Dos heridas unidas entre uno solo.

Capitulo 11: Frente a Frente.

Me desperté cuando el despertador empezó a sonar, me estire levantandomevde la cama, tome mi toalla caminando hacia el baño, abajo se escuchaba el televisor prendido así que Charlie ya se había levantado.
Tome una ducha rápida y me vestí con una blusa manga larga celeste, unos jeans negros y botas militares del mismo color, me hice una cola alta y baje a desayunar saltando las escaleras, entre a la cocina dándole un beso a mi padre y me fui a servir un poco de cereal.
Este me miro asombrado.
- Te has levantado de buen humor -afirmó-.
Negué con la cabeza mientras comía mi desayuno.
- No, me siento descansada, cosa que es muy diferente.
Él solo rio, termine de comer y subí a lavarme lis dientes; tome la mochila con mis libros y corrí hacia mi pickup despidiendome de Charlie en el camino.
En el instituto pasaban las horas mortalmente largas, Ángela estaba que brincaba de alegría -literalmente- teniendo a Ben a su lado quien se encontraba mejor. Me hacían sentir cómoda en cierta forma,trataba de dejarlos solos unos momentos pero ninguno de los dos me dejaban alejarme, en cierta forma se los agradesco, no tenia ganas de que mis pensamientos y el hueco en mi pecho me torturaran.
Las demás personas ya no me miraban sorprendidos, tenían cierta cautela pero ¿quien los podría culpar?. Mis compañeros de clase me saludaban con más animo, por otra parte eran los casos de Lauren y Jessica, Lauren no perdía la oportunidad de recordar a los Cullen cada vez que podia, cosa que me dolía pero trataba con todas mis fuerzas de ignorarla; y Jessica... bueno no nos mirábamos ni hablabamos, solo cuando era urgentemente necesario o cuando Mike sacaba "sutilmente" el tema de invitarme a salir, esto hizo que ella me taladrara con la mirada pero preferí ignorarla.
Al final de clases decidí ir al supermercado a comprar unas cosas que nos faltaban e ingredientes para la cena. Cuando baje del auto tenia la extraña sensación de ser observada, tome el carrito mientras respiraba para controlar mi corazón y entre.
Tome mi tiempo para elegir lo que necesitaba, me encamine al pasillo de licores a comprarle unas cervezas a mi padre, cuando tome la lata alguien más hizo lo mismo. Levante la vista y de golpe se me fue el aire, al frente mio se encontraba un hombre que máximo no pasaba los 20 o 22, era alto como de un 1.76 o más, tenia el cabello negro y lacio, se veía tan suave que daba la tentación de tocarlo.
Vestía unos jeans negros parecidos a los mios, una camisa polo café oscura que se le ceñía al cuerpo mostrando un buen físico y una chaqueta negra, su cara tenia una buena estructura ósea, especialmente su mandíbula, lo que me sorprendió aparte de lo obvio fueron sus ojos, eran de un azul profundo como el mar, se me hacían conocidos pero no podía recordar de donde, poseía una nariz recta y una boca un poco gruesa que ahorita la tenía torcida por la risa que seguro estaba tratando de controlar.
- Vamos linda, cierra esa boca que puede entrar una mosca -dijo-.
Eso me hizo reaccionar al instante soltando la lata de cerveza, las mejillas se me tiñeron de rojo.
- Si gustas te puedo invitar?
Lo mire tratando de controlar los nervios que sentía.
-No..no tomo
Alzo una ceja como si no me creyera.
-Es para tu novio?
- No era para... bueno en realidad porque tengo que darte información.
Rio suavememte.
- No sabia que hablar en un supermercado con una bella joven fuera dar mucha información.
Volví a sentir el calor en mis mejillas, sin contestarle tome cualquier cerveza y me volví hacia el pasillo de pastas. Tome unos paquetes de espagueti y otro de canelones.
- Puedo darte un secreto para las pastas si gustas -susurro en mi oído-.
Pegue un pequeño grito y deje caer los paquetes que sostenía, él las tomo antes que se partieran en el suelo.
- ¿Pero que te pasa!? -casi le grite dandome la vuelta para enfrentarlo-.
