«⚱1⚱»

716 56 36
                                    

En la primavera del bello año de 2070 la humanidad por primera vez en su historia fue capaz de manejar la paz y la tolerancia, más sin embargo hay algunos quienes no se han adaptado del todo y siguen en ideales un tanto erróneos y crueles. La familia Belle es parte de una de estas horribles prácticas, en especial el único hijo.

Louis Belle, cuya edad es la más simple de 29 años, sin pareja, sin hijos y sin prisa por tener lo mencionado, su vida consta de trabajo, estrés, ansiedad, presión y severa a fisión por lo perfecto.

Este mismo joven pasa sus días y noches abrumado e incluso harto de la misma rutina incluyendo que sus padres le inscriben constantemente a citas que él no quiere ni siquiera pensaba tener. Su primo paterno daba burlas a este de su situación llegando a ser cruel en algunas ocasiones. Louis pedía de la forma más elegante y menos arrogante que se detuviera, más sin embargo este daba más golpes bajos diciendo series de insultos justificando con un "Es humor", claramente Louis no lo recibía así.

Una noche de primavera este rubio estando en su oficina decorada con fotografías de él y su familia colgadas sobre paredes blancas y de azul tenue estaba revisando varios números en cuanto a ventas de sus productos, cuando a su celular llegó un mensaje de su padre.

"Arreglate, conocerás al mor de tu vida."

Este suspiro pesado dejando d elado las hojas y proceso la información de que tenía una cita a ciegas, su padre, amenazó con echarlo a la calle sin posibilidad de sustentarse sólo nunca, y con darle más que mala reputación si había algo malo apropósito.

Por lo que más a fuerza que de gana aceptó rogando que su "pareja" no fuera o pusiera excusas. Terminó rápidamente lo pendiente y salió de aquel edificio enorme con ventanales aún más grandes y cristalinos para dirigirse a su auto, deportivo negro con tonalidades azules, condujo molesto a su departamento para cambiarse un poco, arreglar su cabello, cepillar sus perfectos dientes y colocar colonia cara y de aroma exquisito.

Dejó todo como estaba y sin embargo de la prisa por salir al tomar su pañuelo limpio boto todo del tocador, gruoendo bajo del coraje ignoró el desastre y se apresuró a salir hasta donde su padre indicó. Un restaurante a 10 minutos de allí, grande, elegante, de ambiente suave y costosos productos.

Llegó esperanzado de que su cita se arrepintiera, se le hiciera demasiado tarde o simplemente no quisiera asistir, en la entrada estaba un mesero elegante preguntando por reserva iones, Louis llegó y dió la información que su padre ordenó decir, al sentarse espero y espero rogando por no tener esa cita, eso no pasó, en su lugar en el restaurante más elegante y moderno llegó un jovencito de apenas 25 años algo agitado, esto dió entender a Louis que había corrido hasta allí.

Divertido por su rostro de pánico hizo todo lo posible por no hacerse notar, más en cambio la mirada bicolor del muchacho se enfocó en el más apegado a la mesa. Sonriendo y con una mirada suave se acercó a la mesa donde el chico de ojos cianitas rezaba por no ser visto.

-Hey, ¿puedo sentarme?.-Preguntó animado el castaño.

-....Si, adelante.-El rubio de mala gana se acomodó en el asiento.

-Disculpa mi tardanza, necesitaba verificar que no saliera nada mal.-El pecoso se sentó en la silla frente a Louis.- Mi nombre es Nolan Romanov, soy un joven empresario de.-Nolan se vió interrumpido.

-Mira, Nolan, no me interesa ¿si?.-Dijo un tanto arrogante el rubio.- Ninguno de nosotros queremos esto, así que, dile a mi padre que todo salió mal.-Este estaba por levantarse.

Malas citas. >Nolou< Donde viven las historias. Descúbrelo ahora