Lost & found love [GoYuu]

CAPITULO ろく (6)

Nieve y pino

Con un fuerte dolor de cabeza y una tensión envuelta alrededor de sus ojos, Yuuji se arrastró fuera de la oscuridad solo para encontrarse con cuatro paredes negras. Su cuerpo era pesado como ladrillos, la boca seca como arena y había un dolor sordo por todas partes. El omega notó la silla de madera a la que estaba atado, cuerdas apretadas y cortantes. La única fuente de luz era una lámpara en el rincón más alejado, de un amarillo enfermizo.

La mente de Yuuji lentamente comenzó a procesar los eventos, ¿megumi ... sukuna ... Termino secuestrado? Lanzó una breve risa histérica, sacudiendo la cabeza ante lo absurdo. La burla de que me arrancaran el corazón solo para ser secuestrado en medio de una crisis nerviosa.

-La audacia de algunas personas es asombrosa.- murmuró.-no puede un hombre llorar tranquilo con su corazón roto.-

Un golpe sonó cuando una puerta gruesa se abrió detrás de él, cuatro pasos siguiéndolo e interrumpiendo sus cavilaciones.

Las figuras se redondearon frente al omega, un beta y un alfa. Aspecto promedio. La beta estaba cubierta de tatuajes; el alfa tenía una cicatriz corriendo por su muñeca. Ambos tenían cabello castaño, ojos castaños y estaban ligeramente por encima del promedio de estatura.

Se pararon frente a Yuuji con miradas en sus rostros, sus olores ácidos por la amenaza. Yuuji simplemente arrugó la nariz ante los olores, el cuerpo embotado por los efectos debido a los últimos años de lidiar con la ira de Sukuna.

Los pensamientos corrían por su cabeza a una milla por minuto; estos tipos eran claramente serios acerca de lo que sea que estaban aquí, y parecían más que listos para lastimarlo. El omega se preguntó por qué estaba aquí, ¿era una red de traficantes? Yuuji no se consideraba el objetivo típico de esos, aunque la gente estaba lo suficientemente enferma como para tomar cualquier tipo de omegas.

El alfa comenzó a hablar, pero Yuuji lo ignoró para examinar más la situación, la fuerza de los chicos y la seguridad de sus vínculos. Al final del día no sabía qué había fuera de esa puerta, cuánto respaldo tenían ni dónde estaban, actuar ahora sería una pérdida de esfuerzo.

Una bofetada dura, rápida pero poderosa, le hizo girar la cabeza hacia un lado y lo sacó de sus pensamientos. El aguijón ardiente alcanzó un segundo después. Cuando el adolescente de cabello rosado se recuperó de la conmoción y se volvió hacia los dos, se encontró con la cara del alfa mucho más cercana a la suya.

-Responde, omega.-escupió.

Yuuji frunció el ceño cuando la salvia golpeó su rostro, sin apreciar el acto repugnante.

-¿Cuál fue la pregunta?-Preguntó, viendo como los labios alfa fruncían el ceño y se preparaban para otro golpe.

Se libró del dolor cuando el beta tiró del hombro del alfa hacia atrás.-Tomalo con calma y no dejes que te afecte deberías de darle una puta oportunidad de responder.-puso los ojos en blanco.

El alfa gruñó hacia su contraparte, quien lo ignoró y dio un paso adelante, empujando al alfa a un lado.

-Eres itadori yuuji, ¿no es así?- La beta hizo la pregunta con un toque de burla.

Yuuji asintió levemente. El beta caminó la pequeña vuelta alrededor del asiento de Yuuji casualmente antes de detenerse abruptamente detrás de él.