Se encogió de hombros.
- No es mi culpa que estés tan nerviosa.
Lo fulmine con la mirada.
- No estoy nerviosa
- Oh vamos linda, cualquiera que me vea se pone nerviosa -me guiño un ojo- es lo mas obvio.
Vire los ojos en blanco, era guapo pero impertinente y prepotente al mismo tiempo.
- Sabes felicidades por las demás pero yo estoy ocupada y simplemente no hablo con extraños - me di la vuelta esperando que entendiera el mensaje y heche otros paquetes de espagueti-.
- Eso se puede arreglar -dijo caminando con su carrito a la par mía, trate de ignorarlo pero era bastante terco.
- No, no se puede y así se queda -conteste irritada-.
- Oh claro que sí, no seas agua fiestas linda.
Pare en seco, ya me estaba cansando.
- Bueno señor "yo soy divertido-súper genial", ¿como se arregla?
-Simple -sonrio de medio lado- Soy Damon, ¿El tuyo?.
Alce una ceja, tal vez decirle que era la hija de un policía lo alejaría, todos conocen a Charlie.Respire profundo y conteste.
- Isabella Swan, hija del jefe Swan.
Ahora fue su turno de alzar una ceja
- Interesante -contesto-.
- Ser hija del policía -confirme-.
- Bah, No eres la única que conozco que tiene como familia un policía, lo interesante es tu nombre, es Italiano. Isabella -susurro separando mi nombre despacio en su boca-.
Se me puso la piel de gallina.
-No es gran cosa, es un simple nombre.
- Puede que tengas razón, Beh,cara Isabella. ¿Vuoi las ciate che vi seguro il resto del modo?
Mi corazón se aceleró al escucharlo hablar de esa forma. Lo mire atónita mientras el trataba de no romper en risas frente a mi.
- Que dijiste?
- Querida Isabella, me permites seguirte el resto del camino -sonrio de medio lado, me gustaba esa sonrisa. Heyy!! Alto Bella!!-.
Una vocesita me decía que no, que lo hechará y fuera grosera pero cuando lo mire directamente a los ojos se me olvido todo.
- Cla..ro -tartamudie-.
- Perfecto -sonrió ampliamente-.
- Entonces Isabella, ¿ que estamos comprando? -pregunto-
- Perdón? Primero es Bella y segundo yo estoy comprando, tú solo llevas una botella de no se que y una lata de cerveza.
Meneo la cabeza y replico
- Primero te diré Isabella, suena mucho mejor, me gusta; segundo es Wisky y tercero voy a pagar por ello por lo tanto si es una compra -me guiño un ojo- Así que te vuelvo a preguntar: ¿que estamos comprando?
Suspire cansada, no iba empezar una discusión con él.
- Lo principal es lo que voy a cocinar hoy, Pasta a la Boloñesa.
- Te puedo recomendar unos ingredientes para que te quede exquisito.
- JA! ahora tu cocinas! -respondi irónicamente-.
Cuando me di cuenta que lo había dicho en voz alta me arrepentí sintiendo mi cara arder, yo no me comportaba así, me mordi el labio.
- Auch!, eso hirió mi ego -respondió con una sonrisa- para que sepas aparte de que soy increíblemente sexy se cocinar, cuando quieras te lo puedo demostrar.
Esto ultimo lo dijo con tanta seguridad y ardor en los ojos que de los mismos nervios empecé a reír.
Cuando pague los artículos del carrito y Damon pago lo suyo fuimos al parqueo, ya estaba atardeciendo y empezaba a soplar más fuerte el viento.
- Te llevo? -preguntó, vi que sus ojos brillaban y el azul se volvía mas oscuros.
- No gracias, aquí esta mi auto.
Llegue a este y empeze a meter las bolsas de la compra. Me despedí alzando la mano hacia Damon y subí a mi pickup tratando de arrancar. Por mas que lo hacia no pasaba nada.
- Rayos -suspire, buen momento para descomponerse-.
Alguien toco la ventanilla, puse los ojos en blanco abriendo la ventana, él se asomo.
- Segura que no quieres que te lleve, mi oferta esta aún en pie.
