El Atril 5: Retorno

CAPÍTULO 11

Papá analiza a Merlín con una larga y penetrante mirada, la cual el mago aguanta estoicamente.

- Así que tú eres el que tantos dolores de cabeza nos está dando...- dice finalmente, tras haber escuchado toda la historia.

Caron sobrevuela a su alrededor, mirándolo con admiración. Su tamaño se ha reducido a dos tercios al traer a papá pero parece encontrarse perfectamente.

- ¿Ya le conocías?- pregunto sorprendida. Sé que Merlín ha viajado por varios libros, pero no pensé que hubiese coincidido con mi padre.

- De oídas. Cuando alguien se dedica a... jugar... con lo que no debe, tarde o temprano los guardianes nos enteramos. Teníamos pendiente una reunión para ver qué hacer con él. Especialmente cuando amenazas de muerte a uno de ellos para que te dé el objeto puente.

Me giro hacia Merlín, horrorizada

- No iba en serio.- se excusa.- Necesitaba salir y White no parecía dispuesto a colaborar. Y no son juegos, sino experimentos científicos. Algún día se reconocerá mi trabajo.

- Jugar con el orden establecido es peligroso. Las normas existen por algo. Si querías saber más, podrías haber acudido a... bueno, diría al guardián de tu libro, pero ya sabemos cómo es Nimue... pero dado que eres mestizo y puedes viajar a donde quieras, podrías haber ido a cualquier otro libro y haber preguntado.

- Eso no habría tenido el mismo valor y me hubiese limitado al conocimiento ya adquirido.

- No veo qué valor científico tiene el querer acostarse con mi hija...

Merlín carraspea levemente incómodo.

- Eso es simplificar mucho el asunto... - responde finalmente.- Además, de haber sabido que era hija de un guardián habría tenido más cuidado.

- Lo importante es, ¿cómo sacamos a Francesco de aquí?- interviene Matt con tono seco tras fulminarlo con la mirada.

Papá se acomoda en la silla sobre la que está, apoyando el codo en el respaldo.

- Estamos andando en terreno desconocido.- admite sin tapujos.- Nunca se había dado un caso como este. Pero en base al funcionamiento de los libros podemos dar por hechas algunas cosas. La primera es que este individuo es, sin lugar a dudas, la fuente de energía de Francesco. Así que el método más rápido para acabar con todo esto, es matar a la fuente. Muerto el perro, se acabó la rabia.

Puedo ver cómo Merlín palidece levemente. Sabe que habla muy en serio.

- A mí me parece bien...- acepta Matt.

- ¡Matt!- exclamó sorprendida.

Papá esboza su sonrisa característica, satisfecho de que alguien le haya dado la razón en sus radicales métodos para solucionar problemas.

- Nadie va a morir.- recalco mientras le sostengo la mirada, molesta.

- Ya matasteis una vez a Francesco, no es para tanto...

- ¡No fue lo mismo! Ademas, hablas de matar a Merlín a sangre fría...

- Si esa idea no te convence, está la opción de no hacer nada.- me indica con calma y un ligero encogimiento de hombros.- Cuando se le acabe la energía a la fuente, ambos caerán muertos.

- ... papá, esa tampoco es una opción.

- Esta vez estoy de acuerdo con Anna.-interviene Matt.- Durante el tiempo que tarde en ocurrir eso Francesco podría hacer mucho daño, por no mencionar que su objetivo es Anna.