distintos, si que salió corriendo a mi rescate, abrió la boca para preguntar por mi ropa y que me pasó pero no alcanzo a emitir sonido ya que me abalancé a sus brazos rodeando su torso con fuerza llorando y sollozando fuertemente en su pecho, él suspiró y me devolvió el abrazo sobándome la espalda de arriba a abajo y susurrando.
— Shhh, tranquila -con voz tranquilizante-
Repitió eso una y otra vez mientras acariciaba mi espalda y cabeza hasta que mi llanto después de un largo rato se fue calmando un poco, la verdad es que eso era justo lo que necesitaba, un abrazo reconfortante y cálido ya que estaba fría cual témpano.
— ¿Mejor? -preguntó preocupado mientras se agachaba para mirarme los ojos y labios hinchados por tanto llorar, solo me limité a asentir con la cabeza y susurrar un débil "si"- Vamos, sube al auto te llevare a casa...
Hice lo que me pidió subimos a su auto y agradecí al cielo que en el trayecto no hiciera ninguna pregunta, solo me escuchaba sorbetear mis mocos una y otra vez, cuando aparco en el edificio se bajo conmigo y mientras yo me ponía mi pajama de polar él me preparo una sopa de pollo en polvo lo que agradecí entonces la curiosidad le gano.
— ¿Así que lo dijiste eh? -hizo una mueca triste, levante mi mirada el tazón y asentí-
— Soy una tonta, tú me lo advertiste, todos lo hicieron... -trague saliva-
— No Paula tú no eres la tonta, el tonto es él por hacerte esto y no darse cuenta de la maravillosa mujer que eres, no te merece -frunció el ceño y miro a otro lado-
Silencio... después de eso solo había silencio porque no supe que responderle.
— Gracias por la sopa -cambié de tema- y por ir a buscarme a las 3 de la mañana a ese lugar, eres un gran amigo Scott -sonreí tímidamente-
UYYY ¿En serio querida yo? ¿Friend zone?
— Te lo dije aquella vez en la cafetería ¿no?, siempre estaré disponible para ti Paula -sonrió de vuelta-
Después Claire llego sonriente por la puerta de entrada y al verme su sonrisa se esfumo y no aguante mas y corrí hacia ella estrechándola en mis brazos mientras lloraba, se sorprendió pero con solo una mirada a Scott que estaba a mis espaldas supo lo que ocurría
— Es un imbecil y le voy a cortar los testiculos mientras duerme... no me retracto se los voy a cortar mientras esta despierto para que le duela el triple... -reí entre lagrimas en su hombro y ella me acariciaba el cabello-

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No digas "te amo"
RomanceAiden Lecoin; ex chico popular de la Universidad ,ex mariscal de campo,ex mejor amigo de Alex Ricci. Abandonó todo ese mundo de la noche a la mañana pero nadie sabe el motivo ahora es el chico malo, el reservado solitario y sobre todo mujeriego a te...