直接冲突 : CAPÍTULO 13

143 25 5
                                    

TEN

LA NOCHE DEL CUMPLEAÑOS DE YUEXIN

A medida que los días seguían su transcurso, en Ten aumentaba esa sensación de sentirse raro con respecto a Dejun. Era habitual que no se hablasen, pero lo que no era tan habitual era que no se cruzasen por la vivienda. Es decir, desde la primera "pelea" lo hacían menos que al principio, claro, pero después de esos besos, se evitaban de forma exagerada. 

Por momentos no sabía quién evitaba más a quién, tampoco sabía qué pensaba su roomie sobre su persona, se repetía que, seguramente, repulsión, pero cuando recordaba sus acciones esa noche, no podía serlo. Alguien que te tiene asco no haría lo que Dejun hizo con él. Sentía otra cosa y Ten, por su parte, estaba asustado de volver a verle el rostro, porque sabía que las ganas de pegarle un puñetazo se habían esfumado por completo.

Kun no era suficiente para distraerlo de todo eso y además, Lucas tuvo que aparecer a confundirlo otra vez. 

Al parecer su ex-novio había decidido que Ten era el amor de su vida y no todas esas personas con las que se pasaba de fiesta en fiesta y de cama en cama.

Al parecer los chicos como él no saben lo que quieren y cuando se aburren de jugar con la gente, se piensan que su billetera va a arreglar los problemas. 

Lucas venía de una familia adinerada y no conocía lo que conllevaba el estudio o el trabajo, tampoco tenía intenciones de hacerlo. No lo juzgaba por sus elecciones, pero a veces le molestaba que él pensase que solo con su gorda billetera, podría obtener cualquier cosa.

Algo fatal era que, sí se le ocurría venir a buscarlo a Taipéi, no tendría dónde esconderse.

Si su ex realmente estaba decidido a encontrarlo, lo haría fácilmente.

Terminó de cerrarse el último botón de su camisa beige y ya estaba listo para abandonar el departamento de Kun. Su outfit no era tan cómodo porque los jeans no le daban mucha libertad, pero sí que se veía bien y se lo admitió a sí mismo en el espejo. Pantalones ajustados negros, unas vans clásicas, un arete en forma de cruz en su oreja derecha y unos anillos en sus manos que le hacían juego con una cadena simple de metal que adornaba su cuello.

¿Qué pensaría Dejun si me viera así ahora?

Ignoró cuando su propia voz reprodujo esa pregunta en su mente y se arregló un poco el cabello. 

Más allá de su conexión con su compañero de academia, no le había mencionado a Lucas y mucho menos lo de Dejun.

Sus desahogos se los había tragado Lili y la pantalla del celular del chico se atiborró de audios en cuanto se enteró de ambas cosas. Para empezar, a Lili no le agradaba Lucas, se llevaban muy mal y le dijo que se quedase tranquilo, que ella lo asesinaría antes de que pudiera dejar Bangkok.

Él rio amargo ante ello, deseaba fuertemente que su mejor amiga encontrase alguna manera de detenerlo, pero de nuevo, Lucas podía e iba a hacer lo que se le antojase.

Segundo, a Dejun lo detestaba y le dijo que sencillamente quería ahorcarlo y preguntarle qué demonios le sucedía. Ten no entró en mucho más detalle, no le contó cómo se sintió. Sabía que tenía mucho para soltar, pero aún no encontraba las palabras para ello y solo lo hizo ver como que estaba igual de confundido que ella.

Lo cual no era mentira, estaba muy confundido, no obstante, había más. 

P.M ; ✉Hombres. Por eso prefiero a las mujeres.

P.M ; ✉Eso te pasa por gay.

P.M ; ✉Mentira, Tennie. Te quiero.

C.L ; ✉¡Lalisa! T T

C.L ; ✉Yo también te quiero.

(...)

No era ajeno a las discotecas, de hecho, le agradaba salir de fiesta y esa noche en particular, lo necesitaba más que nadie en el mundo. Ansiaba tomar alcohol, divertirse y bailar con sus compañeros toda la noche, sería la primera vez en una verdadera celebración luego de semanas de arduo trabajo. 

Comenzó tranquilo, todos los invitados sentados en unos sillones que rodeaban una mesa que parecía ser como para unas quince personas. Ten no se molestó en contarlos y cuando las primeras gotas de alcohol empezaron a hacer efecto en su sistema, su humor se fue aclarando y el ambiente tomó más color.

Las próximas horas envolvieron el lugar con música hecha específicamente para bailar y luces neón que recorrían todas las direcciones posibles. Estaba tan feliz, que ni siquiera el fuerte olor a cigarrillo parecía poder arruinar esos momentos que vivía con Kun y el resto de los chicos.

A eso de las cuatro de la mañana pasadas, estaba acurrucado con su compañero en un rincón de la discoteca. Ten no podía distinguir bien el rostro impropio, pero no le importaba, porque disfrutaba la manera en la que era tocado y besado.

Entonces escuchó que le dijo:

—Vámonos.

(...)

Caminaron juntos por unas poco transitadas pero iluminadas calles rumbo a la parada del bus. 

El tailandés se sentía invencible gracias al alcohol y se forzaba a creerse que era la primera vez que se sentía tan feliz estando con otra persona.

En esos instantes pensó que debía formalizar las cosas con Kun, irse del departamento de Dejun y darle una patada en el trasero a Lucas.

Ninguna de esas tres cosas te sería fácil, deja de mentirte. 

Se enojó con la voz que le susurró eso, así que se vengaría.

—Oye, Kun. —susurró serio, con la cabeza encima del hombro del opuesto, ya estaban sentados en los asientos de espera.

—Dime.

—Vamos al departamento de mi roomie, él no está y queda mucho más cerca.

straight conflict ‹ xiaoten;tenxiaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora