•Draco•
Una vez escuché una frase que decía "la calma luego de la tormenta", fue hace muchos años que la oí, yo era un niño, hacía unos meses que mamá me había despertado a la madrugada y me dijo que debía estar calladito como ratón, que nos íbamos muy lejos, yo quería despedirme de mi abuela, pero estaba durmiendo.
Todavía no entendía la situación, pasé meses sin ver a mi abuela, en todos esos meses veía como mamá y papá trabajaban mucho, nos mudabamos seguido también. Por las noches, cuando fingía dormir, escuchaba llorar a mamá, no entendía porque lloraba.
Meses estuvimos esta clase de vida nómade, no estábamos más de dos semanas en un mismo lugar, a veces no teníamos para comer, pero no debía estar triste, mañana sería otro día, mañana tendría para comer. Yo veía como papá fingía no tener hambre y así poder darnos su ración de alimento.
Hasta que llegó un día que dejamos de mudarnos, que papá y mamá consiguieron trabajo fijo, que la comida no faltó, ya no oía llorar a mamá, y ahora papá no debía fingir estar lleno.
En su momento no entendí la frase, la calma luego de la tormenta, ahora sí la entiendo. Ya crecí, ahora comprendo que todas esas historias de hadas que nos traerían suerte que me contaba papá tenían su granito de verdad.
•🎭•
Estoy recostado junto a Harry, él todavía duerme, así que me tomo mi tiempo para observarlo, sus facciones están relajadas, las pestañas bañan sus mejillas y el cabello lo tiene desparramado en todas las direcciones posibles, me río al verlo.
Su nariz está colorada... acaricio su mejilla, está muy fría, que raro, si estaba tapado.
Miro y... claro, eso es lo que pasa, en la noche debí tomar todas las frazadas para mi solo, mejor voy a cubrirlo.
Comienzo la complicada labor de desenredar las frazadas de mi cuerpo y lo cubro a él, me sostengo en un brazo mientras que con el otro estoy llevando una manta más fina sobre Harry, pero en un mal movimiento pierdo el equilibrio y caigo sobre él despertandolo en el proceso.
—¿Qué pasó?— Preguntó con su voz mañanera, mientras que yo estaba tirado sobre él, vaya, esto es muy raro desde cualquier punto de vista.
—Yo solo quería taparte— Respondí en un suspiro, aunque mi voz salió amortiguada, ya que mi rostro estaba en su pecho. — No pienso levantarme— Le advertí mientras giraba la cabeza para poder verlo a los ojos.
Comenzó a reír mientras me abrazaba muy fuerte, hasta que le dije que me iba a aplastar y me respondió que era la idea.
Estaba tratando de que me suelte, cuando siento que me besa, un simple roce de labios, pero yo quería más, y él por lo visto también, ya que me soltó.
Lo sujeté del rostro suavemente y comencé a besarlo, moviendo mis labios sobre los suyos, sonriendo al sentir que mordisquean los míos, haciendo que nuestras lenguas se junten, que vuelvan a encontrarse.
Pero la posición es incómoda, así que comienzo a moverme para poder quedar sobre él, ahí es cuando la siento, a su erección.
Él deja de besarme, yo dejo de besarlo, nos separamos lo suficiente para que nuestros labios se sigan rozando, lo observo bien, y le sonrío.
Bajo mi cabeza hasta la altura de su cuello y siento como se estremece, me aseguro de respirar pausadamente, mientras doy una lamida en el lóbulo de su oreja.
—¿Te ayudo con eso?— Susurro mientras sonrío al sentir como apreta mi cintura.
— N-No hace falta... puedo darme un baño de agua helada— Responde con la voz ahogada, entonces muevo mi cadera, logrando que nuestros miembros hagan fricción, demostrandole que yo también tengo una erección.
No me responde con palabras, sino con acciones, de un movimiento quita mi remera y comienza a acariciar mi espalda mientras mueve su cadera, logrando que la fricción aumente, robándome pequeños gemidos.
Meto mis manos entre su remera para poder acariciar su pecho, pero me concentro en jugar con uno de sus pezones, mientras lamo y beso su cuello, allí, detrás de su oreja.
Su remera desapareció junto a nuestros pantalones, solo nos queda la ropa interior, el sudor perla nuestras pieles, gemidos son lo único que se oyen en la habitación.
—¿Qué dices de bañarnos juntos?— Le pregunto mientras comienzo a besarlo.
—Hay que ahorrar agua ¿no?— Responde, nos levantamos sonriendo mientras nos dirigimos al baño entre besos y caricias.
•🎭•
Entre sonrisas cómplices estamos desayunando, en un cómodo silencio.
—Buenos días chicos — Saluda papá entrando a la cocina, le sonrío y hago el mayor esfuerzo de mi vida para no reírme de la cara de Harry. —¿Hace mucho se bañaron? Pregunto para saber si el agua ya calentó.
—No, pero ya debe estar, a Harry le gusta bañarse con agua fría — Respondo mientras escondo mi sonrisa tras la taza de café, en cambio Harry está más pálido que la nieve.
—Bueno voy a bañarme y a dormir un poco, anoche el trabajo fue agotador— Responde papá y veo como Harry vuelve a respirar con normalidad, sin poder evitarlo comienzo a reír.
—Eres una mala persona— Me dice haciendo un puchero, yo simplemente le guiño un ojo.
•🎭•
La calma luego de la tormenta, es un dicho muy lindo, es esperanzador.
Me hace creer que siempre va a venir algo mejor, por más que las cosas estén horribles, no siempre va a ser así.
Pero también hay otro dicho, que dice: Estamos en el hoyo del huracán. Eso significa que estamos en calma, pero no por mucho tiempo, solo es un simple descanso antes de que todo empeore de nuevo.
Y yo no sé en qué dicho me encuentro ahora, si la calma luego de la tormenta o el hoyo del huracán.
Y por eso mismo es que no sé que responder.
Harry me está mirando esperando mi respuesta, me sonríe nervioso, sus mejillas están ruborizadas, y el viento despeina su cabello.
El sol está entrando, decidimos salir a caminar, pero en un puente Harry me frenó, me dijo que le gustaba, que eso ya era obvio, me dijo cosas hermosas, me besó la frente, y luego me preguntó si quería ser su novio.
Y yo me tilde, porque mil dudas inundaron mi mente, pero esos dos dichos resuenan en ésta.
¿Estoy transitando la calma luego de la tormenta o sólo me encuentro en el hoyo del huracán?
Miro a mi alrededor, casi no hay gente, el sol se refleja en el río, Harry se ve hermoso, mi corazón está descontrolado.
—Sí — Susurro mientras lo abrazo.
Él también me abraza, nos abrazamos, nos balanceamos abrazados, sonreímos, murmuramos cosas inaudibles.
Siempre debes elegir el camino del amor, no importa si es fácil o difícil, ese va a ser el camino correcto, no lo olvides.
Me había dicho mamá cuando era pequeño, y yo le prometí que así lo haría.
Estoy cumpliendo mi promesa, elijo el camino del amor.
Y mi amor es Harry.
• • • 🎭 • • •
HOLIS!!! ahr
Éste es el último capítulo 😭
Falta el epílogo nada más sjssjsn
No sé ustedes, pero amé esta historia, si tiene sus detalles, pero quitando esos detalles la amé ahj
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Universidad Hogwarts
Fanfiction••• Una historia de dos jóvenes que quieren cumplir un sueño, pero para poder hacerlo deberán trabajar duro, y no solo para aprobar unas materias, sino también para poder encontrarse. una historia de dos jóvenes que van a emprender un viaje metafóri...