Even if you are alone you have me |kazufuyu|

Capítulo 2: Buenos amigos

Casa.

Hogar.

Calidez.

A Kazutora le daba vergüenza decirlo en voz alta, incluso el pensarlo le daban ganas de enterrar su cabeza en la tierra. Pero, en estos momentos, mientras sentía el viento sobre su rostro, mientras observaba a Baji manejar a su lado, sonriendo y brillando, mientras iba sobre la moto y se aferraba a él, esas eran las únicas palabras que rondaban por su mente.

Kazutora enterró un poco más su rostro sobre Chifuyu, aunque el chico fuera unos centímetros más bajo que él, parecía tener la altura perfecta para poder apoyarse.

El olor de Matsuno llegaba a sus fosas nasales, mareándolo un poco por el olor de este. El cabello teñido, pero suave del chico, rozaban gentilmente parte de su rostro.

Cerró los ojos y dejó sus pensamientos fluir.

Si este chico, Chifuyu, no hubiera interferido allá, ¿Cómo habría terminado todo esto?

Con un final feliz no, seguro.

¿Por qué parecía tan convencido a ayudarme?

¿Es por mi o es por Baji?

Debe ser por Baji, su amigo cada vez que le hablaba del menor recalcaba lo leal y fiel que le era a él. Como es que este pondría las manos al fuego por él sin dudarlo ni un segundo.

Ah, bueno…

Cortó el hilo de sus pensamientos cuando notó que la velocidad iba cada vez bajando más y más, hasta el punto en que la moto se detuvo frente a un edificio.

Ah, la casa de Baji, ¿Había dicho algo sobre vivir en el mismo lugar que Chifuyu?

Vio a Baji detenerse a su lado y bajar rápidamente de su moto, mirándolo a los ojos, luego pasando su mirada a Chifuyu, que parecía estar congelado en su lugar.

— Kazutora, amigo, sé que Chifuyu es calentito y suave, pero tienes que soltarlo para que se puedan bajar.

Kazutora tardó unos segundos en entender, luego rápidamente soltó al menor, con el rostro rojo, se bajó de la moto y le dio la espalda a Chifuyu, murmurando algún insulto a Baji.

— Chifuyu, ¿Están tus padres ahí en tu casa?

— No, Baji-san, podemos subir.

Chifuyu bajó de su moto con lentitud. Si bien Baji se había burlado de Kazutora, él mismo parecía más avergonzado que el mayor. Con la cabeza baja, para ocultar su sonrojo, pasó por el lado de ambos rumbo a su casa, escuchando a Baji decirle algo sobre seguirlo a Kazutora.

Unos minutos después, donde Chifuyu iba a la delantera, llegaron al hogar del menor, tan pronto abrió la puerta, Peke J estaba junto a él exigiéndole mimos y comida.

— Oye, amigo, te he dejado solo todo el día.

Se quitó sus zapatos y fue a darle comida al animal, dejando la puerta abierta tras él, total, cada que Baji iba se paseaba por su casa como si fuera la suya.