Quizás, porque
28 de Marzo 2014
Valentín había ido a merendar a lo de Lucía. La familia de la castaña ya estaba enterada de que salía con alguien, lo conocían y les caía bien.
- ¿Mate está bien o querés otra cosa? - preguntó ella.
- Mate está perfecto, ¿te ayudo en algo?
- No Val, tranqui.
Pasaron la tarde escuchando música y riendo entre besos. Lucía sonreía cada vez que lo veía hablar con su madre con soltura, como si se conocieran de toda la vida.
- Hay un temón de Grupo Play que te va a encantar, Laura - dijo él buscando la canción en su celular.
- A ver - contestó la madre de Lucía.
Valentín reprodujo el tema mientras se movía al ritmo de la música y Lucía se reía. Le guiñó el ojo y le sonrió.
- ¿Me lo podés descargar? - preguntó Laura - Así lo escucho yendo al trabajo.
- Valentín estás creando un monstruo - dijo Lucía riendo.
- Callate vos que no sabés nada - contestó su madre - Ahora Valen descarga esto y vayan a comprar por favor.
- Listo Laurita - dijo él - ¿Qué hay que comprar?
Laura les dio la lista y ellos fueron al chino del barrio a comprar. Valentín salió antes y la esperó sentado en la vereda. Al salir, ella se sentó a su lado.
- ¿Qué día es hoy Lu? - preguntó él.
- 28 de Marzo, ¿por? - contestó ella curiosa.
- Bueno, ¿qué opinás de que el 28 de abril yo te diga "feliz primer mes de novios"? - dijo él mirándola tímido. Lucía se puso colorada enseguida, la había tomado por sorpresa.
- Me parece una hermosa idea - contestó sonriendo.
- Qué bueno, novia - dijo tomándola de los cachetes y plantándole un beso.
Ya de nuevo en la casa de Lucía se pusieron a ver una película hasta que la cena esté lista. Laura lo había invitado a comer y él, gustoso, había aceptado. Se besaron todo lo que duró la película, cuando se les iba un poco de las manos, él frenaba. No quería desubicarse, sabía que era virgen y que era algo importante para ella. Lucía estaba en las nubes, se sentía extasiada cada vez que él la besaba de esa manera. Obviamente no iba a perder su virginidad en ese momento, estaba toda su familia y no iban a poder hacerlo especial. Además, recién se habían puesto de novios y sentía que necesitaba un poco de tiempo, pero cada vez que él la besaba dudaba de qué tanto tiempo iba a dejar pasar.
Cenaron entre risas, los padres de Lucía contaban anécdotas que la hacían poner colorada y Valentín no se cansó de preguntar cosas. Le gustaba cómo lo hacían sentir en esa casa, era uno más y estaba cómodo siéndolo. Había encontrado su lugar. Ayudó a levantar la mesa y se sentaron a comer el helado de postre que se había encargado de comprar, no le gustaba no llevar nada.
- Era imposible, no había manera de lograr que deje de comerse la plastilina. La descuidabas dos segundos y ella se comía sus creaciones - comentó Laura.
- Qué asco Lucía - dijo Valentín riendo.
- Tenía 4 años, todos hacemos cosas raras a esa edad - contestó indignada.
- Vos fuiste rara siempre - se metió la hermana menor de la castaña.
- Camila - chilló - ¿de qué lado estás?
- Del lado de la verdad - contestó sacándole la lengua.
Las hermanas de Lucía se pusieron de acuerdo para hacerla vergüenza contando muchas anécdotas que la dejaban mal parada. Valentín no paraba de reír y de complotarse con sus - ahora - cuñadas. Estaba muy cómodo y se sentía feliz. Tenía mucho miedo antes de ir a verla, no sabía si ella iba a aceptar. Si bien salían hace unos meses y de manera exclusiva, quizás ella no quería una relación o le parecía pronto. Cuando aceptó, pudo respirar tranquilo. Hicieron sobremesa y, cuando los padres de Lucía se levantaron para despedirse e ir a dormir, él decidió que era hora de volver a su casa.
- Me pido un remo Lu, que es tarde ya - dijo mirándola.
- Dale, ahí llamo y te lo pido.
Se despidió de las hermanas y salió a esperarlo a la puerta con la compañía de su novia.
- La pasé re lindo, agradecele a tu familia.
- Valen, estuviste toda la noche agradeciendo - rió - No es nada, a todos les caes re bien.
- Me caen bien a mí también, tus hermanas son unas genias.
- Las voy a matar, me dejaron re mal parada.
- Te dejaste mal parada vos solita cuando hiciste todas esas cosas - dijo molestándola.
- Basta, ya sufrí demasiado por hoy - dijo haciendo puchero. Valentín se derritió - Ahí vino el auto, avisame cuando llegues porfa.
- Sí hermosa. Chau, gracias por todo - dijo dándole un beso. Quiso decirle que la quería, pero era mucho para un solo día y se contuvo.
Lucía se metió a su casa con una sonrisa, estaba más feliz que nunca. Abrió whatsapp para contarle a sus amigas lo que había pasado.
"Me puse de novia con Valentín" fue todo lo que mandó y esperó sus respuestas. Dos minutos y el grupo se había llenado de mensajes festejando y preguntando cómo había pasado. Lucía les contó la situación de manera textual y les comentó que estaba muy contenta con cómo se habían dado las cosas. Sus amigas la felicitaron, sabían que ella la había pasado mal y que la llegada de Valentín a su vida había cambiado las cosas.
"Hola novia, llegué" lo leyó tres veces y sonrió.
"Buenísimo novio, gracias por venir" contestó.
"Gracias a vos por invitarme, novia"
Estuvieron hablando un rato más, Valentín no paró de decirle novia en toda la noche y ella se durmió feliz. Era una felicidad tangible, real. Estaba ahí y le sonreía con sus ojos azules chinitos. Valentín entendió que la castaña se había dormido y se acomodó para hacer lo mismo, pero en su cabeza no dejaba de repetir el día que había pasado junto a ella. Estaba con quién tenía que estar, era su alma gemela. Jamás había coincidido tanto con alguien y nadie lo había hecho reír de la manera en que lo hacía ella. Hace mucho no era tan feliz.
Quizás porque no soy un buen comerciante no pido nada a cambio de darte lo poco que tengo: mi vida y mis sueños.
Voy a contar algo que me da mucho cringe pero WENO: la historia está basada en mi primer novio (SOLTAR ENFERMAAA) y, si bien hay algunas cosas cambiadas, estoy apegándome lo más posible a la realidad porque fue una historia linda y siempre sentí que faltó algo para darle cierre. Eso, nada más.
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Peperina
Teen Fiction«Y dentro de su cuento ella era cenicienta, su príncipe era un hippie de los años sesenta»