Tú & Yo por el mundo || Lando Norris

Capítulo 30

Estaba con Lando en algún restaurante a las afueras de la ciudad, la verdad desde ase mucho que no venía a un lugar como estos, pequeño y nada lujoso, pero si romántico.

-¿Irás al gran premio de Brasil? -Preguntó Lando sacándome de mis pensamientos.

-La verdad no lo sé, tal vez, pero tendré que llevar guardaespaldas. -Lando me miró incrédulo. -¿Qué?

-No nada, es solo que creo que tu padre y tus hermanos no me quieren. -Dijo un poco desanimado.

-Claro que te quieren, es solo que nunca les he presentado a algún novio, eres el primero. -Le dije para no hacerlo sentir mal.

-¿Y Gian? -¿Gian? Espera un momento ¿A qué viene el tema? Oh esperen.

-Lando Norris ¿Estas celoso? -Le pregunté divertida.

-Yoooo, no ¿Cómo crees? Yo estoy aquí no él ¿Por qué le tendría celos? -Me dijo ¿Nervioso?

-Si claro ¿Entonces por qué no dices su nombre? -Levanté una ceja

-Simplemente "Gian" no me da buena espina ¿Si? Así que no quiero que te acerques a él. -Me dijo mientras me señalaba con su dedo índice.

-Ya ya, no te enojes. -Levante las manos en señal de inocencia.

La cena siguió entre risas y conversaciones divertidas, nos contamos unas cuantas anécdotas. Sentía que no me hacia falta nada, estaba feliz de tener a Lando a mi lado.

[...]

La cena terminó y Lando me llevó de regreso a mi casa. Antes de que me bajara del del carro Lando me abrió la puerta y me ayudo a bajar.

-Extraño la privacidad en tu departamento. -Me dijo mientras de daba un beso delicado.

-Yo igual, pero mi padre quiere tenerme cerca, por mas que le insista n me dejará regresar, al menos no ahora. -Su cara fue de pocos amigos, estoy segura que en este mismo momento Lando esta deseando que mi padre no estuviera.

-Debería llevarte a mi casa, allá hay mas privacidad. -Su respuesta me dio ternura y causo un efecto en mi que hizo que me sonrojara. -Ya vi tus cachetes todos coloraditos ¿Qué estarás pensando?

-Nada, solo en lo que nunca hemos podido terminar. -Le dije con un sonrisa pícara.

-Si quieres vamos a mi casa.

-No , gracias, elijo quedarme otro mes en la mansión, a que mi padre y mis hermanos te demanden por secuestro.

-Ok, vengo por ti mañana en la mañana para irnos.

-Sip, nos vemos luego. -Le di un pequeño beso en los labios y nos despedimos para que entrara a la mansión.

A la mañana siguiente estaba metiendo mis cosas a una pequeña mochila, medicamentos, celular, cargador e incluso no sé por que por metí dulces. Todo ya estaba listo, mis dos maletas y mi mochila ya solo faltaba que Lando viniera.

Mariano dijo que nos iríamos juntos en el jet de él, invitó a algunos amigos mas y a nosotros obviamente. Sonó el timbre de la mansión y antes de que llegara a a puerta Margarita, nuestra empleada la abrió.

-Joven Lamborghini. -Espera un momento ¿Lamborghini? Yo estoy esperando al joven Norris.

-Por favor Margarita, llámame Gian. -La chica al momento se sonrojo.

-Lo siento, es que tengo ordenes de mantener es respeto hacia los invitados. -Margarita es dos años mas grande que yo y es la hija de Martha, mi nana.

-No me vas a perder el respeto por llamarme por mi nombre, querida. -Antes de que dijeran algo mas los interrumpí.

-Ya puedes retirarte Margarita. -La chica me miro con fastidió, pero me obedeció. Es mas que obvio que no soy de su agrado.

-No tienes que tratarla así, es una chica como cualquier otra. -Dijo Gian mientras me miraba.

-No quiero sonar egocéntrica, pero ella trabaja para mi y no tiene que meterse en los asuntos de otros. -Le dije a Gian quien no dejaba de mirarme raro.

-Según yo trabaja para tu padre. -Me reclamó

-Antes de que fuera internada, la propiedad pasó a mi nombre, y con ella las nominas de los que en ella ayudan, las nominas se pagan con el dinero de la empresa y la empresa ya es mía en su mayoría, lo que quiere decir que yo les pago. -Le dije triunfante.

-No sé si solo sea yo, pero no eres del agrado de la chica.-Me dijo lo que ya sabía.

-No solo eres tú ¿Viniste a? -Le pregunté

-Vine a ver a mi hermana.

-Ella y Alexander regresaron a Mónaco la semana pasada, pensé que te dijo.

-Si, me dijo que iría a Mónaco, pero no me dijo cuando, oh, supongo que Alexander te invitó al gran premio.

-Si ¿ya te vas? -Me dijo señalando mis maletas.

-Si, solo estoy esperando que lleguen por mi.

-¿Quién?

-Lando. -Creo que mi respuesta no fue de su agrado.

-Ouh.

Después de esa no tan agradable conversación lo invité a pasar y ahí estuvimos platicando hasta que el timbre sonó de nuevo y otra vez Margarita abrió la puerta.

-Lando, que agradable sorpresa. -Soy yo o a esta chica le gusta MI NOVIO.

-Gracias, Margarita ¿Esta Alessandra? -Se escucho la voz de Lando al otro lado, en ese momento iba a entrar a la sala pero Gian me detuvo haciéndome señas de que escucháramos un poco más.

-Por favor llámame Maguis, así me llaman mis amigos. -¿Y donde quedo el respeto? Gian solo trataba de aguantarse la risa.

-Gracias ¿Y Ale? -Lando se mantenía firme a su petición.

-No esta, pero puedes pasar. -Eso fue mucho incluso para mi.

-Chica, creo que están intentando bajarte a tu novio. -El comentario de Gian nos causo gracia.

Así que que decidí entrar en acción y rescatar a mi novio de esa peligrosa e incomoda situación.

-Ya es suficiente Margarita, puedes seguir con tus deberes. -La chica me volteó a ver con una mirada, que si las miradas mataran ya estaría diez metro bajo tierra.

-Odiosa riquita. -Susurro, pero logré escucharlo.

-No olvides quien financia tu nomina, así que cuidado de como te refieres a mi. -La tomé por el brazo y me miro con odio.

-Aún así no puedes correrme ¿Olvidas quien es Martha y que ha hecho por ti? -Intentó amenazarme.

-¿Eso crees? -La mire desafiante.

-Eeeeh, yo creo que tenemos un vuelo te tomar. -Lando al rescate, me tomó por la cintura alejándome de Margarita.