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Era una nueva vida, una buena vida. Desde que UK reencarnó, todos notaron la maravillosa aura que mostraba, de lo feliz y sonriente que era. Estaban contentos, porque ya había pasado por mucho y merecía lo mejor.

Pero sus recuerdos volverían tarde o temprano.

—Portugal, ¿puedes confirmarme algo?

—Claro, King. Dime.

—Yo tuve un sueño... más bien una pesadilla... Pero creo que fue un recuerdo de mi anterior vida terrenal.

—¿Qué fue exactamente?

Le puso mucha atención, deseando que el recuerdo fuera bonito y no amargo.

—Yo... —miró a su amigo con temor—. ¿Tuve una hija con Argentina?

Portugal boqueó, hizo una mueca, y maldecía porque no esperaba que UK recordara algo tan feo.

—Esa pequeña... ¿murió?

Tan impactado estaba Portugal que no se dio cuenta de que no era el mejor lugar para platicar algo así, estando en una oficina de las tantas del edificio, a hora del almuerzo para los trabajadores, con cualquiera pasando por allí.

—Sí —entristeció, no pudo mentirle—. Lamento mucho que recordaras algo tan delicado.

—Fue real.

UK suspiró pesadamente antes de restregar su entrecejo, porque aquellos recuerdos le eran dolorosos.

—Qué nosotros... ¿qué?

Ni la puerta habían cerrado. Pero Portugal no pensó tener tanta mala suerte, pues quien habló desde la puerta fue Argentina, el gestor de aquellas pesadillas.

—¿Y él lo sabe? —UK miró al intruso y después a Portugal.

—Ahora ya lo sé —Argentina ingresó a la oficina y los miró incrédulo—. Yo... Me deben una explicación... La quiero.

—Espiar es de las cosas más feas —Portugal tomó a UK por el brazo—. Vamos, King... Tenemos que hablar.

Intentó llevarse a UK lo más lejos posible. Pero obviamente no fue fácil.

Argentina parecía no poder hablar, estar en shock, y aun así no les dejó salir de aquel lugar.

Exigía que aclaran su duda.

Pero no era buena idea.

—Pero... ¿Qué? ¿Cuándo? ... Me...

—No me interesas por el momento —Portugal ignoró a Argentina y se giró hacia UK—. King... ¿estás bien?

—Tenía esperanzas de que fuera una pesadilla... Pero es un recuerdo —sollozó suavemente, sin levantar la mirada, sintiendo su corazón doler entre esos recuerdos—. Por favor, dime que es pesadilla.

—¿Por qué no me dijiste? —Argentina miró al británico—. ¿Por qué?

—No te atrevas a discutir con King... —Portugal alejó al latino—. Tu rabia es hacia el pasado... Este es el presente —abrazó a UK protectoramente.

—Me quiero ir, Portugal —UK se aferró a su amigo con desesperación.

—Claro, King... Vamos... Tienes que olvidar esto.

—¡Yo necesito...!

—Arge... contigo hablo después.

Salió de ahí con prisa, sintiendo el cuerpo del inglés temblar entre sollozos mientras repetía sus pesadillas.

Fue tan triste.

Se tomaron esa tarde para rememorar el pasado y aclarar esos sueños feos que UK tenía. Porque había sucesos que formaban parte solo de la representación y ningún libro había registrado.

Portugal fue siempre el confidente de UK, sabía todo, y era recíproco. Por eso, esa noche, ambos confesaron aquellos feos secretos, y se dieron consuelo.

Prometieron dejar aquello como el pasado. Ya no valía la pena sufrirlo otra vez. Era en vano.

Y aunasí, Portugal sabía que algo dentro de aquel reino se rompió otra vez, porqueesa bonita sonrisa desapareció de repente... Pero en esta vida, iba a luchar porrecuperar la felicidad de UK.

Inocencia [Argentina x UK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora