Munna

33 1 0
                                    

Estaba en la cocina haciendo los dulces para mis pokemons cuando vi la hora, ya eran las 10:00 a.m. tenia muchas duda si debía ir o no, pero si estaba acá debía darle frente a mis problemas.

Suspendí la preparación de la comida y fui directamente al campo de batalla, cuando llegue me encontré frente a frente con Steven.

-Saca a tus pokemon

Sin decirle ni una sola palabra obedecí y lance todas mis pokebolas al aire, rápidamente estos salieron y vieron a Steven algo molestos.

-Vaya si parecen molestos -rei- muy bien pequeños pokemons, vamos a hablar seriamente se acercó a uno de ellos

Reaccione colocandome delante de mis pokemons con una mirada muy ruda y retadora en señal que no los tocara.

-En primer instancia -me observo de pies a cabeza- necesitas más pokemon y de tipo psíquico
-Alce una de mis cejas-
-Así es, serás líder de gimnasio tipo psíquico y estos pokemons, no te servirán de mucho a excepción de tu Speon -lo sobo- necesitas pokemons nuevos
-Estos son los que tengo y nos los cambiarás -respondí sin más-
-Eso no lo haré yo, lo harás tú al pasar del tiempo, puedes empezar con ellos pero antes, te he traído algo
-No quiero nada suyo -me cruce de brazos-
-No pregunte si lo querías o no -respondí el doble de rudo mientras estiraba mi mano-
- Una pokebola -pense asombrada-
-Tómala -la coloque en su mano-
-Será un nuevo pokemon que deberás cuidar es de tipo psíquico, porfavor liberalo

Estire mi brazo y apunte al lugar donde quería que saliera el pokemon y sin lo dejé salir, al ver que pokemon eran quede realmente asombrada.

-¿Por qué me has dado esto? -pregunte sorprendida-
-Es lo mejor que pudo hacer ese pokemon -respondí a su pregunta su más-
-¿A que te refieres? -pregunte aun más sorprendida y confundida mientras observaba a Munna-
-Solo terminala de criar, será un buen amigo para tu gimnasio
-Interumpi- Pero
-Sin nada de pero -observe a Munna triste- Munna ella es tu entrenadora

Munna abrió los ojos y me observo muy fijamente y luego corrio hacia mi tumbando contra el suelo, mientras me pasaba su lengua por el rostro.

-Tranquila bonita -sonreí- ¿como estas?
-Suspire- Se que es lo mejor pero

Después de un rato conociendo a Munna Steven volvió a hablar, me dio un enorme plan de entrenamiento que debía seguir con mis pokemons por una semana incluyendo como debía alimentarnos.

-Cada semana los planes de entrenamiento serán diferentes y puede que ya no sean acá, si no en distintos lugares, te evaluare con una batalla cada mes, ¿Entendido?
-Si señor -respondí observo a Munna-
-Vamos a tener una batalla ahora, pondremos a prueba el potencial de Munna
-¿Esta lista Munna?

Cada quien se coloco en el lugar que le correspondia rápidamente el árbitro le dio inicio al combate, Steven saco a Aron sin pensarlo dos veces.

-Vamos Munna podemos hacerlo -sobe su rostro-
-Muy bien Aron estampida -ordeno-
-Un momento, un momento -reaccione aterrada- ¡Esquivalo! No se que ataques tienes, señor stone por favor
-Bufe de la rabia-
-Muy bien -saque mi pokedes y la escanee-
Muy bien, paz mental, pesadilla, psicórayo, fuerza lunar , zona extraña y cabezazo zen -susure- Vaya que eres muy fuerte pequeña
-Aron usa chirrido, yaaaa
Ay madre, como odio esto! -pensé- Munna por favor utiliza zona extraña
-¿¡Que demonios es esto!? -pensé mientras obserba-
-Usa pesadilla
-Oh no Aron -grite- vamos Aron salte ahí,
-Lo siento pero ahora mismo Aron esta teniendo la peor de sus pesadillas no puede escucharte -rei-
- Tiene que ser una broma esta dentro de zona extraña y con pesadilla el ataque aumenta su poder -pense- esta chica -sonreí-
-Terminalo con cabezazo zen -sonreí-
-Aron no puedes seguir luchando, la ganadora es la super coordinadora Serenity -dijo el árbitro-
-Hemos ganado Munna -la abracé- Gracias a ti, eres muy fuerte pequeña -la tomé entre mis brazos-
-Deja de celebrar -interumpi su felicidad- celebra cuando derribes a otro pokemon que no sea Aron -exclame molesto-

Me retire del campo de batalla y subí a mi oficina, no me gustaba usarla mucho pero hoy había sacado la pokebola de munna de ahí.

- Esto tiene que ser una broma -suspire mientras me sentaba- todo esto esta lleno de polvo
-Hijo que milagro que estés acá -entro mi padre a mi oficina-
-No me moleste -suspire- hoy no tengo ánimos...
-Entiendo hijo, le has dado a Munna a Serenity -Exclamo- ¿Crees que hiciste lo correcto? -pregunto-
-Munna era de mi madre y desde que ella bueno -mire a Serenity por la ventana que aún hacía en el campo de batalla- su único pokemon había quedó acá por más de 25 años, es lo menos que puedo hacer por Munna
-¿Crees que estará bien? -insitio mi padre preocupado-
-Si -sonreí mientras observaba la ventana- no lo puede haber dejado con la mejor entrenadora y criadora
-Munna parece muy feliz con Serenity, a lo mejor no se ha dado cuenta -rio-
-Ya lo creo, Serenity se parece mucho a mamá y por eso Munna esta realmente feliz
-Estoy orgullos de ti hijo -lo abrace-
-Gracias padre -correspondi a su abrazo-

-Muy bien chicos conozcan a Munna, será nuestra nueva compañera -sonreí- Muchas gracias señor Stone -observe el cielo-

Continuará...

Sr Stone Donde viven las historias. Descúbrelo ahora