Promesas

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Dentro del esquema de la manada la clasificación constaba de dos partes, la primera era una prueba en la que unas gotas de sangre de cada niño se disolvían en la sustancia que revelaría su jerarquía o segundo sexo, así los azules eran Alpha, verdes Delta, naranja Beta, y muy rara vez se presentaba el rojo que señalaba a los Omega.

Si esto ocurría, y por los casos que la historia narraba donde los Omega femeninos o masculinos habían ocasionado infinidad de problemas entre los demás pobladores de Vinice, los dirigentes decidieron que, si la clasificación mostrase uno de estos individuos, sería sacrificado por la madre en castigo por haber ocultado a la manada lo que ella podía determinar desde el momento del nacimiento debido al aroma que desprendía la cría y que sólo era detectado por los progenitores.

La segunda parte consistía en dar como bienvenida oficial de los menores a la manada, dijes de oro que implicaban su rol dentro del grupo de acuerdo con su segundo género, costumbre que aplicaba a todas las manadas de Tanah, así los Alpha tenían una corona de olivos que los señalaba como líderes, los Deltas un arco con una flecha por ser guardianes y normalmente de aquí salían los Deum, los Beta una pluma por ser los administradores y científicos. Sin embargo, en Vinice a la madre del Omega se le daba una daga para acabar con la vida del vástago, dejándole morir desangrado si la hembra se equivocaba en el momento de herirlo y no provocaba el deceso inmediato.

El desalmado espectáculo concluía con la elección de dar el cuerpo a los carroñeros o quemarlo ante el pueblo en la piara, siendo el verdugo quien debía, en ambos casos, entregarlo a la expiación.

Esa decisión era la que Kaire esperaba, que Line lo diera a los carroñeros, así él podía, como padre del niño, amortajar el cuerpo y acompañar a su pareja al destierro, momento en que Kolya, su hermano, aprovecharía para llevarlos donde Sarata pudiendo entregar su alma a Caos en tranquilidad.

No obstante, las cosas se dieron diferentes. Cuando la copa de Constancio mostró el brillante rojo, la satisfacción en el rostro de la Beta con quien llevaba catorce años compartiendo fue la advertencia de que Line esperaba ese instante con ansiedad.

—Cuando nació su imagen me recordó a tu madre —dijo en voz baja la mujer confesando lo que dejó sin fuerza a Kaire por la manipulación de la que fue víctima—, ella jamás aceptó nuestra unión, incluso antes de morir me reclamó por tu elección de abandonar el destino que te correspondía.

—Nunca me arrepentí, cada día contigo es una bendición para mí —respondió el hombre con la intención de hacerla cambiar de parecer, pero la loba rió con dolor por la afirmación.

—Pero el amor y pasión que quería siempre han sido de tu destinado, ese Upiro al que marcaste —los ojos de la castaña se posaron en los azules de Igave demostrándole que nunca desconoció la verdad sobre con quien pasaba sus periodos de calor. Con sorna concluyó—, el único celo que compartiste conmigo dio como resultado a Constancio, un Omega Deum.

Kaire apretó los puños evitando abofetearla por el tono despectivo que utilizó, para manadas como la de Igave la posibilidad de tener a un Omega con las características que poseía Constancio, y que provenía de su difunta madre, era un regalo de los dioses.

—Aceptaste compartir tu vida conmigo, la segunda hija del líder de la manada de Vinice, por voluntad propia cediste a tu lugar como Alpha de Igave o como Deum —lo enfrentó la Beta recordándole que la posición en la que se encontraban era la consecuencia lógica de lo que él mismo decidió por no atacar a la raza de su amado Sarata—. La muerte de este cachorro es romper de manera definitiva con tu pasado, darnos una oportunidad lejos de lo que significó tu vida anterior.

—Es decir, olvidarse de quien es por complacerte —la voz de Kolya Igave se escuchó detrás de la pareja. Line saludó a su cuñado, era lógico que estuviese ahí, lo había hecho con sus dos otros sobrinos así que no se extrañó por la visita—. Cumple con tu trabajo mujer, que mi hermano cumplirá con el suyo.

Pacto de Sangre - Serie Hombres Lobo IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora