El primer amor de Zenitsu. PAUSADA

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Aquellas palabras hicieron pensar al rubio, el conocía a TN, el sabia que aquella chica era buena, que no dañaría a una persona, mucho menos si se trataba de su madre, era imposible por lo que se formo una sola razón lógica por la que la chica frente a el pudo haber cometido aquella acción. 

-Tu madre, ¿era un demonio?- La rubia asintió con un movimiento de cabeza, el sonido que salía de ella le indicaba a Zenitsu que aquel suceso había marcado a TN y también había sido la causa de su desaparición por tanto tiempo. 

-La vez que nuestros caminos se separaron, me dirigí a Tokio...- La rubia había comenzado a contar aquello, Zenitsu prestaba atención a todo lo que decía mientras en su interior, sus sentimientos comenzaban  a revolverse, sentía felicidad por verla de nuevo, se sentía terrible por haber roto una promesa y a la vez, su interior le gritaba que era una mala persona.

...

Las calles de Tokio tenían muchas mas luces que de donde ella venia, se escuchaba animado y había muchas personas las cuales portaban un estilo muy distinto al que ella portaba, aunque las personas la miraba extraño por vestir un kimono, con el cual cubría la espada nichirinto, ella disfrutaba de ver los vestidos de las mujeres de ese lugar.

-Todo es tan grande, hay distintas tiendas y las personas se ven tan elegantes, ¡es genial, tendré algo nuevo que contarle al abuelo!- aunque quería salir a explorar mas no debía olvidar su misión.  

La calle que tomo la guio hasta el lugar que su cuervo le había informado, una gran casa, muchas luces y música en el interior, todo parecía una simple fiesta, al momento de entrar su rostro se puso pálido al ver lo que hacían ahí. Hombres buscando la compañía de una bella mujer, aquel lugar no era mas que una casa de acompañantes nocturnas. Iba a salir corriendo de ese lugar pero la voz de aquella fémina de cabellos azules la detuvo.

-¿Que hace una pequeña aquí?- TN observó a esa mujer, hermosa y llenas de curvas. -Por tu ropa, ¿vienes buscar trabajo? Lo sospechaba, la mayoría de aquí vino a corta edad. Sígueme, debes conocer a nuestra jefa y conocer las reglas.- El informe de su cuervo mencionaba a una demonio, si quería cumplir la misión debía seguir a la mujer que caminaba delante de ella, entre mas rápido la encontrara mejor, así podría salir de ese lugar. 

-Mi señora, una nueva chica solicitando trabajo.- No podía ver mucho a través de la puerta pues la figura de la mujer cubría bastante, luego de escuchar una voz mas imponente decir que pasara se armó de valor y entró en aquella habitación. 

-Buenas noches, así que quieres trabajar aquí.- A simple vista, la dueña de aquella voz era una mujer de 30 años, hermosa, tenia una larga cabellera rubia platinada y sus ojos eran de un verde esmeralda, portaba un kimono negro y entre sus manos sostenía un abanico rosa.

-Me presento, mi nombre es Hanako Kirishima, y a partir de este momento, soy la dueña de tu vida.