Be My Forever ✩Choni✩

31

En Thistlehouse, Toni rebuscó en los distintos gabinetes de la cocina, buscando todo lo que pudiera ofrecerle a Cheryl a esa hora de la mañana. Se despertó primero que la pelirroja, dejándola en la cama en un sueño tranquilo y decidió complacerla un poco llevándole café. Aparentemente era difícil cuando no sabías dónde se guardaban las cosas, tener que abrir puerta por puerta.

- ¡¿Toni ?! -

Dio un salto de susto con la voz que estaba presente en la cocina, cuando giró su cuerpo encontró a Mary llena de bolsas en sus manos, su mirada bajó a su propia ropa dándose cuenta que solo estaba en camiseta sin mangas y bragas. Sintió que su rostro ardía de vergüenza.

- Hola. -

Habló con timidez.

- ¿Qué haces aquí?

Mary frunció el ceño, colocando las bolsas sobre la mesa al notar la falta de ropa de la más joven. Se encogió, deseando que le hubieran hecho un agujero debajo de los pies para poder caer y escapar de esta situación.

- Emm ... - Se rascó la nuca. - - Cheryl y yo estamos juntas, hablamos ayer. -

- Comprendo. -

La mayor murmuró con sospecha.

- ¿Estabas buscando algo? -

- Sí ... yo ... quería hacer un café para llevárselo -

Hablaba completamente nerviosa con la mirada de Mary en ella, la mujer que siempre fue tan amable parecía analizar cada uno de sus movimientos como si lo estuviera haciendo todo mal.

- Haré el café, traje pan recién hecho, pero primero echaré un vistazo a Nana. -

-¡Ya la vi! -

Toni respondió rápidamente, sorprendiendo a Mary.

- Cuando me levanté fui a su habitación, todavía estaba durmiendo. -

Ella se encogió de hombros, la mayor asintió, todavía estudiándola. Su atención estaba en las bolsas que traía, siempre llenando las existencias de Cheryl, sabiendo exactamente qué faltaba o no en la casa. Toni pisoteó con el pie, mordiéndose el labio, molesta por la forma en que Mary la miraba.

- Puedo ayudar... -

- Deberías ponerte algo de ropa, en realidad. -

Interrumpió a la chica, asintió frenéticamente caminando hacia las escaleras. Mary suspiró mientras salía de la habitación, preguntándose por qué no veía ningún daño en Toni. Hirió a su chica, tenía que parecer dura y demostrar lo que pasa cuando se meten con su protegida.

Cuando la más joven regresó ahora con pantalones, Mary ya estaba poniendo las cosas favoritas de Cheryl en una bandeja. Zumo de naranja, pan y fruta, Toni observaba todo atentamente, temiendo decir una palabra. Tenía miedo de la forma en que la mayor la trataría, ni siquiera podía intentar disculparse porque sabía que estaba completamente equivocada.

- ¡Listo! -

Anunció, tomando la bandeja en sus manos y acercándose a Toni quien rápidamente la tomó, pero Mary no la soltó, mirando fijamente a los ojos marrones de la niña más joven.

- Si le vuelves a hacer daño, te juro que te mataré, Antoniette. -

Amenazo, el tono duro de la mujer hizo que Toni tragara saliva, sintiendo que si lo hacía, seguramente esas palabras se harían realidad. Mary dejó caer la bandeja después de que la morena asintiera, caminando lo más rápido que pudo fuera de la cocina, sintiendo la falta de aire en ese lugar.