No digas "te amo"

Capitulo XVI

Aiden Lecoin

Estaba fumándome mi segundo cigarro designado del díacuando la vi allí parada hablando con el mismo chico que entro con ella aquel día por el ascensor mi estomago se contrajo y me dieron ganas de vomitar cuando vi que la abrazaba y después señalaba su Pecho con el indice aun en sus brazos cuando la volvió a abrazar delante de mi jodida nariz no aguante tire el cigarrillo y lo pise con algo mas de la fuerza apropiada como si aquel chico fuera la colilla del cigarro y yo lo estuviese pisando con ira me acerque por detrás de mi Ángel y la apegue contra mi pecho mientras descanse mi barbilla por unos segundos en su coronilla

--Hola Ángel

y él me miraba con entre cejo fruncido y eso me jodio mas así que bese a mi Ángel con ganas con lujuria en frente de el como diciendo en su cara "eh idiota ella es mía" cuando me separe de ella que me miraba con los ojos bien abiertos sorprendida por mi arrebato sonreí y hable

-¿No vas a presentarme a tú amigo?

el muy imbecil le sonrió a mi Ángel como tenso y la miro con compasión ¿porque la miraba así?

-Finn Denille -me extendió la misma mano con la que acababa de apuntarla en el pecho y quise cortársela pero hice algo mejor la bese otra vez -

ah si ese era su nombre, odio su nombre

por fin estamos de acuerdo en algo querida conciencia

--Bueno... -dijo incómodo y mirándome de reojo- Baby yo me voy ya sabes tengo cosas que hacer y no olvides lo que hablamos... -odio con mi alma que la llame "Baby" ¿que clase de apodo ridiculo es ese? es mucho mejor Ángel y cuando ella hizo el ademan de separarse de mi para besarle la mejilla la apreté mas fuerte y hundí mi cabeza en el hueco de su cuello inhalando su exquisito olor a lo que ella resoplo enojada, ups-

-¿¡Se puede saber que carajo fue eso?! -me grito furiosa, dios que sexi es cuando esta enojada-

-Solo cuido lo que es mío Ángel -me enconji de hombros mientras la miraba a los ojos ya que sabia que el contacto visual intenso la incomodaba un poco-

-¡Yo no soy una cosa Aiden,no soy una propiedad, soy una jodida persona maldito psicopata! -la mire y antes de que pudiera irse la agarre de la muñeca y la atraje a mi-

-Ángel eres mi jodida novia no puedes andar abrazándote con otro hombre y frente mis narices -dije enojado pero no perdí mi voz calmada porque ya habían algunas personas que se daban la vuelta o nos miraban descaradamente pero ella pareció no darse cuenta-

-¡No Aiden no soy tú maldita novia, esto no es más que una apuesta lo dijimos ese día en la maldita fiesta! -gruño furiosa-

-También dijiste que no me ibas a besar y mira, siempre boqueando como un pececillo -me burle pero me arrepentí al instante que vi sus hermosos ojos avellana humedecer y quise decirle que tenia razón que yo era un imbecil y arrodillarme frente a ella para implorar su perdón pero me desconocí a mi mismo en cuanto ese pensamiento cruzo en mi cabeza, yo nunca pero NUNCA había sentido lastima por ver llorar a una chica o temido que se fueran de mi lado pero ella, ese jodido Ángel estaba cambiando todo lo que soy o lo que solía ser y me negaba rotundamente eso no quería sentir, no quería sentir nada y me refugie en lo que mejor hacia desde que la vida dejo de importarme una mierda: el sarcasmo-

-Eres un estupido, un bruto, un maldito cavernícola, Te odio -girto con los ojos aun acuosos y mi corazón se encogió, no por sus palabras si no por su tristeza o su impotencia por como sus ojos revelaban lo que en verdad sentía aun que su cara y palabras se esforzaban por poner cara de pocker o decir lo contrario pero sus ojos la delataban era como asomarse a una ventana y ver si estaba soleado con las abejas y mariposas revoloteando o ver si estaba la grande con una tormenta eléctrica y una lluvia torrencial que arrasa todo a su paso-

-Del odio al amor hay solo un paso Ángel -intente que se riera pero se encabrono mas-

-Que te jodan -me escupío y trague saliva pensando como arreglar esa cagada monumental-

-No quiero que andes por ahí abrazando a otros ni frente a mi ni cuando no esté -sujete su pequeña y hermosa cara en mis manos y acaricie sus mofletes- Eres mía Ángel y no me importa si crees que soy un cavernícola o un Bruto, porque no soporto verte con alguien que no sea yo -la mire como si entendiera todo lo que quería decir sin decirme nada pero de repente empezó a reír y fruncí el ceño confundido-

-¿estás celoso? -¡Ja! yo nunca me pongo celoso ¿cierto? bueno ya no lo sé, esta chica ah cambiado muchas cosas que no solía hacer y por ella las hago en menos de dos meses, en menos de dos jodidos meses- no puedo creerlo...

-No, no estoy celoso nunca me pongo celoso -pero no logre convencerla ya que empezó a reír como desquiciada y en sus ojos ventanas pude ver que las nubes se iban y aparecía la primera mariposa y enredo sus manos en mi cuello sonriendo, y las misma mariposa de sus ojos se traslado a mi estomago, trague seco-

-Si, si lo estás -hice una mueca fastidiado- pero para que lo sepas Finn es gay -la mire atónito-

¿como dices que dijiste?

y seguramente te tiene mas ganas a ti que a mi -sonrió y yo trataba de procesar la información que me otorgó sentí un poco de vergüenza al recordad la escénica que le monte hace menos de diez minutos, joder, espera un momento ese había sido su objetivo desde el principio ¿no? desde que salió del ascensor-

-¿Porque esperaste tanto para decírmelo? -pregunte arrugando el ceño-

-Fue tu castigo por desparecerse casi dos semanas después de que salíamos -dijo burlona, reí esta chica va ser mi infierno personal hace cosas que ninguna otra se atrevió a hacer como ponerme celoso y no es que con otras me importara mucho si salían con otros pero ella es... es simplemente ella es su esencia son sus ojos expresivos y transparentes entonces no aguante mas y la bese la bese con deseo, ternura, admiración y con... no se como describir esa sensación que nunca antes había sentido, lo que si sabia es que me gustaba es chica me gustaba mucho me gustaba todo de ella desde como se arrugaba la nariz cuando no le gustaba algo hasta como sus ojos brillaban y su sonrisa se expandía cuando algo le emocionaba como a una niña pequeña, le acaricie los hombros y baje mis manos a su pequeña cintura que encajaba a la perfección en mis manos como la pieza de un puzzle cuando mi lengua se coló en su boca y danzo con la suya y el beso iba poniéndose cada vez mejor su maldito hermano nos interrumpió con una llamada, me queje en sus labios y ella sonrió sobre ellos y respondió mientras veía como su resplandeciente sonrisa se transformaba en una seria y nerviosa -

-Esta bien. si. voy en camino. si, sola. -me miro de reojo y yo fruncí el ceño- adiós. -y colgó-

-¿Que paso Ángel? -la mire preocupado-

-Nada solo... yo... yo tengo que irme, lo siento cariño -abrí los ojos con sorpresa, ella enrojeció y exhalo sonoramente antes de inclinarse y dejar un beso casto y rápido en mis labios petrificados antes de salir corriendo-

Mierda,Mierda, Mierda Paula se estaba enamorando de mi había visto esto cientos no, miles de veces y ese tan inocente "Cariño" era el principio de todo, el principio de todos los "te quiero" y las complicaciones, el inicio de que quieran que conozcan a sus padres o que vaya a las reuniones familiares y eso estaba dentro de las reglas nada de conocer padres ni familia y como un chiste malo yo termine presentándole una pequeña parte de la mía a Lex eh ahí una de las tantas reglas que eh roto por ella, pero algo de los que mas me desconcertó es que en una pequeña parte de mi al fondo junto donde enterré mi esperanza le agrado que me llamara Cariño, si ella hubiera sido con cualquier otra hubiera encendido mis alarmas pero con ella mis alarmas se quedaron dormidas, espere y espere ah que sonaran pero nada solo silencio...

-Adiós Cariño... -susurre cuando la vi a lo lejos corriendo con sus rulos castaños saltando y volando en el aire hipnotizándome, y fue ahí viendo sus rulos flotar cuando supe que ella no era una conquista más...ella era más... ella era mucho más y no se si estaba asustado o emocionado o aterrorizado o toda una mezcla de todas las emociones que existen, pero por una vez desde que la puta de mi madre me dejo, nos dejo después de toda esa mierda que nos hizo pasar fue que volví a sentir algo, un pequeño grano de arena en mi pecho y no en el fondo si no que a flor de piel, ese pequeño grano de arena que ardió y volví a sentir algo por una mujer que no fueran mis Hermanas o mis sobrinas si no Ella, Paula Ricci me hizo sentir otra vez desde que tenia 5 años, pero aunque ella me hiciera sentir aún así las pesadillas que me atormentaban cada noche no pararon y también fue ahí que creí que nunca pararían.-