Peligrosa Adicción

Capitulo 11

Tanit.

26 de abril, Palermo.

Estamos en el avión directo a la central de italia, siento una sensación extraña en mi pecho que me hace replantearme muchas cosas, aun nos faltan 2 horas de vuelo y siento que algo pasará.

—Oye ¿me estás oyendo?—Thomas me toma del brazo, la verdad es que me perdí en el comienzo.

—Si claro—miento.

—¿Qué estaba diciendo?—me pregunta pero no le respondo—Ves que no me oías.

—Lo siento tengo muchas cosas en mi mente para concentrarme ahora—suspiro—Pero dime qué me estabas diciendo que ahora si te prestare atención.

—Te decía que cuando estemos haya en italia podemos salir a turistear—se emociona, amo ver a mi hermano así—Mamá nos llevo muy pequeños por eso no me acuerdo mucho pero ahora que tengo novia y a mi hermana más grande conmigo podemos salir—termina con una gran sonrisa.

Thomas siempre fue así, más apasionado para sus cosas, no recuerdo mucho de mi niñez pero si se que hemos sido inseparables, amamos contar con el otro y yo amo que tenga aún ese espíritu niñato dentro de él, me alegra a mi.

—Sabes que tendremos trabajo—le quito la ilusión—Aparte no sabemos si el general mala onda nos dejará algo de tiempo libre.

—Eso es verdad—la sonrisa no se le va del rostro—¿Qué?—me pregunta cuando no lo dejo de mirar.

—¿Te pasa algo?—le pregunto—Nunca duras tanto con una sonrisa.

—Ah eso—se frota las manos y mira a Eiza quien habla con Tyler en otros asientos—Se que podrá ser muy precipitado pero...—hace una pausa—Le quiero pedir matrimonio a Eiza.

—Que novedad—murmuro.

—¿Acaso lo sabias?—pregunta sorprendido.

—Soy tu hermana mayor obviamente lo sabía—volteó mis ojos—Aparte se quieren pedir matrimonio casi desde que se conocieron.

—Siento que ella es la mujer de mi vida—suspira—Se que no te gusta que hable de esto pero ella me da una felicidad que siempre creí que merecía—eso me hace tragar fuerte—Ella es todo para mi y sé que yo soy todo para ella por eso es que me siento muy enamorado, por que pese a ser un amor cliché es amor al fin y al cabo y es lo que merezco vivir.

Ojalá yo pudiera pensar eso hermano.

—Yo te quiero Thomas y si tú eres feliz con mi amiga yo también lo seré, porque mi hermano menor merece todo lo bueno del mundo—le sonrío—Tú más que nadie merece vivir eso que tanto quieres.

En eso somos muy distintos, yo jamás podré tener ese grado de felicidad que el porqué los problemas me siguen a donde vaya pero él está libre de todo eso.

—Eres la mejor hermana mayor que alguien pueda tener—me abraza—Y ya encontrarás a esa persona, si no tu hermano siempre estará contigo—me sonríe y me rio.

—Lo se—le palmeo el hombro—Ve con ella que se nota que te quieres ir—lo miro y el asiente para ir con Eiza quien le redice con una gran sonrisa y un pequeño beso.

Mi mirada recae sobre el general quien está hablando con Michael, el es un hombre decidido y se nota que no quiere nada con nadie pero....no sé qué mierda hago pensando en eso.

Sigo mirando al general cuando una mano se comienza a mover y me doy cuenta que es Michael quien me pilló mirando al general.

¡Mierda que vergüenza! este otro espécimen de voltea extrañado pero yo ya estoy mirando por la ventana con el corazón a mil por hora.