Twice One-Shots

Game over - Minayeon G!p

Si nayeon tuviera que describir a Mina sería como "ideal".

Siempre puntual, cariñosa, amable, paciente, tolerante y servicial pero eso poco decir, a Nayeon le gusta decir que es perfecta aunque, como cualquiera tiene defectos, nada grave si lo piensa con cuidado, por ejemplo, puede dejar pasar que deje la ketchup fuera del refrigerador, puede tolerar que deje su ropa sucia en la esquina del baño, incluso puede soportar a sus miles de amigas que siempre están llamando pero si hay algo que Nayeon odia al punto de sentir su sangre hervir en furia son los estúpidos videojuegos de Mina

Que clase de drogas son para tener tan atontada a la menor?

A la castaña nunca se le hicieron personalmente entretenidos. Se divierte sin duda cuando van al centro de juegos con el resto de su grupo pero piensa que es la euforia social, ha intentado sentarse junto a Mina mientras juega, incluso ha intentado jugar por su cuenta pero el pierde el interés a los pocos minutos, completamente diferente de Mina, la pelinegra podía pasarse horas seguidas frente al monitor sin aburrirse en absoluto.

Era un poco frustrante cuando Mina prefería gastar su tiempo y dinero en videojuegos que en ella. Son horas invertidas ahí, qué pasa con ella?

'A caso no sabe que tiene una ardiente novia a su alcance? Debería manosear la a ella y no al estúpido teclado' pensaba Nayeon.

No creyó que sus horas de juego se extendieran hasta que la luz del sol ya no estaba presente.

Nayeon lo descubrió cuando se mudaron juntas.

Despertando por un poco de agua, la mayor encontró a Mina en el escritorio de su habitación jugando online a las 3 AM.

Lo dejó pasar, no tenían clases y suponía que no era algo habitual como para llamar su atención. Tremenda equivocacion.

Casi a diario era la misma historia, levantarse por los susurros, el rápido tecleo y la tenue luz de la laptop.

La mayor pensó que podría controlarlo, se estaba divirtiendo después de todo, además, si su pequeño pingüino quería hacerlo podría dejarle ese capricho infantil.

No fue hasta la segunda semana consecutiva en que la castaña despertó por la risa de Mina, no era en realidad escandalosa considerando su tono de voz pero en la madrugada cuando todo estaba silencioso parecía la carcajada más fuerte que haya escuchado, le hacía competencia.

Con pereza se enderezó de la cama, el dolor de cabeza no se hizo esperar. Miró el reloj a su izquierda y lo acercó para poder enfocar su vista.

— 5 AM??! — se impresiona tanto que el sueño ya no parece hacerle compañía 

Para su sorpresa Mina no se ha dado cuenta que ha despertado, ni siquiera se da vuelta.

Nayeon resopla con disgusto, no ha dormido bien en mucho tiempo y su dolor de cabeza se vuelve insoportable, afectaba su humor y su rutina. Pero es su culpa, no ha tratado ni siquiera de hablar con Mina o al menos no decirle las cosas directamente, siempre acostumbra lo contrario pero con la pelinegra le cuesta algo de trabajo.

Regañar a Mina era como castigar a un cachorro bebé por tener frío

Resopla y deja de empuñar la sábana para ponerse de pie e ir hasta donde Mina estaba.

Por otro lado, Mina.
Seguía ahí, tan fresca como una flor jugando como si fueran las 2 de la tarde en un día de verano.

A la mayor le seguía sorprendiendo cómo no notaba su presencia o...la estaba ignorando? Cómo se atrevía??

Para no hacer un escándalo temprano, Nayeon aclara la garganta para presentarse, falla rotundamente así que está vez pica con su índice la espalda de Mina.