11. Dolor de bola

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―Taehyun la raíz cuadrada de-

―Coño pana de verdad no sé ―cortó el catire, retractándose al verle la cara al profesor.

Beomgyu rodó los ojos y Kai estaba cagado de la risa como todos los demás en el salón.

Danielito tenía un nivel de desconcentración arrecha que no estaba controlando porque al pasar los días había tenido un par de coñazos emocionales, las llamadas "picazones de culo" donde en una de esas le dijo a Alexita que no intentaran nada porque esa vaina no le iba a funcionar e iba a salir jodío.

Ni la dejó responder porque de repente entró en pánico y la bloqueó.

Así que no era nada raro para Joely porque sabía de todos y cada uno de esos ataques repentinos porque hacía la función de psicólogo...de una manera interesante.

―Marico, ya mátate verga, tienes más dramas que una novela de televen.

―Pana, ¿cómo se te ocurre hacer esa vaina? Ni la dejaste hablar, yo me hubiese devuelto al país solo pa' caerte a coñazo.

―De pana que tú lo que estás es falta de coñazo.

― ¿Te vas a pintar el cabello otra vez? Si va pero píntate también el del culo a par de la picazón.

Y muchas respuestas profesionales más de parte del Doctor Joely Coropo.

El profesor suspiró pasándose la mano por la calva antes de regresar a la pizarra a explicar la vaina otra vez porque era evidente que nadie en esa broma había entendido nada. Como siempre.

Kai codeó a Tae. ― ¿Qué te pasa? Tas ido con Maduro y los pajaritos.

Tae se rascó la palma de la mano. ―Me siento mal, me duelen los ojos.

Beomgyu se giró, mirándolo fijamente. ― ¿No te van a doler? Pasaste toda la noche escuchando bachata con el teléfono casi que metido en la retina.

Tae arrugó el entrecejo. ― ¿Cómo sabes?

―A ciertas horas donde el sueño te está llevando junto con la muerte, mandas audios tipo borracho despechado.

Taehyun se frunció los ojos. ―Quiero salir de aquí y dormir...o dormir desde ahorita.

El resto fue la clase mal explicada otra vez de parte del profesor, la gente se hizo la que entendía solo pa' que no siguiera hablando, esperando que sonara el timbre de receso y salieran de ahí a jartar o a buscar su cuadre.

Kai iba agarrando el brazo de Tae camino a la cantina a ver qué compraban, Beomgyu se había ido pal lado contrario del pasillo dejando a los tocayos de tinte confundidos.

Pero cuando estaban en la mesita chiquita de la cantina esperando que les calentaran los pastelitos, Beomgyu se apareció agarrando a Marie del brazo y la chama tenía el moño torcido.

― ¿Qué pasó? ¿Qué le hiciste? ―preguntó Tae, viendo a Mariennys.

Kai saludó a la chama que tomaba asiento junto a ellos, ella respondió el saludo en general y se puso a arreglarse el moñito. ―Joely me asustó.

―Se cagó, mejor dicho ―corrigió el castaño, recibiendo los pastelitos que ni eran de él pero las malas mañas permanecen―, la vi desde la ventana hablando ahí con una chamita después me puse en la puerta y esperé que saliera, le pegué un grito.

Le pegó un mordisco al primero, medio quemándose la jeta y pasándolo con la malta que tenía Kai en la mano. El menor no hizo otra cosa que aceptar el hecho de que su pana era un lambucio sin fondo.

𝑷𝒂𝒔𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒗𝒂𝒊𝒏𝒂𝒔  «𝙺𝚊𝚗𝚐 𝚃𝚊𝚎𝙷𝚢𝚞𝚗»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora