Diciembre
Aquelarre Choi–Bebé, deja de patearme, cariño, a papi le duele. -JeongHan portaba con orgullo una barriga de seis meses de embarazo, su niño estaba sano, creciendo como es debido, y muy a gusto pateando como si estuviera en una pelea dentro del vientre del rubio.– ¡Cheollie! -gritó el rubio lloriqueando y pataleando en la cama.
–Hey, ¿qué pasa por aquí? -SeungCheol se asoma a la habitación que comparte con el rubio.– ¿Que tienes, bebé? ¿Quieres agua? ¿Sangre? ¿Tienes frio? ¿Te duelen los pies o la espalda? ¿Que quieres cariño?
–Quiero que tu hijo deje de usar mis costillas como saco de boxeo, soy frágil. -JeongHan abultó sus rosadas mejillas y cruzó sus brazos sobre su prominente barriga.
–¡Ay, ángel! -SeungCheol se echó reír a carcajadas. Le era muy chistoso el berrinche de su adorable esposo.
Pero a JeongHan no le causaba nada de gracia.
–¡Choi Vernon SeungCheol! ¡Eres un idiota sin corazón! -cuando escuchó la voz de su esposo sonar entrecortada y vio sus preciosos ojos miel brillantes por lágrimas, dejó de reír de inmediato y se arrodilló en el suelo.
–Perdóname, iubic, tienes toda la razón, soy un idiota.
–¡Párate de ahí! Me haces sentir mal.
Los cambios hormonales de carácter de JeongHan tenían loco a SeungCheol ya que se desesperaba por intentar qué su esposo volviera a estar contento.
–Mi rey, ¿que quieres que haga para hacerte sentir mejor?
–Solo has que deje de patearme, duele mucho y no he podido dormir nada. Tengo ojeras horribles, Cheollie, mírame. -sollozó.
–Oh, iubic... déjame ver que puedo hacer. -se subió a la cama y acarició el vientre de JeongHan sobre la tela de su suéter.– Príncipe, por favor cariño, no lastimes a tu papi JeongHan, sé que estás jugando, pero a él le duele mucho y se siente muy triste, no hagas sentir triste a papi, ¿quieres mucho a papi, verdad? Así que no lo quieres ver triste, ¿podrías dejarlo dormir un par de horas?
JeongHan calmó su llanto y cerró sus ojos.
–Se calmó, ¿como haces eso? ¿Por que él te hace caso y no a mi?
–Solo había que convencerlo. Duerme ahora, iubic.
–Despiértame antes de la cena, ¿si?
–Claro. Dulces sueños. -besó la pálida mejilla del rubio y lo arropó muy bien.– Así no tendrán frío. Duerman bien, mis angelitos.
–No te vayas muy lejos, Cheollie.
–No saldré hoy, tranquilo.
Cheol se levanta de la cama, camina hacia la puerta y apaga la luz de la habitación antes de salir, cerrando con cuidado la puerta.
Siguió al piso de abajo para revisar a sus hermanos menores en la habitación de HanSol.
Los adolescentes estaban acostados y muy pegados el uno del otro como de costumbre, arropados por cuatro sábanas, por lo que puede contar el rege, y viendo videos en la computadora del menor.
Cierra su puerta y termina de bajar las escaleras.
–¿Fuiste a ver a JeongHan? ¿Que necesitaba? -SoonYoung no era tan "activo" como antes, la paternidad le pegó muy duro, ya no irradiaba tanta "chispa" como antes.
Tenía ojeras, estaba un poco más delgado y totalmente entregado a su hijo de dos meses, igual que MingHao, aunque quien lo pasaba peor era el vrăjitor, pues por cada ruido mínimo que MingMing hiciese, ya tenían al pobre Soon corriendo a ver qué pasaba.
ESTÁS LEYENDO
ETHEREAL: Between Two Worlds
FanfictionPasa y lee. Pero una vez que entras a la mafia... solo puedes salir de dos maneras. Muerto. O muerto. Sucumbamos a los placeres nocturnos y el néctar de la sangre. 🥀JeongCheol 🥀Meanie Parejas secundarias: ✝️JunHoon ✝️SoonHao ✝️VerKwan ✝️SeokSoo Ad...