Be My Forever ✩Choni✩

16

Toni suspiró, de alguna manera no queriendo recibir ese mensaje, puso el celular en su bolsillo, volviendo su mirada hacia Cheryl quien no la estaba mirando. Deslizó su mano hacia el costado de la pelirroja, entrelazando sus dedos nuevamente, y la miró.

- ¿Qué quieres hacer ahora? -

preguntó, esbozando una sonrisa y agitando su mano junto con la de Cheryl. La más alta no tuvo tiempo de responder, un fuerte trueno la sobresaltó, llamando su atención. Miraron juntas el cielo sin estrellas, un anuncio de que en cualquier momento podría llover.

- Creo que eso responde. - se encogió de hombros. - ¿Te importa si nos vamos? -

- No, pero podemos caminar y hablar un rato. -

Toni sugirió que quería tanto tiempo como fuera posible con Cheryl.

- Va a llover. -

- Ahora no, ¿y por casualidad eres azúcar? -

Arqueó las cejas, la pelirroja puso los ojos en blanco y, sin contestar, empezó a caminar tirando de Toni. Ella misma reía, negaba, amaba bromear, pero pronto se inventaba para sacar a relucir un tema para relajarse. Caminaron por las calles con las manos juntas, a Cheryl le gustó la sensación incluso si nunca antes la había experimentado. Caminando de la mano de una chica, por las calles ... Nunca imagino que esto pasaría.

Pero estaba sucediendo y fue con Antoniette. En un momento, detuvo su mirada en la morena que hablaba sin parar sobre lo mucho que ella y Jughead eran amigos. Ella es hermosa. pensó, maravillándose de los detalles de su rostro. Lo único que la sacó de sus pensamientos fue una gota de lluvia que cayó justo sobre su hombro, miró hacia arriba sintiendo que las gotas aumentaban por segundo.

- Ahora no, ¿eh? -

Provocó a Toni que dijo que no llovería ahora.

- Llamaré a un taxi por nosotras. -

La morena habló, quitándose la chaqueta del cuerpo y poniéndola sobre los hombros de Cheryl.

- No la necesito. -

- Si la necesitas, pontela. -

Toni la hizo ponerse la chaqueta y la pelirroja puso los ojos en blanco.

- Está bien, pero no es necesario que llames al taxi. - Dijo sintiendo una fina llovizna sobre ellas. - Ha pasado mucho tiempo desde que me di una ducha bajo la lluvia. -

Cheryl sonrió emocionada como una niña, Toni la miró asombrada por el brillo que la pelirroja tenía en sus ojos como si lo hubiera querido durante años.

- Bueno. - dijo, tomando de nuevo la mano de Cheryl. - Si quieres podemos caminar hasta mi casa, está más cerca. - la pelirroja la miró. -Y dormir allí. -

El tono de Toni cayó como si estuviera avergonzada y lo estaba. Cheryl no hay planeado en dormir en su casa, pero sería una buena oportunidad para pasar más tiempo juntas, ¿verdad?

La más alta pensó mucho antes de responder, nunca se acostó con sus chicas, pero pensó en las palabras de Toni. Si lo permites. Esta noche y con Toni, se lo permitiría. Se estaba permitiendo a sí misma. Y esperaba no arrepentirse de haberlo hecho.

- Mmm. - Cheryl murmuró, mirando al frente. - Por supuesto, solo tenemos que detenernos en algún lugar para poder decirle al cuidador que no voy a regresar. -

Toni quería celebrar, pero se contuvo llevándola a una parada de autobús que estaba cubierta. Esperó a que la niña le enviara un mensaje, ofreciéndose inmediatamente a guardar el dispositivo ya que lo llevaba todo el tiempo en sus manos. Metió un teléfono celular en cada bolsillo trasero de sus pantalones, sabiendo que ambos eran impermeables.