Snoggletog

140 4 0
                                    

[19 años, durante Race To The Edge]

≫ ──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪


—¡Feliz Snoggletog!— Gobber gritaba por las calles de la aldea de Berk con su típico casco vikingo de esa festividad y múltiples adornos que llevaba en su ropa.

Todos los vikingos de la isla se había preparado para la gran fiesta. Días atrás habían despedido a sus dragones, a los que volverían a ver días después. Todo la aldea estaba ya decorada con luces de múltiples colores, cascos, escudos y todo tipo de cachivaches que también utilizaban como decoración. Todos vestían sus mejores galas, aunque la mayoría usaba su ropa habitual. Pero a pesar de estar de fiesta no había nadie por las calles de la aldea. Todos los vikingos estaban en el Gran Salón celebrando Snoggletog.

—Buenas noches chicos— Hiccup saludó a todos los del grupo. Todos los jinetes de dragones estaban allí, excepto Astrid y Heather.

—¡Espera un momento! Tú acabas de decir 'Buenas noches'— Tuffnut comenzó —Si, es de noche pero...— Ruffnut lo interrumpió —...pero el día acaba de empezar ahora mismo. Es decir, llevamos todo el día durmiendo, nos acabamos de despertar. Eso quiere decir que el día empieza AHORA a si que deberíamos decir 'Buenos días...'

Fishlegs no iba a permitir que la locura de los gemelos llegara muy lejos —Vale vale, lo hemos pillado.

—No, yo no...— Fishlegs tapo la boca de Snotlout con su mano antes de que metiese la pata, como siempre. —Si lo hemos pillado, ¿verdad?— Snotlout solo asintió.

Mientras los gemelos seguían discutiendo y compartiendo sus opiniones sobre el tema más absurdo de mundo, y Fishlegs explicaba a Snotlout lo que los dos vikingos decían; Gobber y Stoick se dirigían a la mesa donde estaban todos los chicos – y la chica – sentados.

Les dieron una jarra a cada uno llena de hidromiel —Feliz Snoggletog, disfrutad de la noche— Gobber repartía la bebida.

—¿Qué tal la noche?— Stoick puso una de sus manos en el hombro de su hijo y como era típico en él, cada vez que hacia eso apretaba con demasiada fuerza, casi le dislocó el hombro. —Bien papá, pero no me gustaría tener que volver a casa con el hombro fastidiado— Hiccup se quejaba —Claro claro, perdona hijo.

—No pasa nada papá. Qué disfrutes tú también de la noche— No tenía muchas ganas de fiesta además de que fingía muy bien una gran sonrisa.

En cuanto Gobber y Stoick se alejaron de ellos, Snotlout no pudo resistir más —Alguien está desesperado por ver a cierta rubia— Arqueo sus cejas y miró al castaño con cierta picardía. —Cállate Patán — Si las miradas matasen Jorgenson estaría más que en el fondo del mar.

—Hablando de cierta rubia...— En ese mismo momento Astrid apareció por la puerta del Gran Salón acompañada de Heather. Las chicas vieron a los demás en la lejanía y se dirigieron hacia ellos.  Los verdes ojos de Hiccup se clavaron en Astrid. En su mirada podía reflejarse sorpresa y admiración, además de ¿deseo? Era la única que había cambiado su atuendo, no demasiado pero lo suficiente como para llamar la atención. Su típica camisa azul había sido cambiada por una roja que, por cierto, marcaba muy bien sus curvas y algo más. Su falda era diferente, se aferraba más a sus caderas. Y su peinado... la trenza que siempre se posaba en su espalda caía por su hombro izquierdo.

—Hiccup, disimular no es lo tuyo— el hijo del jefe se sonrojó al instante dándose cuenta de lo que estaba haciendo. —Cierra la boca o te la cierro yo— El vikingo más bajo del grupo estaba claramente molesto. Había pasado hace tiempo de Astrid, pero eso no significaba que se hubiera pasado de ella completamente. Mucho menos cuando se enteró de ellos tenían una relación, y sobre todo haber visto como se besaban en varias ocasiones.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 25, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

HTTYD: One Shots (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora