5 años

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Ya habían pasado 5 años desde que gane mi primer gran festival, a lo largo del tiempo me iba destacando por se la mejor coordinadora de las regiones como Hoenn, Kanto y Sinnoh, ya era una estrella entre riogenes pero no solo me dedicaba a eso, también viaje a muchas regiones para ganar experiencias y tener pokemons nuevos de cada región.

Me encontraba en un hermoso debut de presentación pokemon en la región de Teselia para luego tomar el primer vuelo y llegar a casa, mamá me estaba esperando con una enorme noticia.

-¡Y eso es todo! -sonreí-
-Muchas gracias por su tiempo señorita Serenity, en muestra de su presentación le otorgamos esta medalla
-Muchas gracias -sonreí-

Salí del lugar de la presentación y corri directamente al aeropuerto para llegar lo más pronto posible a casa, en serio quería ver a mamá a pesar de que su enorme noticia me angustiada un poco.

.-En el pueblo Sakura...

-Dios no deja de llover -mire por la ventana del automóvil- el clima esta super extraño

Baje del automóvil realmente feliz porque ya estaba en casa, saqué mi maleta sin importar que esta o yo se mojara por la lluvia, di unos cuantos pasos a hacia la puerta y cuando estuve a punto de girar la perilla de la puerta para entrar un fuerte dolor de cabeza se apoderó de mi.

-¿Que es esto? -caí al suelo mientras me agarraba la cabeza llena y pequeños jemidos de dolor salian de mi boca- me duele mucho

Como pude me levante el suelo y gire la perilla de la puerta para entrar a casa, lo primero que hice fue gritar un "mamá ya he llegado" pero nadie respondió y toda la casa se encontraba a oscuras; di unos cuantos pasos para encender la luz y me encontré con la peor escena de mi vida.

-¡MAMÁ! -grite aterrizada como nunca-

Mi madre se encontraba tirada en el duelo dentro de un enorme charco de sangre mientras un grupo de Cacturne descargaban su cuerpo y se lo comían pedazo a pedazo.

-¡PERO QUE HAN HECHO!

Les grite llena de ira a punto de matarlos yo a ellos, me acerque a ellos para separarlos del cuerpo de mamá pero estos pronto se aproximaron a atacarme a mi.

-¡Detenganse!

Les ordene pero fue inútil, vi mi vida pasar por mis ojos cuando esos pokemon se abalanzaron frente a mi, esperaba mi fin seguro pero no fue así.

-¿Eh? -abrí mis ojos- ¿Kirlia Gothorita?

Observe a mis dos pokemons estaban fuera de sus pokebolas habían salido por su cuenta a defenderme de los cacturne, una batalla intensa comenzó puesto a que ellos eran 5 y ellas 2, la ventaja en la batalla subió gracias a que Gothorita evoluciono en Gothitelle dejándolo a los cacturne inconscientementes.

-Serenity atrapalos -me ordenó Kirlia con su telequinesis-
-Vamos Serenity -dijo Gothitelle- no tendrás muchos tiempo
-Asentí mientras aún mi cuerpo temblaba de miedo -Pokebolas ve- las Lance pata que estas atraparan a los cacturnes.

La muerte de mi madre por causa de los Cacturne me había tomado por sorpresa causandome un enorme vacío en el corazón, ya hacia un mes desde su muerte y yo aún no podía dormir por las noches me sentía realmente sola y había comenzado a odiar este pueblo.

-Hola Serenity -dijo la vecina mientras entraba a mi habitación-
-Señora Rosa -la observe-
-Mira como estas  -abrió las cortinas de mi habitación- estas realmente acaba, mira tu cabello, tienes muchas ojeras y no has comido en semanas
-Estoy bien -respondi mientras me aropaba de pies a cabeza- porfavor cierre las cortinas, no me gusta la luz
-Te he traído la comida pero veo que no te has comido las demás -suspiro triste mientras observaba los demás platos de comida-
-No tengo hambre, solo quiero estar sola
-Cariño se que todo ha sido muy fuerte para ti, desde la muerte de tu madre pero creo que no debes entancarte -me desaropo- busca nuevo horizontes -toco mi rostro- ¿por qué no te mudas a la ciudad?
-No tendría donde quedarme -suspire triste- mi único hogar es este
-No, tu madre tenía una hermosa casa en la ciudad además es vecina de mi hermana -Sonrió- vamos, yo misma te ayudaré a mudarte
-No quiero -me levante de golpe de la cama- estoy bien aca, acá lo tengo todo, tengo a mis pokemons...pokemons...

La palabra pokemons retumbaba mucho en mi mente y ahí fue donde caí en cuenta que no les había dado de comer a mis pokemons durante todo el mes, todo ese tiempo estuvieron guardado en las pokebolas.

-¡No puede ser! -lleve mis manos a mi cabello- ¡soy una tonta!

Baje directamente a la cocina y tome todos los platos y los llene de comida pokemon especial para cada pokemon y luego los saque de sus pokebolas.

-Lo siento mucho chicos -los observe mientras comían como locos- no quería hacerles esto pero no me encuentro muy bien
-Tranquila Serenity -me tomo de la mano Kirlia-
-Kirlia -la abrace- No se que hacer me encuentro  muy sola
-Creo que debes seguir los consejos de tu vecina
-No lo sé -

Recite esas últimas palabras para que un mar de lagrimas se escaparan de mis ojos, me sentía muy triste y sola, sentía que mis lágrimas me pesaban demasiado estaba viviendo una enorme pesadilla y solo quería que alguien me ayudara.

-Necesito que  alguien me ayude

Continuara...

Sr Stone Donde viven las historias. Descúbrelo ahora