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Lo encontró en medio de su camino, lo vio de lejos y luchó contra sus propios miedos.

Decidió intentarlo...

Se acercó y soportó la mirada desagradable que le cedieron.

Logró empezar una plática, dirigió todo hacia ese momento... y suplicó porque su voz no se ahogara.

—Si hubieses tenido un hijo conmigo... ¿Cómo lo hubieses llamado?

—¿Y por qué preguntás eso?

Le temía al odio de Argentina y, aun así, insistió.

—¿Tienes un nombre preferido?

—No sé... —hizo una mueca de disgusto—. Tal vez... Tomás, o Federico... ¡Qué se yo!

—¿Y si hubiese sido una niña?

—Francisca... No sé... ¡Pero qué pelotudez decís!

—Se llamó Aradia...

—Qué nombrecito es ese —bufó.

UK miró al latino unos instantes, intentando no derrumbarse por aquella respuesta tan seca y grosera.

—Me gustaba ese nombre —suspiró—. Yo... elegí ese nombre para nu...

—¿Y qué tiene que ver eso conmigo? Si elegiste ese nombre, qué me importa.

Dolió... Se acobardó.

—Solo era una pregunta... —dio un paso hacia atrás——. Te dejo en paz...

—Ey... —notó el dolor en esa mirada.

—Nos vemos, Argentina... Pero espero sea mucho después.

—UK... —pero el británico ya se había alejado.

Fue un intento más... Pero UK quiso que fuera el último... 

Inocencia [Argentina x UK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora