Dinero Sucio ～ Wos [TERMINADA]

La Noche De Anoche

Todavía no estaba segura de cómo me sentiría, es verdad que amaba a Valentín, pero Tadeo a pesar de sus estupideces también me hacia sentir algo, por eso sabía que la distancia de esos dos me estaba haciendo bien, de cualquier modo en algún momento iba a tener que enfrentar mis problemas, no podía escapar para siempre 

Me desperte en la madrugada, ya me había desacostumbrado a dormir tan cómoda en mi casa que me quedaba la manía de despertarme a la mitad de la noche. Tenía a Valentín abrazandome a mi lado, lo que me hizo sonreír, por fin lo tenía nuevamente conmigo, aunque las dudas acechaban mis pensamientos

Salí de la cama para bajar a la cocina, como amaba ese lugar, abrí la heladera y solo encontré agua, era obvio que hacía casi dos semanas no estaba allí, no tenían nada para comer, ¿que podía esperar de dos hombres solos? Busque entre los cajones algo para comer y encontré unos chocolates que habia escondido en algún momento sintiéndome afortunada por haberlo hecho.

Me apoye en la mesada de la cocina a comerlo disfrutando de ese momento mientras mi vista se dirigía a la ventana de la habitación admirando las pocas estrellas que dejaba a la vista aquella noche.

Sentí pasos detrás de mí, lo que me hicieron voltearme automáticamente viendo que era Tadeo, un poco dormido, restregandose los ojos y sin remera apareciendo en la habitación

—No sabía que estabas acá - dijo en un bostezo

—Volví - dije encogiendome de hombros y el sonrió apenas dirigiéndose a la heladera para tomar un poco de agua

—¿Estamos bien? - pregunto ladeando su cabeza un poco haciéndome sonreír y rodar mis ojos

—Si, pelotudo - dije casi que divertida y el se rio

Me senté en la mesada de la cocina para terminar de comer el chocolate mientras en tomaba el agua y jugué con mis pies en el aire

—¿Te convenció Valentín? - preguntó apoyandose a mi lado en la mesada mirándome de reojo

—En realidad ya quería volver, extrañaba, los extrañaba aunque me hagan perder la cordura - dije rodando los ojos pasando mi mano por su cabello a lo que él se rio mirándome

—La próxima vez - dijo poniéndose entre mis piernas yendo a acariciar mis muslos y alzando su barbilla para llegar a rozar mis labios con los suyos —Vamos a escondernos mejor para que no nos encuentren

—No va haber próxima vez - dije tragando saliva por la distancia que estaba teniendo, el solo sonrió de lado  y tomó mi mentón

—No estoy tan seguro de eso - terminó de acercar su boca tomando mis labios con los de el en un beso suave pero profundo recorriendo con su lengua la mía con delicadeza separándose para luego pasar su pulgar sobre mis labios —Buenas noches Mimi

Deslizo sus dedos por mi pierna hasta la rodilla y se fue de la habitación dejándome con la respiración bastante agitada, no se rendía, yo tampoco me oponía pero era insistente y eso también me gustaba. Me baje de la mesada negando con la cabeza mientras subía las escaleras, mi cabeza era un real desastre de eso no tenía dudas

°

Estar en la casa de Agustín me había hecho acercarme más a lo que fue mi trabajo cuando empecé, la calle, mi padre me lo había prohibido cuando casi me matan pero ahora me habían dado ganas de estar ahí, más después de haber pasado las últimas dos semanas con Agustín y los otros chicos.

Obvio Tadeo y Valentín no estaban de acuerdo pero habían aprendido a cerrar el orto y dejarme hacer lo que yo quería, para evitarnos conflictos innecesarios.