Lo mire dudando, analizando la posible opción de regresar caminando.
- No puedo dejar mi camioneta aquí
- Puedes llamar a una grúa, ¿ hay grúas verdad?
No le conteste y solo reí.
- Al fin vas aceptar que te lleve?
- No me queda otra opción señor desconocido.
Sonrió mostrando una fila de dientes blancos. Tome las bolsas y lo seguí hasta llegar a su auto, metí las cosas y él me abrió la puerta, entre un poco incomoda, ese gesto me recordó....no pienses en ellos!
- Todo bien -preguntó-
- Si -conteste no muy segura-
Tome mi celular para avisar que recogieran mi carro y él arranco, solo hablaba para decirle donde ir, cuando empezó a sonar una canción en la radio instutivamente la iba a cambiar cuando él ya la había apagado.
- ¿Querias escucharla?
Negué con la cabeza.
- Por favor, nada de música, por lo menos baladas no.
El solo asintió y siguió con la vista fija en la carretera
- Eres nuevo? ¿Acabas de llegar? -le pregunte-
Me pareció ver una pequeña sonrisa.
- Hace poco sinceramente
- ¿Has venido solo?
- Si -contesto-
Íbamos pasando la carretera del bosque, un escalofrío recorrió mi columna.
- Me parece haberte visto antes, -le dije pero no respondió así que prosigui- y tu familia?
Vi que apretaba las manos en el volante.
- No quiero hablar en estos momentos de ellos Isabella -respondió en tono cortante-.
Me mordi el labio tratando de guardar las preguntas para mi y no incomodarlo.
Aparcó al frente de mi casa, Charlie no había llegado temprano así que respire aliviada, baje sin esperar que me abriera la puerta. Me miro alzando una ceja pero no le tome importancia, abrió la cajuela y tome unas bolsas para colocarlas en la puerta del porche, al darme vuelta lo tenia al frente, tanto que choque con él y me fui para atrás pero me sostuvo desde la cintura. Lo mire embobada.
- Que... Que haces? -le pregunté-
- Ayudandote a entrar las bolsas -contestó- solo deja me entrar para meterlas.
Me separe para pensar
- Dejalas afuera, no es necesario. Suficiente con que me hayas traído.
- No hay problema, solo dejame entrar - dijo suavemente mirándome a lis ojos-.
Sacudi la cabeza, me sentía un poco confundida.
- Estoy bien, no te preocupes, yo las meto -dije esto último abriendo la puerta para no verlo-.
Tome todas las bolsas que pude y entre con ellas, él seguía de pie al frente de la puerta, respire tranquila, aliviada que me hiciera caso.
Salí de nuevo a recoger la ultima bolsa pero él ya la tenia en la mano y me la tendió, la tome brindandole una pequeña sonrisa.
- Puedo ayudarte a cocinar.
Me reí, era increíble.
- Me puedo encargar de ello, además Char... digo mi papá no tardara en llegar así que todo esta bien. Te agradesco mucho queme trajeras, te debo una.
Sin darme cuenta tomo mi mano libre y se la llevo a los labios dándole un beso, una corriente eléctrica paso por todo mi brazo hasta llegar a mi corazón que reacciono como loco.
- Fue un placer Bella Isabella, tomare lo ultimo muy encerio -me guiño un ojo- Buenas Noches.
Respire con un poco de dificultad para contestarle.
- Buenas Noches Damon -susurre-.
Lo vi subirse al coche y alejarse, cerré la puerta despacio y en arrecoste contra ella. ¡Que diablos fue todo Aquello!
Inhala-Exhala, Inhala-Exhala, me repetía mentalmente. Cuando ya estuve más tranquila me dirigí a la cocina para preparar la cena.

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*U* Damon!!
¿ a cuantas no les gustaría que este bombón las dejara en la puerta de la casa y se despidiera de es forma!!!? \(*-*)/
Ya otro capitulo, baaaaastaaaaaaante largo.
Ojala les guste!
No se les olvide comentar y votar que les parece :)
Los invito a que pasen por una nueva obra que hize,
Se llama "pensamientos y one-shoot" :D y me digan que tal.
Besos!!!! :*