❝ℬutterfly.❞ ; Saiki Kusuo.

Perdido ; 11.

Ok, ok.
¿Qué diablos es esta situación?

Yumehara, a pesar de haberle dicho que había perdido su regalo, uno que me había dado con tanto cariño, le dio igual he incluso se rió de eso. ¿Habrá escuchado mal? No, no, ¿Dije algo gracioso? De verdad, todo es muy raro ahora. Confusa, traté de explicarle bien.

— No.. No lo entiendes, yo-

— Sí, entendí. ¿Perdiste el regalo? ¡Está bieeen!

— Pero es.. Un regalo, uno tuyo.

— ¿Y qué con eso?

¿Ehhh?

¿Le daba igual?

— Pero..

— Suiren, podemos buscarlo, está completamente bien.

''Suiren.''

Las lagrimas, comenzaron a brotar otra vez. Sollocé, llevándome las manos a los ojos, tratando de detener las lagrimas que no dejaban de salir. Yumehara, se sobresaltó otra vez, sin saber que hacer, tratando de secarlas con su pañuelo. Yo en cambio, solo asentí varias veces a lo que dijo y Yumehara sólo pudo acariciar mi cabeza. Dandome una sensación de tranquilidad.

Esta vez, era distinto.

Ella era distinta.

Sus lagrimas, eran distintas.

Pues la culpa, se había ido.

Reemplazándola por felicidad.

🦋

Muy bien, recapitulando, otra vez; Suiren le explicó toda la situación a Yumehara, que la escuchó atenta y abiertamente, le mencionó que la había perdido pero no tenía idea de cómo, ya que era muy raro. Ultimamente, Suiren sospechaba de algunas cosas, pero no quería decir nada de nada hasta que estuviera segura, pero Yumehara, resultó ser más astuta de lo que creía.

— ¿Te había pasado esto antes? — Le preguntó, Suiren se sorprendió un poco por su pregunta, mientras que la amiga esperaba una respuesta con tranquilidad, aunque con algo en su mirada. ¿Estaba pensando lo mismo que yo? se dijo a sí misma, pero no creía que fuera eso, Suiren, dudó pero asintió con lentitud. — Ya veo, ya veo..

Guardaron silencio, más que nada porque Yumehara estaba pensando algo con una expresión graciosa. Suiren, respiró profundamente y dio un largo suspiro de alivio, estaba en paz, al fin. Aunque algo nerviosa por cómo reaccionaría Yumehara todavía, quién sabe si podría cambiar de opinión. Así que solo se mantuvo callada hasta que notó cómo Yumehara sonreía algo.. ¿Juguetona? ¿Burlona? ¿Determinada? ¿Eh?

Parpadeó muchas veces al verla pararse de la nada, mirarla con ambos brazos en su costado con una sonrisa. ¿Qué sucede? Ambas habían estado sentadas en el frío y acogedor suelo hasta que ella de la nada se levantó, como si hubiera descubierto algo o como si quisiera ir al baño con mucha rapidez.

— ¡Muy bien! ¡Vamos, vamos! — Yumehara, le tendió una mano, sin dejar de verse feliz y sonriente. Suiren no entendía nada. ¿Vamos? ¿A donde? Sólo pudo confundirse y ceder ante esa feliz chica, ¿Por qué estaba tan feliz? Sólo la miró dudosa y asintió con algo de confusión, tomó su mano y Yumehara no dudó el jalarla, levantandola de golpe. 

Suiren, alzó ambas cejas. ¿Qué le picó? Estaba tan feliz como el día que no hubo clase de Matematicas. Aunque, bueno, no era nada muy nuevo su felicidad constante. Observó como Yumehara, tomada de la mano con ella, comenzaba a caminar. ¿A dónde iban? Suiren tenía muchas preguntas y pocas respuestas. De golpe, Yumehara se detuvo a unos pasos luego de avanzar, se dio media vuelta para mirar a Suiren, con una pequeña sonrisita y algo culpable.