Dos heridas unidas entre uno solo.

Capitulo 7: Cambios II

En el capitulo anterior:

- No se como mi hijo llego a ese callejón solo se que él se fue a Port Angels ha comprar un medicamento que se le había agotado y unas donas que le gustan mucho a Ángela, le pedí que iría yo pero no quiso. Me dijo que así se podría distraer un rato, cuando tardo mas de lo normal me preocupe así que lo llame pero no me contestaba. Decidí esperar y luego llamar pero nada cambio hasta que recibí la llamada que lo tenían aquí inconsciente y lo habían encontrado en un callejón -unas lágrimas rodaban en sus mejillas, antes que hablara se acerco un doctor-.

- Familiar del joven Ben Windsor?

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- Nosotras -respondió la mamá de Ben-.

Desperté a Ángela para que escuchara, cuando abrió los ojos se levanto rápidamente un poco avergonzada.

- Su hijo se encuentra fuera de peligro, no tiene señal de algún golpe por la caída o herida, solo esta un poco débil, razón por la cual cuando despertó se desmayo pero todo esta bien. En un momento puede pasar a verlo.

- Doctor, dijo algo de que fue lo que pasó? - preguntó Ang-.

- No, solo cuando lo estábamos revisando se incorporo de golpe asustado y luego se desmayo. Por casualidad andaba enfermo o salia de ello?

- Muy poco, ya se estaba recuperando solo que fue a comprar un medicamento para terminar la receta completa -respondió la Sra. Windsor.-

- Yo les avisare cuando pasan, permiso.

Mire al reloj, eran las 9:45 pm, Charlie me va a matar.

- Tienes que irte verdad?

Levante mi vista hacia Ángela con vergüenza.

- Si, Charlie me va a matar

- Ve entonces, tranquila, gracias por acompañarme - me sonrió débilmente-.

- Y quien te va a dejar?

- No te preocupes, me voy con la mamá de Ben.

- Ok, nos vemos, me avisas cualquier cosa -le dije y ella asintió-

- Sí y ten cuidado por favor.

Afirme con la cabeza y me despedí de las dos.

Salí rápidamente de ahí, no podía estar más tiempo en ese lugar, me subí a mi coche casi congelándome, hacia demasiado frío, lo puse en marcha. Todavía tenía un nudo en el estómago, todas las cosas que me recordaban a ellos y las cóleras del día de hoy que se fueron acumulando los solté por medio de lágrimas que, con rabia, quitaba con mis manos.

Cada vez se hacia más borrosa la carretera, por un momento pensé que era por que lloraba, pero no era así, estaba cubierta por neblina y precisamente iba cruzando la carretera del bosque. Un frío helado recorría todo mi cuerpo, no me sentía tranquila en ese lugar, puse más atención a la carretera y gracias a Dios lo hice!.

Escuche el chirrido de las llantas al frenar de golpe, no podía creer lo que estaba viendo, las luces del coche alumbraban la calle y en ella había un cuerpo en el suelo, todos mis nervios se pusieron de punta, algo dentro mio me decía que huyera de ahí o llamara a la policía, pero otra parte me decía que me acercara y viera si aun estaba vivo y llamara a la ambulancia.

Con el corazón casi en la boca me baje de mi pickup,cerré la puerta apretando en mi mano el celular, cuando llegue no había nada, en mi mente una voz me gritaba huye!!!. Empecé a caminar hacia atrás atónita hasta que choque con algo, brinque hacia adelante y un lastimero grito salio de mi boca; alguien la tapó, abrí los ojos y vi que era un hombre, tenia los ojos más azules que jamas había visto en mi vida, eran realmente hermosos. Me miro fijamente alzando una ceja, me sentía temblando y no precisamente del frío.