Capitulo 2: " Las novelas de Rocky"

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Ambos perros intentaban llevar el cuerpo de sus amigo hasta su cuarto, pero este cada paso que daba era solo una era una advertencia para ambos por que al moverlo demasiado este iba a soltar todo lo que había consumido. 

— Este trozo de mierda, es el que tiene que dar el ejemplo. — Mascullo el lobo sintiendo vergüenza.

El dálmata solo rio por el comentario pero se mantuvo callado. Pere este también noto algo en ese cuarto ya que la mayoría de cosas era entre azules y verdes, y con una mirada rápida a las vestimentas de los chicos que ayudaba era obvio que son los colores destinados a ellos y se nota también lo virginal de ambos. Cosa que hizo que saliera una risa que rocky noto. 

— Cuéntame el chiste también. — decía con sonrisa en el rostro mientras que una de sus manos abría el cuarto de Chase.

— Luego lo hare, ahora intentemos ayudar a este chico. 

Contesto Marshall llegando con el cuerpo aun con vida de su "líder" y con cuidado ambos lo colocaron en su cama. Rocky en un gesto amable le quito los zapatos a Chase mientras que Marshall rápido había ido por un trapo húmedo a la cocina y con delicadeza se lo coloco en la frente y ahora acercando sus manos a la camisa este la levanto cosa que rocky al notarlo solo se quedo observando. En su cabeza se preguntaba: [¿Qué esta pasando?] pero se tranquilizo al ver que solo colocaba vaporub. Rocky respiro tranquilo y para servir de algo se acerco a la ventana y cerro las cortinas y así la habitación estuviera oscura. 

Y sin hacer ruido ambos salieron por la misma puerta, y ahora se dirigieron al sitio donde se hospedaría el dálmata. Era un lugar grande con dos cuartos los cuales cada uno tenia su propio baño, por ahora estaba completamente solo, ya que su compañero según las ordenes de su líder Ryder el nuevo miembro tardaría una semana en llegar. Aun que el edificio se vea grande por fuera, por dentro es mas pequeño de lo que aparenta. Las habitaciones están repartidas por dos cuartos por piso, y por dentro de ellas esta dividida para que vivan dos personas. 

Rocky y Chase ocupan la habitación 4, mientras que por el momento Marshall estaba solo en la habitación 3. Pero no solo era eso ya que en el quinto piso, oh mas bien la punta de la torre estaba todo el cuartel. Lugar donde estaba repartido por 6 zonas, cada una de un color distinto y una placa completamente distinta. 

Pero devuelta a la habitación 3, estaban dos perros los cuales uno desempacaba las cosas ya en el lugar que había elegido y el otro entraba con la ultima.

— Bien. — Colocando la caja en el suelo. — Esta es la ultima. Por donde quieres comenzar. 

— Solo por las grandes, las pequeñas solo traen unos adornos que pondré en la sala oh por el pasillo. 

— Supongo que es buena idea. — Tomando una de las cajas que tenia en frente.

— ¿Oye puedo preguntar algo?. 

— Claro. 

Contesto rocky. Quien solo estaba concentro en la caja pero al momento de ver que el dálmata se sentó en la cama y así poder buscar la mirada del otro, este se puso un poco nervioso. Rocky solo dio un suspiro grande, sabia perfectamente que le iba a preguntar. No seria el primero ni el ultimo.

— Si. No soy un perro de sangre pura pero esos comentarios no me afectan en lo absoluto, es mas. Estoy super orgulloso de ser mitad lobo. 

— No era eso lo que te quería preguntar.

Rocky ahora estaba confundido, pensaba que le iba a preguntar por su raza, pero al mirar  aquel chico de ojos azulados y pelaje blanco con manchas cual carbón. Solo recibió una sonrisa por parte del dálmata, no una sonrisa tierna, si no mas bien era de esas, las cuales tienes en el rostro cuando vez a alguien caerse pero por educación no te ríes del ridículo que hizo el otro.

— Quería preguntarte. Si esta noche querían tu y tu amigo ir a comer algo, no conozco el lugar y seria bueno ir a comer algo mientras esperamos que se le pase todos los males. 

— Bueno..... — Dudoso.

— No lo hará. 

Hablo una nueva voz en el cuarto. Era el pastor alemán quien caminaba de forma lenta hasta llegar a la cama del dálmata  y acostarse en ella. 

— ¿Pero por que?. 

— A las 7 pasan su novela mexicana. — Contesto chase — Así que si vamos a ir a comer será a las 9 de la noche.

— Eso no es verdad. — Avergonzado.

— La usurpadora. 

Contesto chase de manera que solo marshall lo escuchara, pero de todas formas termino escichando rocky quien solo acepto que miraba ese tipo de series. Y con orgullo comenzo a dar su pequeña critica sobre ella.

— Para su información, son novelas muy buenas mostrando un buen guion y actuaciones teatrales. Pero su primera versión por que la nueva es muy mala, ya que sus giros argumentales son muy obvios.

— Bueno. ¿Entonces nos vamos ya?. — Interrumpió Chase. — Por que la noche no durara mucho y el restaurante bueno se llena rápido.

— El mismo donde te intoxicaste. — Respondió el dalmata al lado del lobo.

— ¡Ese mismo!. — Contesto con alegría.

— Necesito probar ahora la de kiwi. Voy por mi chaqueta.

Termino de decir y con toda la prisa fue. Para buscar su chaqueta, dejando a ambos perros en el cuarto donde solo soltaron una risa burlona. Marshall se acerco a Rocky quien se habia quedado en silencio y con delicadeza tomo la mano del lobo. Y sobre ella coloco un pequeño aparato con una memoria USB.

— Ve a conectarlo a tu aparato para que dejes grabando tu novela y puedas acompañarnos.

Rocky no podia contener la felicidad. Pero al estar enfrente de aquel chico solo dijo con desdén.

— Esta bien. Los acompañar solo dame unos segundos.

— Bueno pero no tardes mucho. Tambien quiero provar esas malteadas.— dijo con burla.

Marshall sonrió y cuando se dio la vuelta Rocky habia salido corriendo de la habitación directo a grabar su novela. Aun que el dalmata se sintió un poco molesto por la manera en que lo dejaron solo, pero solo tomo un suéter y salio de aquel lugar y esperar a los chicos afuera, pero la vibracion del celular hizo que al verlo una muestra de molestia se formo en su rostro.

Prejudice©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora