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La mañana siguientes las cosas estaban de cabeza con el par, Mortis estaba en su asiento mirando a la nada, el recuerdo de poco huyendo de él lo hirió.
Por otra parte Poco llegaba al aula con su rostro algo sonrojado, llevaba una bufanda y los ojos algo adormilados, parecía que este se había enfermado pero que hacía en este lugar?

Emz se acerco y le tocó la frente afirmando lo que pasaba, poco estaba caliente y tosia por ratos.

Emz: Llamaré al profesor, no te muevas.

Poco: Para que lo vas a llamar?

Emz: no es obvio? Estás en mal estado, tengo que llamarlo para que te vayas a tu casa.

Poco: no lo hagas, yo quiero estar aquí.

Emz: poco estas enfermo, nesesitas descansar.

Poco suspiro y se recostó en su mesa cansado de la situación.

Sprout entraba alegre al salón, miró a Mortis y fue a abrazarlo ganándose una reacción de sorpresa.

Sprout: te asuste?

Mortis: nono, solo estaba pensando en algo más que no te note.

Sprout: Mortis, tengo algo que decirte puedes acompañarme un momento? –sus mejillas estaban coloreadas y jugaba con sus manos–

Poco miró aquella acción y se levanto rápidamente de su asiento, no podría ser lo que se estaba imaginando.... O si?

Sprout guió a Mortis hacia la espalda del colegio y de su bolsillo saco una carta, no podía decírselo en persona... Era demasiado vergonzoso.

Sprout: toma... Leelo y luego me das una respuesta si?..

Mortis estaba sorprendido, no se lo esperaba y aunque se sentía mal debía rechazar al muchacho.

Poco que estaba mirando todo sintió una punzada en su pecho, su cabeza estaba dándole vueltas y a duras penas podía mantenerse en pie.

Sprout ya se había ido corriendo y en aquel lugar solo se encontraba el pelimorado mirando la carta, no podía abrirla y leer lo que estaba escrito, sprout era un buen amigo pero solo era eso.

Poco se sentía cansado y se sostuvo de la pared, no podía dejar que Mortis lo encontrata así que trato de caminar pero eso fue un grave error, su cuerpo no respondió y cayó al suelo.

Poco: auch –Dijo y trato de levantarse pero estaba muy débil como para hacerlo, debió quedarse en cama el día de hoy–

Mortis camino y encontró al muchacho tendido en el suelo, estaba inconsciente y su cuerpo quemaba, lo único que se le ocurrió fue cargarlo para llevarlo a la enfermería.

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Poco abría los ojos suavemente, la fiebre había bajado y ahora se sentía mejor, miró a su lado encontrándose con Mortis recostado a un lado de la camilla de la enfermería eso lo tomó por sorpresa, nunca imagino al chico en esa situación. Inconscientemente llevo su mano a los cabellos del muchacho y lo acarició, se sentía tan suave y tan cálido, si las cosas fueran diferentes poco hubiera estado junto a él diciéndole lo mucho que lo quería.

» 𝑺𝒆𝒈𝒖𝒏𝒅𝒂 𝑶𝒑𝒐𝒓𝒕𝒖𝒏𝒊𝒅𝒂𝒅 « ᵐᵒʳᵗⁱˢ ˣ ᵖᵒᶜᵒ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora