Amor encadenado

Inventigo preocupado.

Parte de Andrés:

Me resultó muy extraña nuestra conversación, así que le envíe una petición de amistad a Marc, él la aceptó y yo comencé a investigar sus fotos.

Salí él con Sandra basándose y besando su cuerpo, una foto de sus pechos y de ella acostada en una cama sin parte de arriba.

No podía creer lo que acababa de ver, ella desnuda. Me siento culpable por verla pero no es posible que estén esas fotos de Sandra, ella no lo permitiría. Lo mejor será preguntárselo, pero... No, me volverá a hablar mal.

Ósea, que es cierto, ella se acostó con él, yo sólo era un juego para darle celos a Marc y conseguir tirárselo.

No quiero pensar que ella es....eso, puede ser halla sido él.

Ví los comentarios de las fotos, todos calificaban a Sandra como una **** y se quejan acostar con ella, no era posible, con lo tímida y sincera que parecía, era súper tierna, esto no puede estar pasando,

Había un comentario que decía: «He ganado, ahora voy a agregarla»

Inmediatamente clické en sus amigos y ví un usuario como Sandra, entré en él y habían un montón de fotos de tetas, culos, partes interiores, y fotos muy sexys. Definitivamente esa no era Sandra, pongo mi mano en el fuego por que se que ella nunca en su vida subiría fotos de ella desnuda.

Eran las cinco......

Ella volvía a estar otra vez cogida por el brazo de Marc y triste, apagada, decaída... Como esta mañana, pero parecía estarlo aún más.

-Sandra- dije nada más que se acercaba a mí.

-¿Otra vez? No tengo ganas de hablar más contigo.

-Por favor, es importante.

Se acercó a mi rechistando.

-¿Qué quieres ahora?

-¿Que hicistes con Marc anoche?¿Por qué te acosastes con él?- ella me miraba intrigada.

-¡Yo no me acosté con él!

-Ya no me puedes mentir, tengo pruebas.

-¿Qué pruebas?

-Pues tu tuenti.

-Yo no tengo tuenti, y lo sabes perfectamente.- seguía con su tono pasota.

-No, lo acabo de descubrir este mediodía.

-Pero no tengo tuenti, ¿cómo vas a tener pruebas falsas?- su tono cambió, estaba elevando su tono de oz.

-Tu tuenti, tus fotos.

-¿¡Qué fotos!?-parecía no saber lo que decía, pero no me lo iba a tragar.

-Estoy harto de que te hagas la idiota, ahí te quedas.- me arrepentí de haberle dicho eso al momento, pero creo que Sandra pudo ver mi arrepentimiento por que cambio y la verdadera Sandra salió.

Nos quedamos uso segundos es silenció, los ojos de Sandra estaban llorosos y no soportaba el hecho de que ese subnormal la halla toqueteado.

Un lágrima saltó del ojo de Sandra, mi corazón se hizo pedazos y no pude evitar ponerme mal yo también.

-Tranquila princesas, yo me ocuparé de arreglarlo.- le cogí de las manos ella asintió, dió media vuelta y se fue.

Estuve investigando toda la noche. Descubrí un hallazgo increíble, tenía que contárselo rápidamente a Sandra.