Duelo de rivales

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Inmutables, así se encontraban los rostros de Kaisen y Celtian al escuchar al dueño de la disquera que acababa de formular una enorme incoherencia en esa junta.

-Ri... Ri...¿Qué?- habló su hijo matando el silencio.

-Si, hijo, lo escuchaste- separó ambas manos enseñando lo obvio -Los fans los han convertido en rivales- el silencio era terrible -Y puedo decir que, esto ayuda mucho a la publicidad de la disquera-

-Pero, ¿Por qué?- la violinista de Celtian no daba crédito a lo que oía.

-Según parece, tienen estilos contrapuestos, pero muy fuertes entre las masas y eso genera discordia entre la gente-

-Es lo más ridículo que he oído en todo este tiempo- su hermana habló en romaní -Es absurdo- nadie le entendió nada -Si él y yo estamos saliendo desde hace meses, ¿Cómo pueden pensar eso?-

-Gaia, nadie te entiende, estás hablado en romaní- acotó Yue -Dea, traduce- pidió serio.

-Dice que es ridículo, absurdo y completamente hilarante- eso último lo dijo ella -Pero bueno, a las cosas hay que llamarlas por su nombre- estiró los brazos por encima de la cabeza -Somos rivales, Kaisen- se incorporó -Bien, como ya todo está dicho y hecho...- caminó a la puerta -Me voy a buscar a mi hijo-

-La reunión no terminó- se detuvo al escuchar la voz del señor Row.

-Si, bueno, pero yo tengo que ir a buscar a mi hijo a la guardería donde lo dejé-

-No es la primera vez que haces esto, Dea- la señaló con una mano -Tienes que comprometerte más con la banda o tendrás que irte- todos abrieron los ojos al tope.

-Este es el tiempo que puedo darles, no tengo más- no se dejaría intimidar en lo absoluto -Mi hijo siempre será mi prioridad-

-Entonces, tendrás que irte- al terminar la oración, Celtian se levantó por completo -¿Y ustedes a dónde van?-

-Se llama lealtad, señor Row- Yue abrió la puerta para todos -No somos una simple banda, somos amigos, somos familia y si ella se va, nosotros también- inclinó la cabeza -Digan adiós, Celtian, nos vamos-

La vocalista se despidió con dos dedos en su frente y tiró de su hermana para sacarla de allí, después de decir adiós con un sutil movimiento de su mano; Nicko, como se esperaba, salió en completo silencio; Touya hizo una reverencia como cualquier oriental y Lina, por último, les lanzó un beso a todos siguiendo las huellas de sus amigas.

-Buenas tardes- cerró al salir.

-¡Quiero que los destruyan!- golpeó la mesa al sentirse insultado.

-¡Padre!- su hijo se incorporó después del golpe -¿¡Acaso perdiste la cabeza!?-

-¡No! ¡Solo quiero que les den una lección y les enseñen humildad!-

-Con todo respeto, señor Row- Keilot intervino para no hacer la situación más grande -No existe banda en este mundo más humilde que Celtian-

-Keilot tiene razón- Gojo se encontraba igual que todos -No se les ha subido la fama a la cabeza, en lo absoluto- aseguró -Las chicas viven en una pocilga y pudiendo estar en un lugar mejor, sabiendo bien que viven con un niño- indicó -Yue y Lina aún siguen viviendo con sus padres, a pesar de que ahora ganan un buen dinero y por último, Nicko y Touya, se manejan en transporte público de un lugar a otro, como cualquier estudiante universitario-

-Ahorrense los comentarios- los miró de uno a otro -La única manera de educarlos es arriba del escenario y espero que lo hagan bien- apuntó a cada uno -¿Ustedes no tienen argumentos?- preguntó desdeñoso a Sukuna, Toji y Geto.

Una nota más [Jujutsu Kaisen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora