> dieciséis <

55 13 7
                                        

Hoy nos veríamos en el café otra vez, pero no llegaste, ni siquiera me llamaste. Te esperé por más de una hora y... nada, no llegaste.

Estaba emocionado por verte, ya había leído un libro de los cinco de tu lista. Me había llevado más tiempo del necesario pero realmente me costaba leer. No sabia como te divertía tanto eso.

Aún así lo hice por ti.

Al siguiente día te lo recordé cuando entramos a clase de calculo y no paraste de pedirme disculpas en toda la hora, te habías olvidado, estuviste ocupada en casa. A pesar que te dije que no pasaba nada seguiste pidiendo disculpas y como recompensa almorzaste conmigo después de varios días sin hacerlo, eso me alegró un poco.

Me abrazaste de alegría cuando viste la lista con un ítem marcado como leído.

Te invité a ir otro día al café, quería decirte algo importante. Algo que me estaba pasando, y ya no quería guardar.

Aceptaste y no podía esperar al viernes. Estaba más nervioso que nunca. Esas semana al menos volvimos a pasar más tiempo juntos.

Gracias, JessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora