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"______ Hargreeves"

Día siguiente y última oportunidad para entrar al escondite de la oficina de papá. El día de mañana regresaría de nuevo y no sabríamos cuando se nos presentaría una oportunidad como la de ahora.

Ben junto con Vanya habían quedado en distraer a mis hermanos, sin contar a Jack que también formaba parte de nuestro plan. Como decía, Ben y Vanya se encargarían de mis hermanos saliendo a dar la vigilancia por la ciudad, mientras que yo tenía la excusa que me quedaría entrenando con la Academia Umbrella junto con Jack, bajo el "cuidado" de Pogo.

Desayunamos normalmente como todos los días, lo usual. Cuando todos habían acabado sus platos, mis hermanos ya se habían ido, haciendo que comenzáramos con lo planeado. Allison usó sus poderes de nuevo en Pogo para apagar a mamá y al tener todo listo, habíamos entrado de nuevo a la oficina. Con una horquilla que tenía en mi cabello, abrí el candado del cajón como ayer y oprimí el botón para abrir la entrada del lugar secreto.

— Bien, solo algunos bajaremos, el resto se quedan por si ocurre algo — hablo observando una escaleras que llevaba a un lugar muy oscuro — Jack tú vienes.

— Yo voy con ustedes — habló Cinco — Diego tu también vienes con nosotros. Luther vigila si la otra academia regresa. Si llega a pasar en todo caso, salgan de la oficina y luego nosotros resolveremos en cómo salir. Allison ya sabes qué hacer luego con Pogo y Klaus...no cometas algo que nos pueda meter en problemas a todos.

Con lo dicho, hicimos caso. Ellos se quedarían acá y nosotros cuatros íbamos a entrar. Cuando entramos, la puerta se había cerrado ya, imposibilitándonos a ver. Entonces yo con mi poder de fuego, saqué una llama de mi mano que nos ayudaba a ver un poco nuestro camino. Y con una linterna que habían traído también ayudaba mucho. Con cuidado, fuimos bajando los escalones.

— ¿Qué pasó? — preguntó Diego cuando la llama que tenía mi mano se había apagado.

Intentaba e intentaba volver a encenderla pero era algo en vano. No podía.

— Este lugar bloquea nuestros poderes hasta un punto — supuso Cinco cuando intentó teletransportarse, pero al igual que yo, no pudo.

— ¿Deberíamos subir y regresar?

— No, tenemos que seguir — dije de una — debemos saber que oculta papá y debe ser ahora.

Seguimos avanzando a pasos lentos, con la pequeña luz que nos iluminaba la linterna que habían traído. Llevábamos varios minutos caminando derecho, sin hacer ningún cruce ni nada, el pasillo solo nos llevaba hacia delante y esto no parecía tener un fin. Pero a medida que más nos acercábamos, al fin podíamos ver algo. Caminamos un poco más rápido hasta poder llegar y era una puerta.

— ¿Nos haces los honores? — Me pregunta Diego viendo la cerradura de la puerta.

Con mi horquilla que se situaba en mi cabello, la uso como llave para abrir la puerta que tenía enfrente. Hacía varios movimientos hasta escuchar un click, una vez más pude abrir una cerradura sin ninguna llave. Tomé la manilla de la puerta y halé hacia atrás, pero no podía.

— La puerta no abre — dije intentando una vez más en abrirla con fuerza.

— Déjame intentar.

Diego me apartó a un lado y tampoco había logrado abrirla. Intento una vez más y no pudo de nuevo, hasta llegar el punto de enloquecer y apoyar sus pies en la puerta mientras seguía halando con mucha fuerza, teniendo su cara toda roja y con sudor.

— Hay que colocar un código.

Nosotros dos miramos a mi hermano que tenía al lado a Cinco. Había botones con números del cero al nueve.

Another Wish (Número Cinco y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora