Amor encadenado

Siguiente paso... Y... Andres.

¿Dónde podía encontrar a Andrés? No tenía ni idea. Además tenía que prepararme para ir con Pablo, ahora que ya sabe donde esta la cafetería.

Me puse una camisa con botones ajustada blanca, un pantalón verde y unas converse blancas, no quería ir muy arreglada al principio, cuando ya saliésemos más me arreglaría de verdad.

Prepare mi bolso y me puse a ver la tele cuando se me ocurrió que los cinco minutos que quedaban para que saliese de casa podría ir a la cafetería donde fui con Andrés la última vez que lo vi.

Me dirija hacia allí y cuando llegue el no estaba, fui paseando hacia el lugar donde había quedado con Pablo y vi como un chico venía hacia mi, pude ver su rostro más claramente cuando se acerco más.

-¡Andrés! -chille sin darme cuenta.

-Hola Sandra, ¿Cómo tu por aquí?- se le apareció una sonrisa en la cara.

-He ido a dar una vuelta.

-La última vez que hablamos medite y lo pensé mucho, estoy llendo a un psicólogo para que me ayude.

-Aaaa, muy bien.- que bonito, lo había hecho por fin.

-¿Quieres venir a tomar algo?

-Lo siento, tengo que irme.- me supo mal.

-Bueno te voy a dar mi número y un día que tengas libre me llamas.- dijo muy ilusionado.

Me apunto su número en mi móvil y me lo guarde.

-Perfecto.

-Bueno, no te quito más tiempo.

Me dio un beso en la frente y se despidió con:

-Hasta luego princesa.

Esto estaba evolucionando demasiado rápido. Ya tenía un apodo y me había tocado.