Italia.
Hades.
La FGMI está en mi mente en todo momento, esa maldita central está latente en toda la mafia italiana.
Las veces que se han interpuesto en todos mis planes me jode, tuvieron a Fabrizio y Giovanni pero no a mi, la imagen de esa chica peleando junto al general sigue en mi cabeza, esa maldita punzada que me invadió.
Mis investigaciones arrojaron bastante información sobre ella, tanto como de familia a cómo esa hija de puta trabaja.
La maldición que se carga cuando pelea jode a todo el que se quiera meter con ella.
El general Morrison siempre me ha tenido entre ceja y ceja, no es novedad para mi pero ella...es algo que mi familia quiere y que cumpliré el deseo pero primero debo hacer otras cosas.
Es hermosa no lo niego, tiene un cuerpo de infarto que hace que quieras estar a sus pies, sus ojos felinos engatusan y su belleza es su mejor arma, pero se carga una inteligencia que desborda todo lo demás, según su ficha su IQ es superior.
El arma llamada belleza es su maldición pero es lo que más sabe usar.
≪Tanit Bythesea≫ Teniente coronel, con muchas medallas y reconocimientos, más destacada que ninguna.
—¿Seguirás pensando en ella?—Raina me pregunta atenta a cada movimiento que hago.
—Eso no importa—mi voz sale ronca.
No dice nada para observarme, su cabello pelirrojo resalta por sobre todo, ojos azules suaves, físico que me vuelve loco, mi esposa.
Nadie puede subestimarme, sabía que si me metía con ella obtendría más poder y así fue, lo logré y ahora estoy sediento de venganza, me convertí en el líder de la mafia ya que desde pequeño fui malvado eso quizás le llamo la atención a Negan.
Venganza contra Nikolaj y darle la presa a mi familia.
Fijo los ojos en la imagen que se proyecta frente mi, dos chicas cual caerá primero.
Piero, Fabrizio y Giovanni entran a mi sala enojados viendo ambas fotos de las chicas en el cartel, Raina se mueve detrás de mi para acariciarme los hombros, ellos me observan atentos cuando ven a la persona con miedo.
—Tú empiezas la cacería—habla Piero, mi tío.
—Queremos a la rubia—Giovanni responde.
—Te obedecemos a ti, Hades—Fabrizio me besa la mano.
Hago que la persona corra hasta donde esta el cartel cuando le suelto los tiros en el craneo que lo hacen caer manchando de sangre a la rubia, perfectamente equilibrado como debe estar.
—Tanit Bythesea Skarsgard—saborea Fabrizio—Me gusta tanto esa chica.
—Demanda las cosas y las haremos.
—Tendrán su momento desde ahora—le digo a Piero—Tú cumples con tu venganza y yo con lo mío, ambos salen jodidos, tienes permiso para hacer lo que te plazca con ella, mata a quien sea pero termina las cosas y no las dejes a medias.
—Gracias—se larga junto mis hermanos.
Sigo observando para dirigirme a la ventana y que Raina me siga.
—¿Y el general?—pregunta.
—Yo tengo otros planes para el—me limito a decir y me voltea un poco para besarme.
—Recuerda lo que pedí, Hades.
—Lo tendrás cuando sea necesario—me aparto.
—Su cabeza no se corta sola—me encara—Te pedí claramente la cabeza de ella o la de el.
No respondo y dejo que alegue sola, mi plan contra el general ya está en marcha y más avanzado que nunca, él creo que aún no lo sabe ya que está tan quebrada la relación que dudo con su minúsculo cerebro que deduzca algo.
Lo llevo con calma, meses ideando esto dieron sus frutos.
Yo no soy cualquier cosa, no me llaman el anticristo por nada.
Mi belleza no lo es todo, mi cerebro es algo que explota cuando es necesario, lo sanguinario corre por las venas de los Bianco, el creer que pueden joderme me da gracia, soy el peor Bianco que existe, el más despiadado el que menos compasión siente.
Durante el tiempo que he sido líder lideró la pirámide desde el primer lugar superando a la Bratva y mafia Alemana juntas, nadie me puede derrocar en nada.
Mis ancestros son sádicos, nos gusta el poder, no nos conformamos con poco, somos portadores de las muertes más macabras que existan.
—Vigila bien qué harás—Raina se va.
Vengo del demonio, mi nombre resuena en el inframundo como el dios de ese lugar, mis enemigos como el general y Anton, o el Boss de la Bratva no son problema para mi, yo soy un juramento que dura de por vida.
Yo soy el puñal que no te sacarás en tu vida, por eso destruyo toda amenaza que haya, por eso quiero destruir a la FGMI la mayor amenaza que ninguna mafia puede derrocar.
Se dice que los Morrison son el peligro, los Bythesea son salvajes, las Skarsgard son venenosas mujeres capaces de manipular con la belleza con tal de no mancharse más manos, Tanit podría ser una mujer así y no me impresiona si se conoce el apellido Bythesea es por ella, pero el Skarsgard es por la otra mujer, su madre.
Muerte a todo ese linaje de mierda.
Yo soy poder, yo soy malo, soy detestable, el anticristo en persona, la muerte viviente, el infierno en la tierra, más que la teniente coronel el general en mi objetivo, ese hijo de puta supo llegar a donde está y me sigue jodiendo todo.
—Ya empezó—Piero me avisa—Empezó la venganza.
De mi no se sale si no es muerto, ella no debió aceptar eso, un juego que no acabará hasta que un Bianco se sienta satisfecho y eso será hasta que yo me canse.
Yo soy Hades Ramsés Bianco y soy sádico.
El anticristo está de vuelta.
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Peligrosa Adicción
RandomLibro I Trilogía: Destino infernal: Tanit debe terminar una misión y llegó la hora de volver a su puesto como teniente Coronel en la FGMI , desde los 6 años de edad fue educada y preparada por una organización nacida de una rama importante para el m...