Rannett | wolf friend

013

Goth seguía dándole vueltas a aquella conversación que había tenido con el pequeño Bennett días atrás , ¿Cómo era posible que algo así le haya pasado a su pequeño hijo? ¿Cómo había podido enfermar de aquella forma?

Suspiró cansado mientras se levantaba de su cama, había considerado contarles sobre lo ocurrido a sus otros compañeros quienes también se dedicaban a cuidar a Bennett, pero no quería que el portador pyro se sintiera peor por haber adquirido aquella aberrante enfermedad.

Caminó tranquilo hasta la cocina donde uno de los aventureros jóvenes del gremio preparaba la comida para todos los residentes de aquel hogar, Goth le sonrió con ternura mientras se acercaba a él para mantener una charla.

-¿Cómo va todo con Margaret?-Preguntó.

-Oh de maravilla, esta tarde saldremos juntos de nuevo.-Comentó el joven con gran entusiasmo.

El mayor asintió contento.-Ese es el camino que hay que seguir, Bennett debería aprender de ti.-Soltó el hombre tomando una vaso de agua.

-¿Bennett se ha portado mal?-Indagó el cocinero.

-No te preocupes, ya se le pasará.-Declaró abandonando la cocina esperanzado de que a Bennett se le pasara aquella confusión de una vez. Tal vez buscando alguna linda joven como su amiga Fischl podrían hacerlo cambiar de opinión, o incluso Amber o la niña que quiere convertirse en caballera de Favonius. 

Se alegró de ver que el día anterior la rubia se había pasado por su hogar en busca de Bennett, aquella era una chica linda con la que podía estar y construir un futuro juntos, una familia hecha y derecha.

Acabó por salir de la residencia, necesitaba algo de aire para pensar mejor, tal vez si lo llevaba a algún convento... o tal vez la hermana Rosaria se ofrecería ayudar para quitar el mal del pequeño Bennett.

Pero si no quedaba de otra lo llevaría lejos dónde nadie pueda encontrarlo, al menos hasta que el menor cambie sus ideas.

En el camino se encontró a Marjorie y se quedó a charlar con ella.

-Marjorie, ¿Qué tal? ¿Cómo estas?-Preguntó el mayor con una sonrisa.

-Oh muy bien señor Goth, ¿Y usted? ¿Aún le duele la cintura?-

-¡Ni hablar! ¡Estoy como si tuviera treinta de nuevo!-Exclamó el anciano divertido.

De pronto el ambiente comenzó a sentirse algo tenso por lo que el señor Goth volteó la mirada y se encontró con unos cuantos comerciantes susurrando entre sí y admirando una misma dirección.

-¿Qué sucede?-Preguntó el hombre interesado.

-Lo de siempre... El niño lobo está en la ciudad.-Respondió con un suspiro la mujer.

-¿Niño lobo?-Repitió confundido.

-Oh si, Lisa lo rescató del bosque, hacía tiempo que no venía a la ciudad pero últimamente se la pasa buscando a Bennett para ir de aventuras.-Contestó la castaña.

El anciano abrió en grandes los ojos, ¿Ese niño junto a Bennett? ¡Ahora entendía de donde habían salido esas ideas raras! Y si no se equivocaba ya estaba seguro de quien era ese chico del que estaba "enamorado" Bennett. Sin dudarlo un segundo más se acercó al joven peligris quien avanzaba con algo de desgana por la ciudad.

-¡Tu!-Señaló el anciano molesto, Razor lo observó sin entender quien diablos era ese señor. Éste una vez estuvo en frente del joven portador electro le soltó un golpe haciéndolo trastabillar.

-¡Señor Goth!-Exclamaron Marjorie y Katheryne quienes se encontraban observando la escena, de inmediato abandonaron sus puestos para ir a detener al mayor.