Flufftober 2021

Día 3: Under the rain

Antes de leer...

Traducción: "Under the rain" se refiere a bajo la lluvia.

—¡Eres un idiota, Mikaela! —rugió Yuu con lágrimas en sus ojos y justo después de haberle dado una fuerte bofetada—. No quiero verte —y dicho esto, salió caminando hacia la salida.

El sonido de la puerta azotándose hizo eco en todo el apartamento. Diablos. Lo había arruinado de verdad. Él jamás le llamaba por su nombre completo, mucho menos se iba de esa forma por muy enojado que estuviera. ¿Qué había hecho? Empezó a sentir sus manos temblar y su corazón pesado. Tenía un nudo en la garganta.

Recapitulando, quizá todo había empezado cuando Yuu se molestó en el momento en que le contó que tendría que trabajar codo a codo con su expareja. Pero la gota que derramó el vaso había sido el hecho de que esta persona durmió en su hogar debido a una terrible tormenta la noche anterior. Hasta durmió en el sofá, con toda su ropa puesta.

No había pasado absolutamente nada, que conste. Amaba a Yuu con todo su ser, y perderlo por alguien a quien había superado hacía mucho sería una estupidez. Lo tenía muy claro y por eso no le pareció la gran cosa. Así que olvidó ponerlo en perspectiva.

Si fuera él, enloquecería de saber que el estúpido ex de su novio durmió en su hogar por alguna tonta razón, fuera tan válida como fuera. Pero aún así, quería pensar que sería lo suficientemente paciente para entender la situación y confiaría más en su pareja. Ah, se sentía más alterado ahora.

Caminó ida y vuelta en el pasillo tres veces, intentando decidir qué hacer. Y entonces un trueno resonó en la casa, seguido de una repentina llovizna.

—Diablos, se va a enfermar —pensó en voz alta, agarrando su aparaguas.

Se puso un abrigo y sin pensar más en ello, corrió en su búsqueda. Se dio cuenta, mientras avanzaba en medio de la lluvia, que incluso si Yuu decidía abofetearlo de nuevo o gritarle lo estúpido que era, no importaba. Aún si llegaban a terminar y le odiaba, justo ahora estaba tan preocupado de que pudiera enfermarse que no podía evitar seguirlo.

Lo alcanzó casi llegando a la estación de trenes. También iba corriendo por la lluvia. Sujetó su mano para detenerlo y meterle bajo el paraguas.

—¿Qué rayos sucede contigo? Dije que no quería verte —le gruñó apenas notó que era él.

—Ya sé, ya sé, es solo... —suspiró—. Te ibas a enfermar y yo...

—Eres un idiota —le interrumpió—. De verdad. A veces me sorprende que puedas ser más estúpido que yo, porque vamos, el cerebrito siempre has sido tú y...

—Solo soy estúpido cuando se trata de ti —aseguró y apretó un poco la base de la sombrilla—. Yuu-chan, entiendo que estés muy enojado conmigo. Yo también lo estoy por no haber pensado en como eso podría afectarte, pero te juro que no pasó nada. Ni pasó, ni pasará. De hecho, este es el único trabajo que aceptaré si esa persona esta involucrada. No pasará algo así nunca más.

Yuu suspiró. No era idiota. Sabía que no habían tenido sexo, vamos. Era el detalle de no habérselo dicho. Le molestaba. Y le picaba como una espina en el corazón, porque esa persona había estado jugando con su cabeza por unos días y justamente sucedía tal cosa. He ahí el origen de la pelea.

Sin embargo, viendo a un afligido rubio frente a él, que había corrido desde su casa a la estación para que no se mojara, que le prometía que no sucedería de nuevo... Ah, no podía con él, simplemente no.

—¿Lo prometes...? —susurró, elevando su dedo meñique para entrelazarlo con el suyo—. ¿No más trabajos con ese imbécil cara de burro?

—Por supuesto —rió debido al apodo—. No quiero burros en mi vida. No sé para qué los querría si te tengo a ti.

—¿Me estás diciendo que soy un burro?

—¡No! Eso no era lo que...

La risa de Yuu lo interrumpió. Se estaba burlando de su persona. Soltó un leve suspiro y sonrió. Le tomó de la cintura para acercarlo a su cuerpo.

—Tú sabes lo mucho que te amo —dijo en voz baja.

—Claro, amas al burro —se mofó mientras sus frentes chocaban. Mikaela rió.

Ahora se sentía en paz. La angustia que había sentido apenas minutos antes había desaparecido por completo. Así era Yuu. Le daba una sensación de paz maravillosa. Hacía sentir su corazón emocionado. Lograba hacer vibrar su alma. Yuu era para su vida y para sí mismo, lo que comer es para el cuerpo humano.

—Yuu-chan, tú eres la única persona que he amado y amaré tanto —susurró. Sus frentes estaban juntas aún y sus ojos se observaban con intensidad—. Es más, no puedes dejarme.

—¿Ah? ¿como por qué?

—Porque me moriría sin ti —respondió. Yuu se carcajeó, lo que le hizo sonreír avergonzado—. Okey, demasiado cursi. El punto es...

—Sí, me amas, lo sé —rozó sus narices —. Y yo a ti.

Entonces eliminaron la distancia y se besaron. La fuerte lluvia fue testigo de la brillante unión entre sus almas y corazones. Incluso los bañó un poco, porque Mikaela estaba bien contento besando a su novio y olvidó que sostenía el paraguas.

Últimamente soy fan de hacer a Mika un poco más idiota y a Yuu más serio xD, digamos, invirtiendo sus roles usuales

No sé ustedes pero justo vi los spoilers hace poco, así que esto me duele n.n

En fin, espero les haya gustado uwu

Bye!