Capítulo 13

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Las palmaditas en su rostro lo despierta. Lo primero que ven sus ojos es a su pequeño, quien sonríe al ver a su padre reaccionar.

—¡Pa' Min!—saluda el niño y se acuesta en su cuello, tal vez en una forma de abrazarlo.

—Buenos días, MinMin.—saluda esta vez su pareja.—Feliz cumpleaños.—levanta el desordenado cerquillo y besa su frente.

—Buenos días...—responde. Hace el amague de levantarse y el niño sale de su encima. Se estira en la cama, bajo la atenta mirada de su familia.—Buenos días.—responde más despierto.

JeongIn repite la última sílaba para responder el saludo. Como premio, recibe palabras bonitas y besos en las mejillas de sus padres.

—Levántate, preparé el desayuno.—avisa Chris. Palmea los muslos de su pareja.

Asiente. El mayor se levanta junto a su hijo en brazos y sale de la habitación para dejar que se cambie.

Ah, ¿qué maravillas le traerá el destino por su cumpleaños?

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El desayuno que prepara Chris es delicioso, pero claro que él cocina mejor.

JeongIn está sentado en su silla alta de gatito. Toma un pedazo de pollo sancochado y se lo mete a la boca para saborearlo. Está hecho un desastre de comida, pero el niño es feliz saboreando su desayuno.

—¿Te gusta, Innie?—pregunta el varón.

—Shi.—responde suavemente.

Los padres sonríen al escuchar al menor. Su pequeño retoño está aprendiendo rápido a hablar.

—¿Tienes planes para hoy?—pregunta esta vez a su pareja.—Pensé que te gustaría ir a visitar gatitos.

—Oh, vaya, ¿tan predecible soy?—bromea.

—O es que te conozco muy bien.—coquetea. Mira profundamente a los ojos de su novio ocasionando timidez en el contrario. Finalmente deja un beso en su frente y una caricia en su nuca.

El sonido del plástico chocando con el suelo y las risitas de infante llaman la atención de los adultos. JeongIn ha tirado su plato. Hay algunos trocitos de pollo regado por el piso.

—¡JeongIn!—se quejan los mayores y MinHo se levanta para limpiar.

El niño solo se mete a la boca el pedazo que se salvó de la caída mientras mira como su padre está recogiendo su desorden.

—Eres un niño travieso.—le dice. Toma la mejilla entre sus dedos y la jala suavemente.

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—¡Mira, Innie!

El refugio de animales es por lejos el lugar favorito de MinHo. Desde que vino a Seúl, ha ayudado con donaciones y con sus prácticas de veterinaria. Adora pasar tiempo con los animales que hay ahí.

Tuvo sus citas con Chris en ese lugar. Disfrutaron de jugar y pasar su tiempo con los gatitos y perritos del centro. Ah, los recuerdos emocionan su corazón.

Y se siente totalmente feliz de compartir ese lugar con su primogénito.

—¡Miau, miau!—señala el niño a un gatito acostado. El minino lo mira después de escuchar la voz desconocida, pero vuelve a acostarse.

Primerizos | BangKnowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora