Todo habia terminado

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La batalla que habíamos enfrentado, todos los esfuerzos y años de dedicación por acabar a Muzan, toda la preparación de los cazadores de demonios, todo había sido completamente inútil

Muzan había conseguido discernir nuestros planes y al igual que nosotros se había preparado, consiguió infiltrar a varios de sus aliados humanos al cuerpo de cazadores, muchos de ellos eran allegados al líder Ubuyashiki por lo cual su traición significó un duro golpe para todos

Muzan había conseguido la inmortalidad y el poder absoluto por dos razones, la primera consiguió la rara flor conocida como Blue Spider Lily, esta flor le brindó la mayor de las fuerzas y la inmortalidad para siempre y la segunda fue cuando asesino a Nezuko bebiendo su sangre, gota por gota, era por ello que se hizo inmune a la luz del sol transformándose en un ser indetenible

Los pilares yacían destrozados en el frío suelo del pueblo en el que habíamos acabado, mis amigos agonizaban a mi lado mientras veía como ese monstruo rompía la katana de Tanjiro para partirla a la mitad sin el menor esfuerzo, mientras se acercaba tomó a mi amigo con una de sus garras alejándolo del frío cuerpo de su hermana 

-Querido Tanjiro, no existe la necesidad de llorar por algo que no existe, tu hermana nunca seria lo suficientemente fuerte para estar a mi lado, pero tu eres diferente incluso al ver los horrores que he cometido tu mirada no me evita- tratando de soltar su agarre Tanjiro luchaba con todas sus fuerzas pero antes de que nadie pudiera hacer nada Muzan le inyecto su sangre

-Con solo pensar en lo fuerte que era tu hermana pienso que fue una lástima que se hubiera revelado ante mi, de no haberlo hecho estaría a tu lado como una luna superior, pero Tanjiro tú tomarás su lugar, dentro de ti corre una sangre especial que es la que te permite la respiración solar-  mientras mi amigo convulsionaba por la sangre, veía como se transformaba ante la mirada expectante de Kibutsuji

-Serás como el hijo que jamás pude tener, juntos reinaremos las tierras, nadie podrá resistirse a nuestro dominio tu y yo Tanjiro por toda la eternidad- mientras mi amigo perdía la conciencia, Muzan lo miraba como un padre a un recién nacido

Nadie decía nada, el silencio que se percibía daba miedo porque todos sabíamos que ya no existía una pelea que se pudiera vencer, habíamos perdido completamente, al girar mi cabeza vi a los pocos compañeros que quedaban con el horror más absoluto grabado en sus rostros, quería gritar, deseaba poder eliminar a ese monstruo con todo mi ser pero la realidad me daba un duro golpe, tenía una pierna rota, mi cuerpo no me respondía por el agotamiento y las heridas, respirar consumía toda mi energía y que un demonio me hubiera apuñalado con sus garras me daba a entender fríamente que después de este día yo ya no existiría

-¿No les perece que el silencio es de las cosas mas preciadas que podemos tener? - Muzan había dejado a Tanjiro en los brazos de su segunda luna superior Douma, para acercarse a los pocos sobrevivientes

-Entiendo que ahora estén asustados pero hoy me siento generoso, tengo que admitir que verlos pelear con tanta pasión me hizo sentirlos dignos, presiento que sería un desperdicio el no usar a los últimos guerreros de Ubuyashiki así que a cada miembro del cuerpo de cazadores de demonios que se postre ante mi jurando su lealtad absoluta le daré una gota de mi sangre - lo mire con tanto odio como me fuera posible, ese imbécil no era nada estúpido, les daba lo que tanto les hacía falta, les estaba dando esperanza

Al inicio ningún cazador hablaba o incluso se movía pero pronto los primeros en arrastrarse a Mauzan llegaron

-Yo me postro ante ti, quiero desertar como cazador para servirte eternamente a ti mi nuevo señor- era el primer cazador que se rendía ante el demonio, era un muchacho muy joven que posiblemente no pasara de los 17 años, sus lágrimas caían y temblaba sin control cuando le rogaba a Muzan

Zenitsu viajero del tiempo! ⚡️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora