—Dijiste que sería la última vez, por eso vine— Chaeyoung se encogió de hombros.
—¿Quieres algo de tomar? Podemos pedir un café o... —.
—Solo vine a escuchar tu explicación— rodó los ojos. —Estoy apurada—.
—Yo... — no sabía cómo empezar. —Ese día bebí por demás y ese chico... me dejé llevar ¿está bien?, y cuando desperté al día siguiente al lado de él, me di cuenta que ya era demasiado tarde—.
—Bueno, al menos tuviste el valor de admitirlo—.
—Cometí un error, él fue un error, pero yo quiero estar contigo— insistió Rosé. —Dame otra oportunidad—.
—No— respondió tajante. —Te perdono porque tuviste el valor de admitirlo, pero no te daré otra oportunidad—.
—Por favor— continuó insistiendo. —Haré lo que quieras— las lágrimas amenazaban con salir.
—Ya no confío en ti— dijo Chaeyoung molesta. —Ya me voy, tengo que ir a otro lugar—.
"No me rendiré" fue lo último que escuchó Chaeyoung antes de salir de la cafetería.
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*****
—La cena estuvo deliciosa, ¿quién la pidió?— preguntó Chaeyoung mientras se limpiaba alrededor de sus labios con una servilleta.
—Yo la pedí, pero Mina eligió del menú— respondió Momo.
—Yo solo quería probar— dijo la castaña y todas comenzaron a reírse.
—Ya casi es media noche, deberían descansar, ni siquiera han tenido tiempo de ordenar sus cosas— Chaeyoung cambió de tema.
—Estoy de acuerdo, pero pienso que es mejor que se queden aquí aunque sea por esta semana— sugirió Dahyun. —Además, el lugar que encontramos para ustedes aún no está listo del todo— concluyó.
—Tienes razón— apoyó la más baja. —Deberían quedarse por lo menos esta semana aquí—.
—No quisiera incomodarte Dahy... — comenzaba a hablar Mina, pero Dahyun la interrumpió.
—Nah, a mí no me incomodan, al contrario, esta casa es demasiado grande para mí sola—.
Mina miró a Momo para saber cuál era su opinión.
—Solo será una semana Mina, no te preocupes— Momo ya había decidido quedarse.
—Está bien— Mina finalmente accedió.
—Tus maletas aún están en el auto de Dahyun— le dijo Chaeyoung a Mina.
—¿Puedo ir a sacarlas?— consultó la castaña.
—Te acompaño— se ofreció la más baja.
—Vayan, Momo y yo iremos a arreglar la habitación para Mina— la pareja se perdió entre los pasillos.
—No se separan ni dos minutos— dijo Mina refiriéndose a Dahyun y Momo.
—A veces es incómodo, pero es mejor verlas así porque están felices— suspiró Chaeyoung. —Por cierto, ¿Ray se quedará contigo?—.
